UN AMOR DESPUÉS DEL DOLOR

CAPÍTULO 15

Se dio la vuelta, para evitar que el rubio viera sus ojos llorosos y para salir de la oficina, no solo estaba dejando a Luis, estaba dejando al hombre que amo desde que era adolescente. Dejo su sueño de infancia para estar con el, el corazón de la que alguna vez fue una chica con sueños y que veía el mundo color de rosa. Se obligó a dejar atrás la fantasía para aceptar la realidad.

- Luis: todo pasa por esta oficina (dijo a sus espaldas captando su atención) si quieres volver a unirte al ejercito, si quieres una misión, incluso si quieres un trabajo, no te dará nada... entiende que debes regresar a la mansión DI SANTIS, es por el bien de los dos

Apretó los puños una vez más, la estaba acorralando una y otra vez, sabiendo que tarde o temprano tendría que pedir ayuda, tendría que hacer algo para sobrevivir. Suspiro dándose fuerzas, tenía muchos ahorros todavía, y ella no era una mujer derrochadora, lo que le daba tiempo suficiente para pensar en qué hacer para sustentar la casa. No le daría el gusto a Luis, no podía hacerlo, simplemente, ya no podía.

- chiara; no (dijo girando la cabeza para verlo una última vez con ojos llorosos) esto solo lo haces por ti, no caeré en tu juego... no esta vez

Salió por la puerta sin despedirse, ni decir nada más, sin notificarle a Luis que esa misma tarde tendría el divorcio ya firmado en su oficina.

A las fieras vio a unos incrédulos Rodrigo, Raymond y ámbar mirarla con curiosidad y algo de asombro, solo Raymond era consciente de que había pasado ahí dentro de la oficina del rubio, y no era de las personas que lo anduviera divulgando. Sintió su cuerpo tensarse por completo cuando escuchó las voces de Carla y Jessenia acercarse con mucha rapidez, ese era un encuentro que para el que todavía no estaba preparado, no todavía.

Salió de sus pensamientos cuando sintió unos brazos alrededor de su cintura, un olor levemente familiar y la calidez de un abrigo que anteriormente la había cobijado. Alzó los ojos para encontrar con el rostro del Ayala con tal seriedad y del sisa todo se volvió negro.

Ámbar abrió la boca a más no poder al ver que Raymond se había ido junto con chiara de la oficina, giró su rostro para preguntarle a Rodrigo si sabía que había pasado, pero el hombre tampoco se encontraba ya en el lugar que anteriormente ocupó.

Cuando Jessenia y Carla llegaron a donde estaba, tardaron unos interminables segundos para hacerla reaccionar y que ella pudiera mentir a lo que en realidad había pasado. No sabía que había significado todo eso, y lo cierto era que hasta no estar segura, no quería provocar un caos metiendo cosas en la cabeza de Jessenia.

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Una vez que Chiara salió de la oficina, Luis se dejó caer sobre las rodillas y luego se sentó recargándose en el escritorio, esas palabras habían dolido más de lo que deberían. Suspiro con frustración y su mirada se dirigió hacia la pintura de su padre colgada en la pared.

- Luis: ¿que debería hacer papá? (dijo al aire dejando caer su cabeza contra el escritorio)

Cuando Jessenia entró segundos después por la puerta, corrió hacia el al verlo en el piso, recargado sobre el escritorio y con el ojo izquierdo rojo. Luis solo negó con la cabeza incontables de veces, sin querer hablar de que había pasado en la oficina.

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El moreno la soltó una vez que estuvieron en el callejón al lado de la oficina de Luis, sintió que la chica seguía aferrada a el, pero supuso que era por la sensación de mareo que suelen darle algunas veces, aunque dejo de creerlo cuando sintió que su pecho estaba húmedo. Chiara estaba llorando contra su pecho otra vez.

- Chiara: ¿por qué hace esto? (Dijo sin separarse de él) no gana nada con acorralarme de esa manera, ni siquiera saca tiempo para Max, ¿por qué quiere su custodia? ¿Que gana torturándome asi?
- Raymond: (sin saber que otra cosa hacer, la abrazó contra su pecho y recargó su barbilla contra su cabeza, dejando que la chica sacara todo ese dolor que sentía) siempre ha sido un idiota (dijo haciendo que Chiara riera levemente)

Después de unos minutos, la mujer por fin se separó de él con el rostro rojo, siempre Solía involucrar sin querer al moreno en ese asunto. El hombre fue capaz de descifrar su mirada y se le quedó viendo fijamente, sin saber que decir para reconfortar, no cuando él estaba igual o peor que ella.

- Raymond: deje a Jessenia (dijo de improvisto haciendo a la mujer respingar levemente) lo que seguramente es el desencadenante de todo esto (suspiro com pesadez) ambos sabemos lo qué pasa entre esos dos... así que no me importo mucho el dejarla pero... (dio otro suspiro) pero Nadia no me siguió, como Max lo hace contigo, ella se quedó al lado de Jessenia

Chiara le vio sin saber que decir, el tener a Max a su lado era lo que le daba la fuerza necesaria para seguir adelante, pero para el moreno...

Sin medir sus acciones o simplemente ponerse a pensar al respecto, la mujer rodeó la cintura del moreno con sus brazos y se pegó a él. No era un gesto de lástima, pudo adivinar fácilmente el chico, era un intento de confort, de hacerlo sentir mejor, aún cuando ella también caía lentamente en pedazos. Raymond pasó sus manos por su cintura, pegándose a su cuerpo para recibir su calor y recargo su barbilla contra su cabeza, sin pensar en nada más que en el dulce olor que salía del cuerpo de Chiara.

Ambos estaban dejando salir todo ese dolor que los estaba consumiendo levemente por dentro.

Ajenos a unos ojos verdes que veían la escena con algo de curiosidad.

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Aclaraciones:

- Vemos cómo es el acercamiento que poco a poco tiene el uno con el otro, ya que siempre terminan encontrándose.

- También quería marcar una diferencia entre el tipo de madre que es Jessenia y Chiara, y como puede Jessenia manipular fácilmente a Luis sin que esté se dé cuenta. Aún no decido si dejarlos juntos al final o no, ya que es una relación demasiado tóxica, la que tienen el uno con el otro.

- Se ve un poco la envidia de Raymond por el tipo de relación que tienen Chiara y Max, y como trata de acercarse a su hija, aunque aún no es el momento, ya que a Jessenia terminarán por estallarle las mentiras de un momento a otro.

- Bueno la historia entre Melvin y Raymond es algo que terminará por unirlo a Chiara más adelante, y también les dará algunos dolores de cabeza.