Capítulo 5

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Ryusei ha vuelto y Lei es la más feliz que ha estado en meses.

"Bienvenido a casa", susurra, envolviendo sus brazos alrededor de él.  Él responde, apoyando su cabeza sobre la de ella y cerrando los ojos.

"Estoy en casa."  Su voz es baja y tranquila, suave como la seda y cálida como el verano.

Permanecen así un rato más antes de soltarse el uno al otro, ambos han perdido la silenciosa compañía y el consuelo que el otro brinda.

"Kyoya y Harry volverán pronto", ofrece Lei, mirando a su marido con astucia.  Él tararea sin comprometerse, pero hay un destello de anticipación en sus ojos que no oculta, junto con la cariñosa media sonrisa que su hijo siempre provoca.

La puerta se abre y se cierra, y los pasos se dirigen hacia la casa.  Todavía están a una distancia, pero ella puede escucharlos tan claramente como si estuvieran en la habitación contigua, y Lei sabe que Ryusei los escucha también, porque sus sentidos son tan agudos como los de ella, si no más agudos.

Los pasos se detienen antes de acelerarse, recorriendo el camino que conduce a la puerta principal.  Uno se arrastra detrás del otro, delicados pasos de gato a la carga de Kyoya.  Cuando salta por la puerta, solo le ahorra un asentimiento antes de sacar sus tonfas y lanzarse hacia Ryusei, quien lo esquiva y lo levanta por el cuello como un gato enojado.

Harry se acerca a la puerta, agarrando la correa de su bolso y arrastrando los pies.  Ella no conoce a Ryusei, no sabe nada sobre el padre de Kyoya más allá de su trabajo en China.  Él es un extraño y ella está asustada, pero Lei puede ver la comprensión del amanecer en sus ojos mientras observa el afectuoso mechón de pelo que irrita a Kyoya y el abrazo no tan reacio que le da a Ryusei.

"Harry", dice, "este es Hibari Ryusei. Mi esposo".

Eso es todo.  Solo puede esperar que Ryusei lo apruebe ahora.

De lo contrario ... bueno, tendrá que recurrir a uno de sus muchos planes de respaldo.

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Ryusei es alto, fuerte, inteligente y muy aterrador.  Él lo sabe, su familia lo sabe, y la mayoría de las familias yakuza y mafia lo saben.  Menos conocido es que Ryusei en realidad tiene debilidad por las cosas lindas, un rasgo que parece ser genético, a juzgar por la cantidad de perros callejeros que Kyoya logra recolectar.

Mira fijamente a la chica que su esposa e hijo encontraron y decidieron adoptar.  Ella es diminuta, mucho más diminuta de lo que había sido Kyoya a su edad, y está claramente incómoda bajo su escrutinio, a pesar de la cara valiente que pone.

"Es un placer conocerte", se apresura a salir, inclinándose tan rápido que su cabello cae sobre su rostro, y tiene que apresurarse a recobrarlo.

Ryusei deja a Kyoya de nuevo en el suelo, colocando una mano en su hombro para evitar otro ataque.  "Es un placer conocerte también", dice, y lo dice en serio.

Heather Riona Potter, nacida el 31 de julio de 1980 de Lord James Potter y su Lady Lily.  Huérfana a la edad de 1 año y abandonada en la puerta de la hermana de su madre, Petunia, quien se casó con el gerente de Grunnings, Vernon Dursley, tres años antes del nacimiento de Dudley Dursley.

Asistió a la Primaria King George con calificaciones estelares en el primer trimestre, antes de bajar al promedio.  Según todos los informes, callada, tímida y con baja autoestima, intimidada por su prima y su pandilla.

La negligencia equivale a abuso.  Una situación que le pone los pelos de punta cada vez que la presencia, pero demasiado común, especialmente en una línea de trabajo como la suya.

 ¡Harry Potter y Katekyo Hitman Reborn! 4 {finalizado}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora