UN AMOR DESPUÉS DEL DOLOR

CAPÍTULO 66

- Carla: ¿eh?
- Rodrigo: ¡su indirecta fue morder mi mejilla al decirle que no quería que cargar las bolsas o caminar delante de ella dejándola atrás!
- Carla: Rodrigo (murmuró sin poder creérselo)
- Rodrigo: ¡¿como querías que adivinara tus pensamientos si apenas y puedo comprender las reacciones de la gente?! ¿Por qué nunca me dijiste? (Espetó molesto)
- Carla: ¡no lo sé! (Le respondió empezando a llorar) y-yo creí que si te pedía tiempo tratarías de recuperarme pero.... ¡Pero tú aceptaste cómo si nada!
- Rodrigo: ¡CREÍ QUE ERA LO QUE TÚ QUERÍAS! (Grito)
- Carla: ¡ESO NO ERA ASÍ! (Grito llorando) yo solo quería más atención (dijo en voz baja)
- Rodrigo: (bajo la mirada sin poder creer la situación en la que se encontraba, antes de dirigir su mirada hacia la rubia) ¿como esperabas que yo supiera que eso era lo tu querías decir?
- Carla: (bajo la cabeza sin atreverse a mirarlo a la cara) no lo sé (murmuró)
- Rodrigo: ¿y por qué me lo dices ahora? (Dijo es voz baja) ¿por qué esperaste a que me casara?
- Carla: ¡NO LO SÉ! (Grito de nuevo) y-yo creí que tú no lo harías
- Rodrigo: ¡ERA MI DEBER! (Le gritó) ¡CONOCES ACERCA DE LOS TRATADOS!
- Carla: ¡PERDÓN! yo de verdad lo siento
- Rodrigo: (se tomó la frente con una de sus manos) eso no soluciona nada (murmuró)

Carla avanzó hacia él con rapidez, tomándolo desprevenido, jaló la mano de su cara y se arrojó sobre el, dándole un beso en los labios.

Aún sabiendo que eso no solucionaba nada, que él seguía casado y ellos separados, pero con cierto gusto, al ver la figura de su esposa y mirada azulada que los miraba desde el filo de la calle, salir corriendo antes de esa acción.

Rodrigo, que nota esa presencia, pasó sus manos por las mejillas de la rubia respondiendo el beso.

(•••)

Había dejado a Raymond dormido en la cama, lo cual le fue muy difícil, mientras salía a las calles de la ciudad a buscar a Max, donde recién empezaba a llover. Necesitaba hablar con su hijo antes que Luis, no sabía cómo se tomaría la petición del rubio.

Suspiro entrando en una cornisa, algo molesta de que la lluvia le detuviera, y algo extrañada de que estuviera lloviendo si hacía unas horas hacía un sol intenso. Suspiro de nuevo, caminando hacia la escuela de entrenamiento, donde seguramente estuviera su hijo. Cuando llego se sorprendió al ver que no estaba ahí.

No sabía que era, pero por alguna razón, sentía una sensación amarga en el pecho, como un mal presagio.

Tal vez era la lluvia, que por alguna razón se sentía impregnada de tristeza, porque un mal humor que le había causado Luis, no lo sabía, pero no le gustaba en absoluto.

Se dio la vuelta, dispuesta a regresar en busca de su hijo, pero lo único que alcanzó a distinguir fue el destello de la cuchilla que se dirigía a ella a gran velocidad, y demasiado cerca como para poder esquivarla.

(•••)

Se sentó en una de las rocas mientras abrazaba sus piernas flexionadas. No tenía ni idea de donde estaba, y no le interesaba m, miró al cielo mientras ponía su cabeza en sus rodillas, ¿por qué le molestaba tanto que Rodrigo besara a esa mujer? Lo conocía hace poco, y sabía que no estaba enamorada de él, ni siquiera le parecía "guapo", entonces ¿por qué le molestaba tanto?

Sintió que la lluvia empapaba su ropa, pero no podía importarle menos. Al menos no estaba llorando, y eso era un gran avance.

Tal vez no era que besara a la mujer, si no esa historia que nunca comenzaron. La destrucción de esa idea de una familia, que se había colado en su mente entre todas las palabras que habían compartido. Esa familia se al parecer nunca volvería hacer.

Suspiro de frustración, había sido una Idiota al pensar que podría tener esa familia con Rodrigo.

- Nadia: ¡TIA AURA!
- Aurora: (alzó la mirada algo asombrada al escuchar la voz de Nadia cerca de ella, la niña corría en su dirección junto con Max, ambos alzando la mano) ¿Nadia, Max? (Pregunto levantándose)
- Nadia: (la abrazó con fuerza, desconcertándola por completo) la vimos correr hace rato (dijo mirándola) ¿está todo bien?
- Aurora: (asintió sonriendo tiernamente y devolviéndole el abrazo) si, vayamos a casa

Se detuvo abruptamente, poniendo a Max y a Nadia tras de ella de forma rápida y lanzando un cuchillo, que la persona de enfrente a ellos esquivó.

- Nadia: ¿Aurora? ¡¿QUE ESTÁS HACIENDO?!

Lo último que pudo ver fue unos ojos negros antes de que todo se volviera negro.

(•••)

Sueño (RECUERDO)

Camino con tranquilidad, sin objetivo fijo, solo queriendo despejar su mente de todas esas emociones que lo confundían.

- Aurora: Raymond
- Raymond: (dirigió su mirada hacia ella que le sonreía cálidamente) hmp, ¿que estás haciendo?
- Aurora: (se rascó la nuca algo nerviosa, preguntándose si Rodrigo estaba enojado por lanzarle la lata o por regalar su helado) buscó a Rodrigo ¿ y tu?
- Raymond: (solo se encogió de hombros) nada
- Aurora: (negó) ¿y donde está la señora Salvatore?
- Raymond: (le dirigió una mirada molesta, que la confundió un poco) hmp
- Aurora: ¿qué pasa?
- Raymond: (suspiro) Chiara (dijo casi en automático)
- Aurora: ¿eh?
- Raymond: su nombre es Chiara, no la llames por el apellido
- Aurora: (le miró aún más confundida) no la conozco lo suficiente (dijo con algo de incomodidad)
- Raymond: (se encogió de hombros) solo hazlo
- Aurora: (suspiro cansada) ¿tiene algo que ver que sea el apellido del ex esposo?
- Raymond: (le miró más molesto) (le volvió a suspirar, República Dominicana y los DI SANTIS tenían una larga y tensa historia, lo que posiblemente explicaba la resistencia de Chiara hacia Aurora) no importa en realidad
- Aurora: (no evitó volver a suspirar) si no importara no te molestaría tanto
- Raymond: tsk (musitó) es solo un apellido
- Aurora: (le sonrió) si tú lo dices
- Raymond: (suspiro cansado)

Aurora le sonrió tiernamente, esa sonrisa que solo le había visto una vez, y que llevaba un poco de burla dentro de ella.

- Raymond: ¿que? (Espetó)
- Aurora: (amplío la sonrisa) ¡tú estás enamorado de ella! (Dijo con burla)
- Raymond: ¿eh? (Dijo algo sonrojado) no digas tonterías
- Aurora: no lo son
- Raymond: (desvió la mirada) tsk, tú que sabes de esos temas
- Aurora: (sonrió con un poco de tristeza) más de lo que crees (dijo aún sonriendo) mira esta por allá

El moreno giró su mirada, pero no vio a Chiara, suspiro con molestia dirigiendo su mirada de nuevo hacia Aurora pero esta ya había desaparecido, haciendo que diera un bufido aún más molesto, había caído por completo en su trampa.

- Raymond: ¿hasta cuando se burlara de mí esa mocosa? (se preguntó en voz baja volviendo a caminar)