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Después de que las bestias caídas llegaran al Planeta de la Bestia Caída, nunca volvieron a ver a ningún sub-bestia, y tampoco vieron nunca a ningún hombre bestia; todos los años, los hombres que venían a entregar cosas del Imperio Bestia ponían las mercancías en una zona fija, pero no tenían ninguna interacción con estos hombres bestia.
Ni que decir tiene que la acción de Bruno de traer de repente a un sub-bestia fue especialmente llamativa. Aunque el cuerpo de este sub-bestia estaba rojo por las quemaduras del sol, y su cara estaba tan agrietada y pelada que no se podía ver cómo era, pero en última instancia, era un sub-bestia, ¡ah!
Aunque muchas de las bestias caídas aquí ya no eran hombres bestia, pero siempre tenían sus corazones puestos en sub-bestias. Hoy, al ver que había un sub-bestia delante de ellos, fueron instantáneamente incapaces de aguantar más, tanto que una bestia caída directamente entró en celo y se precipitó hacia Bruno que estaba sujetando a Jones con la boca.
Aunque aún conservaban el recuerdo de su época como hombres bestia, ahora ya no se diferenciaban mucho de las bestias reales. Con lo locos que eran los animales naturales para aparearse, ellos también podían ser así de locos. Algunas bestias caídas eran incluso peores que los animales.
Al ver a una bestia caída de ojos rojos correr hacia él, Bruno se sorprendió. Él conocía a este tipo. Durante el último ciclo de celo, este tipo se volvía loco y era terriblemente letal. Para sentirse un poco mejor, este tipo incluso se golpeaba la cabeza contra la piedra hasta que su cabeza se llenaba de sangre... ¡Bruno no podía hacer frente a un loco así!
En ese momento, Bruno se arrepintió un poco de su precipitada decisión de traer de vuelta al sub-bestia. ¡Los sub-bestias sólo daban problemas!
De todos modos, ¡seguro que su jefe encontraría una solución!
Bruno se volvió hacia la piedra donde descansaba el lobo blanco, pero inesperadamente descubrió que allí no había nadie. Mientras aún estaba sorprendido, escuchó un gruñido muy fuerte a su lado, ¡y entonces la bestia caída en celo repentino que corría hacia él ya había sido derribada por el lobo blanco! Después de derribarla, el lobo blanco se abalanzó sobre ella y la mordió.
Estas bestias caídas normalmente no se atrevían a provocar al lobo blanco. Después de todo, este lobo blanco era realmente poderoso, y su fuerza era asombrosa aunque no tuviera núcleo de bestia. Sin embargo, las mentes de las bestias caídas en celo no solían ser muy claras, así que cuando esta bestia caída fue atacada por el lobo blanco, se defendió y mordió al lobo blanco.
Las dos bestias caídas lucharon inmediatamente y se convirtieron en una masa enredada. A un lado, Jones ya estaba estupefacto viendo esta escena.
Cuando aquella bestia caída se precipitó hacia él, tuvo una premonición siniestra.
Había estado estudiando a los hombres bestia y a las bestias caídas todos estos años, y estaba muy familiarizado con las características de las bestias caídas. Naturalmente, vio que esas bestias no eran hombres bestia, sino bestias caídas.
Cuando los hombres bestia no tenían que luchar, generalmente no se transformaban en bestias. Después de todo, la forma humana era más conveniente. Aquí, sin embargo, todos los hombres bestia mantuvieron sus formas de bestia...
Ellos... ya no deberían ser hombres bestia, ¡sino bestias caídas!
Al llegar a esta conclusión, Jones se horrorizó sin fin. Con tantas bestias caídas, si caía en sus manos, ¿podría seguir viviendo?
No se atrevió a forcejear por miedo a atraer la atención de aquellos tipos, pero inesperadamente, un lobo blanco saltó de repente de un lado y se abalanzó hacia aquella malintencionada bestia caída en ese momento.
Un lobo blanco......
Jones se quedó mirando al lobo blanco, estupefacto. Había visto las formas bestiales de muchos hombres bestia, pero el lobo blanco que tenía ante sus ojos era absolutamente el que le resultaba más familiar.
Al ver la expresión tonta de Jones, Bruno hizo una mueca y luego tiró a Jones al suelo, azotando con la cola. Jajaja, este sub-bestia está aterrorizado ahora, ¿verdad? ¡Se lo merece! Este tipo realmente se atrevió a tirar de su melena, ¡así que tenía que darle un susto de muerte!
Pensando así, Bruno dio al cuerpo de Jones un azote de su cola.
La cola de Bruno en realidad no era dura, pero la piel de Jones estaba seca y agrietada por el sol, así que cuando recibió ese azote, la piel de esa zona se rompió inmediatamente, supurando sangre.
Pero ahora mismo, a Jones no podía importarle menos su herida. Sólo sabía mirar fijamente al lobo blanco.
¿Era Reynolds? ¿Reynolds, al que no había visto en treinta años? ¿Estaba soñando? No, esto no era un sueño... lo que significaba que realmente vio a Reynolds así como a tantas bestias caídas... ¡Este lugar era el Planeta de la Bestia Caída!
Jones acababa de pensar en este punto, y la lucha entre el lobo blanco y esa bestia caída en celo ya había terminado. El lobo blanco gruñó una vez más y se precipitó en su dirección.
Sin duda, Jones no tenía ni un poco de miedo esta vez. Al contrario, estaba dispuesto a recibir al lobo blanco que se precipitaba a su lado y luego frotaba su cabeza contra él. Como resultado......
El lobo blanco pasó junto a él y se abalanzó directamente sobre Bruno por un lado. Cayó sobre Bruno con dos patas delanteras y luego lo mordió.
Justo ahora, cuando Reynolds escuchó inicialmente la voz de un hombre que sonaba como la voz de Jones, simplemente lo consideró como su propia fantasía auditiva. Después de todo, el Imperio no permitiría que un sub-bestia viniera aquí. Pero después de echar un vistazo... No era una fantasía auditiva, ¡era Jones de verdad!
Aunque el cuerpo estaba rojo por las quemaduras del sol y también sucio, pero ese era Jones. Era imposible no reconocer a Jones.
Jones no llevaba ropa en la parte superior del cuerpo y sólo llevaba un par de pantalones. Estaba siendo sujetado por la boca de Bruno, y también dijo que tenía un compañero... Reynolds se quedó momentáneamente estupefacto. En ese momento, descubrió que una bestia caída en celo se precipitaba hacia Jones.
El cerebro no había conseguido reaccionar todavía, y Reynolds ya se había lanzado y había derribado a esa bestia caída. Después de la pelea, miró a Jones por el rabillo del ojo y entonces vio a Bruno azotando a Jones con su cola, lo que hizo que Jones sangrara.
¡Este maldito tipo!
Después de que Reynolds se deshiciera de la bestia caída, no dudó en correr hacia Bruno.
―¡Jefe! ¡¿Qué estás haciendo?! ―Bruno, que fue golpeado inexplicablemente por Reynolds, empezó a gritar y a forcejear violentamente.
Sin embargo, Reynolds no se preocupó por él e incluso le mordió directamente en la piel.
―¡Rawr! ―rugió Bruno, gritando de dolor sin cesar. ―¡Jefe, está loco! ¡¿Qué hace golpeándome?!
Reynolds seguía sin hablar. Su mente estaba en confusión; simplemente no sabía qué decir y sólo pensaba en golpear a Bruno. Bruno, viendo la apariencia despiadada de Reynolds, se dio cuenta de que era inútil pedir perdón. Sólo podía luchar con Reynolds y entonces gritó a su compañero pidiendo ayuda: ―¡Jesse! ¡Sálvame!
Jesse, el león de color más oscuro, hizo la vista gorda ante Bruno.
Si hubiera sido antes, cuando su compañero fue golpeado por el jefe, aunque fuera culpa de su compañero, y aunque los dos juntos siguieran sin ser rivales para el jefe, Jesse, no obstante, subiría a echarle una mano, al menos ayudando a bloquear el ataque del jefe.
Pero ahora... Jejeje, ¡ese tipo Bruno volvió con un sub-bestia, que sólo llevaba un par de pantalones, en la boca!
El sub-bestia había luchado constantemente mientras estaba en la boca de Bruno; su cuerpo estaba cubierto con el olor de Bruno, y el cuerpo de Bruno también estaba cubierto con el olor de ese sub-bestia.... Bruno también parecía muy orgulloso de sí mismo cuando volvió con un sub-bestia en la boca, ah.
Jesse no fue a ver a Bruno, directamente giró la cabeza hacia otro lado; en cualquier caso, el jefe tenía un sentido del decoro a la hora de ponerle la mano encima a alguien, y no llegaría tan lejos como para morder a Bruno hasta matarlo.
Efectivamente, Reynolds tenía sentido del decoro cuando le ponía la mano encima a alguien. Después de derribar a Bruno, lo soltó y se volvió hacia Jones.
Tenía muchas ganas de acercarse y hablar con Jones, pero por el momento era totalmente incapaz de hablar. Además, hacía treinta años que no se veían, y Jones podría haber tenido otra pareja...
Al olfatear, Reynolds percibió los olores de dos hombres bestia en el cuerpo de Jones.
Uno de ellos era extremadamente intimidante. Sólo por este olor, podía juzgar que el hombre era más fuerte que él... Jones era realmente notable; como era de esperar, podría encontrar una mejor otra mitad después de perderlo.
Y el otro olor... era por supuesto el olor de Bruno. Bruno había puesto a Jones en su boca. Su olor cubría cada parte de Jones, y la parte superior desnuda de Jones también tenía marcas de mordiscos de los dientes de Bruno.
Reynolds se quedó mirando a Jones durante un rato. Sabía que Jones lo reconocía, pero en cierto modo no se atrevía a acercarse a Jones...
―Jefe, ¿por qué me pegaste a mí también? ―Bruno empezó a levantarse del suelo, sintiéndose especialmente agraviado, y en ese momento, Reynolds, que acababa de darle una paliza, giró de repente su cuerpo y se abalanzó de nuevo sobre él.
―¡Jefe! ―Bruno miró a Reynolds con incredulidad. Después de haberle dado una paliza, ¿por qué iba a volver a por más?
Por supuesto que Reynolds volvería a por más. Este tipo Bruno casi hiere a Jones, lo que era simplemente imperdonable.
Jones, viendo a Reynolds una vez más ir a golpear a ese león, de repente empezó a reír. Riendo y riendo, y luego lloró.
En realidad Reynolds seguía vivo e inesperadamente aún se acordaba de él.
Estaba indescriptiblemente feliz, pero sus lágrimas seguían fluyendo.
Reynolds volvió a derribar a Bruno. Entonces giró la cabeza y vio que Jones estaba llorando.
Jones siempre había sido muy fuerte. Reynolds nunca lo había visto llorar, salvo aquella vez que se había convertido en una bestia caída. Sin embargo, Jones lloraba ahora... Reynolds estaba muy preocupado. Apartó a Bruno de una patada y luego se acercó a Jones con mucho cuidado.
Quería lamer las lágrimas y la mancha de sangre de la cara de Jones, y quería proteger a Jones bajo su propio vientre, pero si lo hacía, el compañero de Jones seguramente se enojaría mucho, y tal vez se enojaría con Jones.
Reynolds era ahora una bestia caída, y le era imposible dar felicidad a Jones. Así las cosas, ¡no podía ir a destruir la felicidad de Jones!
Reynolds corrió alrededor de Jones ansiosamente. Parecía querer acercarse a Jones, pero no se atrevía.
¿Cuándo habían visto las bestias caídas de alrededor a su jefe así? Por un momento, incluso sospecharon que les fallaba la vista. Después de pensarlo, de repente tuvieron una sospecha; ¿su jefe se había interesado por este sub-bestia?
Pero eran bestias caídas y su constitución no se correspondía con la de los sub-bestias. Era inútil enamorarse de un sub-bestia, ah. Además, era totalmente imposible que un sub-bestia se enamorara de una bestia caída. ¿No vieron que estaba tan asustado hasta el punto de llorar?
Aquellos tipos miraron a Reynolds con cierta simpatía, y luego vieron que el sub-bestia se secaba las lágrimas y se volvía hacia su jefe.
Su jefe... El enorme lobo blanco se quedó completamente inmóvil cuando el sub-bestia miró en su dirección, pero por alguna razón, la cola que tenía detrás empezó a moverse de repente, y esa cola blanca que se movía era especialmente atractiva.
Las bestias caídas de alrededor estaban prácticamente volviéndose locas. Jefe, ¡despierta! No eres un perro, ¡ah! Te hemos seguido durante tantos años, pero nunca te hemos visto mover la cola. Sin embargo, ahora, al ver a un sub-bestia, mueves la cola tan alegremente. ¿De verdad estás bien?
―¿El jefe está en celo? ―Bruno se arrastró hacia su compañero, Jesse, y miró al lobo blanco en el centro con asombro. ―La cola tiembla y el crisantemo está expuesto.
Jesse golpeó a su propio compañero en la cabeza, ¿no podría este tipo cortejar la muerte?
La suerte de Bruno fue bastante buena esta vez. Reynolds no escuchó sus palabras porque Jones abrazó de repente a Reynolds.
La cola de Reynolds inmediatamente se movió aún más alegremente, y las bestias caídas de los alrededores se sorprendieron nuevamente. ¿Qué vieron? ¡Vieron a un sub-bestia arrojarse a su jefe, una bestia caída!
¿El encanto de su jefe era tan fuerte que aún podía atraer a un sub-bestia incluso después de convertirse en una bestia caída? ¿Podrían pedir consejo?
Estas bestias caídas estaban asombradas. Luego vieron a su jefe tumbado boca abajo en el suelo para facilitar las cosas para que el sub-bestia lo abrazara mientras miraba al sub-bestia intensamente, con los ojos llenos de amor.
Esto era... ¿amor a primera vista? ¿Su jefe se olvidó de ese sub-bestia en el que estuvo pensando durante tantos años? Aunque dicho sub-bestia no había enviado nada este año, el hecho de que su jefe pudiera seguir pensando en él durante tantos años significaba que sus sentimientos habían sido profundos y su relación seria.
―Reynolds... ―Jones agarró las orejas del lobo blanco y secó todas sus lágrimas en el pelaje del lobo blanco.
Se podría decir que Reynolds apreciaba mucho su pelaje blanco. Sin embargo, en este momento, dejó que Jones arruinara el pelo de su cabeza antes de enterrar su cabeza en la cintura de Jones, oliendo el olor de Jones.
Desafortunadamente, los olores de los otros dos hombres bestia interferían fuertemente con esto. El olor de Bruno era tolerable, pero el olor del otro hombre bestia simplemente hizo que Reynolds deseara poder encontrar a la otra parte de inmediato y golpearlo.
Sin embargo, este aroma parecía un poco familiar...De hecho, ¿no era similar al olor de ese chico Chris?
El olor de un hombre bestia tipo serpiente tan poderoso... No existía tal hombre bestia excepto la familia imperial. Pero este no era el olor de Chris, y Chris ya tenía un sub-bestia...
Reynolds olfateó de nuevo y de pronto descubrió que el lugar donde más pesaba ese olor era en el bolsillo de la cintura de Jones... Aprovechó que Jones lloraba a moco tendido para rasgar ese bolsillo con sus garras.
Las bestias caídas espectantes: ¿Qué quería hacer el jefe? ¿Sería que quería arrancarle los pantalones que le quedaban al sub-bestia? Este tipo de cosas no eran muy buenas, ¿verdad?
Además, este sub-bestia dijo el nombre del jefe. ¿Conocía a su jefe? Estas bestias caídas de repente pensaron en algo.
Bajo estas circunstancias en las cuales Jones era inconsciente, pero las bestias caídas circundantes todas lo vieron, Reynolds sacó varias frutas así como las escamas de Edgar que Jones puso dentro del bolsillo.
¡Así que sólo eran escamas!
Reynolds estaba tan emocionado en ese momento que aplastó las escamas y las frutas contra el suelo arenoso y luego empezó a lamer el cuerpo de Jones de pies a cabeza, prácticamente deseando poder tragarse a Jones hasta el estómago.
―¡Suéltame y escúchame! ―Jones se sintió muy incómodo al ser lamido e inmediatamente ordenó.
Reynolds se sentó obedientemente a su lado, moviendo la cola y con los ojos mirando atentamente a Jones.
―Esta vez caí aquí por accidente, pero al principio tenía pensado venir a buscarte. Es estupendo que estés bien. Han pasado tantos años y pensé que habías... ―Jones se quedó mirando a Reynolds emocionado, mirándolo de arriba abajo varias veces. Entonces, de repente, se dio cuenta de que, junto a los pies de Reynolds, varias frutas que no soportaba comer estaban pisadas hasta convertirse en papilla...
―¡Mis frutas! ―Jones se enfadó. Incluso estando tan sediento, ¡no estaba dispuesto a comer esas frutas!
―Ese... ¿ese sub-bestia es el que el jefe ha tenido en mente todo el tiempo? ―Bruno y las otras bestias caídas reaccionaron de repente.
Recordando que este sub-bestia había dicho una vez que su compañero era muy poderoso y que intimidarlo le haría acabar mal, Bruno no pudo esperar a cavar un agujero para enterrarse.
Incluso quería que el jefe le ayudara a arreglar al compañero de este sub-bestia... El compañero de este sub-bestia era su jefe, ¡ah!
¡Estaba jodido!