63. Marienplatz

713 47 26
                                    

Pasé el control con "tranquilidad", en realidad no había parado de llorar desde que me había separado de los labios de Juan Pablo, pero ya era hora de ser una señorita decente y no una llorona. No os equivoquéis, nunca me lamenté de haber tomado decisión de irme unas semanas a Múnich.

Me esperaban unas once horas de avión, no iba a poder dormir así que decidí darle un pequeño gusto a mi niña interior y me cargué mis pelis favoritas de dibujos animados en mi tablet. La espada mágica, El rey león, La bella y la bestia, Coco y Hermano oso me acompañarían en mi largo viaje.

Al final me pude quedar dormida durante unas horas. Llegamos a Múnich, hacía un frío horrible, cogí mis enormes maletas y me fui directa a la entrada para coger mi taxi.

Llegué al apartamento que había alquilado, era bastante acogedor y bastante grande como para una persona sola. Eran como las ocho de la tarde y como buena maniática del orden que era, me puse a ordenarlo todo. Mientras tanto llamé a mis padres y luego a Simón.

-¿Ya llegó?- Preguntó Simón.
- Sí, hace un ratito. Prefería llamarte cuando llegara al piso- Dije.
- Ya, ¿Cómo es aquello?- Preguntó.
- Es bastante bonito y tiene unas vistas a Marienplatz preciosas- Dije.
- ¡Qué ganas de verlo todo!- Dijo ilusionado- Y bueno, obviamente para cuando llegue el momento, ya la habré echado de menos lo suficiente
- Yo te voy a echar de menos también hasta que te vea- Dije- Pero tampoco va a ser tanto tiempo, además te pienso llamar todos los días.
Por cierto, avísame a los chicos.
- Espere, estoy con ellos- Dijo y puso el altavoz.
- Hola chicos, ya he llegado, la casa es genial y sí, hace muchísimo frío. El piso es bastante grande y tiene unas vistas muy bonitas- Dije.
- Vaya, contestó a todas las preguntas que pensaba hacerle-Dijo Isaza.
- Ya, es para que no gastes saliva- Dije riendo.
-¿Se encuentra bien?- Preguntó Martín.
- Estoy cansada, sólo eso- Dije.-¿Juan Pablo no está ahí?
- Nos ha dicho que tenía que estudiar- Dijo Martín- Creo que se va a encerrar unos días.
- Eso le viene bien, pero no lo dejéis mucho, tiene que despejarse también. - Dije.
- Nos encargaremos de él, no se preocupe. Ahora lo llamaré para avisar de que llegó bien- Dijo Simón.
- Que se lo diga a sus padres, Clemencia casi me mata cuando le dije que no le iba a dar mi número- Reí.
- Si no se lo dice él, lo haremos nosotros. No se preocupe-Dijo Isaza.
-¿Cómo está Juan?- Pregunté.
- Usted se fue para descansar de todo esto, no le pensamos contestar- Dijo Martín.
-Tienes razón... bueno chicos, me voy a dar una ducha, mañana hablaremos. Os quiero y decídselo a mis chicas- Dije y después de que se despidieran, colgué.

Me puse la televisión, gracias a Dios tenía Netflix. Empecé a ver Friends. Nunca había visto la serie en orden de capítulos, y hacía unos meses, Juan Pablo me obligó a empezarla desde el principio con él. Estaba siendo un poco duro verlo sin él ya que siempre estaba haciendo comentarios de todo y siempre se reía del mínimo chiste que dijeran. Me encantaba aquella serie, pero más me encantaba verla junto a él. Decidí quitarla, me estaba doliendo demasiado la soledad. Me puse Pretty Little Liars, un clásico para mí, me encantaba aquella serie.
...........................

Me desperté en el sofá, supongo que me había quedado dormida viendo la serie. Efectivamente, la televisión estaba encendida y ya iba por la cuarta temporada, yo iba por la segunda... Miré el reloj y eran las una de la tarde, mi estómago me pedía a gritos comida, ya que llevaba sin comer desde hacía casi veinticuatro horas. Decidí salir a la calle para comprar comida, pero antes iría a un restaurante a almorzar. Esperaba que me pusieran de comer porque los horarios de comida de los alemanes eran muy distintos a los míos...
Salí de casa lo más abrigada que pude. Llevaba puesta una camiseta térmica debajo del jersey más abrigado que tenía, era de color mostaza. Sonreí al acordarme de Juan Pablo... Estaba nevando así que me puse las botas y unos leggins bastante abrigados.

Punto Y Aparte #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora