CAPÍTULO 2

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Debía admitir, que a pesar de sus años viajando lejos de la ciudad, de estar siempre en peligro constante y en alerta, nunca se sintió más solo que en ese momento, porque el barrio nunca se vio tan sombrío cómo hasta ahora, ni siquiera cuando su hermano Melvin los atacó.

Pero sabía que todo era percepción, era el que se sentía miserable y vacío, aún cuando no lo admitiera.

Suspiro con pesadez, sujetándose la frente para darse un poco de calma y resistir esas inmensas ganas asesinas de ir a matar al rubio idiota que tenía por jefe, porque él era una persona pasiva, bueno no pasiva, sensata.

- Raymond; (Suspiro de nuevo. Sentía toda esa rabia en su interior y no tenía forma de sacarla) DEMONIOS! (Musitó con rabia)

Su mano impacto contra el pilar de su casa. En dolor en su mano calmó levemente su furia, pero no fue suficiente. Sigue golpeando el pilar una y otra y otra vez.

La mujer que amaba, aunque jamás se lo hubiera dicho, ahora prefería estar al lado de quien la persiguió por años, aquel que supuestamente era su mejor amigo. Y su hija, prefería a su madre por encima de él, aunque tal vez fuera su culpa. Por esa forma de ser que sólo él podía poseer, en la que siempre daba por sentado, o esperaba que las personas adivinaran lo que él sentía esperando que sus gestos poco claros logre fueran para las personas a su alrededor.

Cuando por fin se cansó, miro sus manos ensangrentadas. Al menos eso le había servido para enfrentar y disipar un poco su rabia. La rabia que lo carcomía por dentro y que le gritaba una y otra vez que fuera en busca de su venganza, que tomara a la que por derecho era su mujer y la recuperara a cómo diera lugar.

Pero no lo haría.

El mismo sabía muy bien el tiempo que Jessenia y Luis llevaban juntos, nada les había importado cuando lo hicieron y él no le tomaría la importancia que no le dieron a ellos. No era su deber. Después de todo, jessenia no era su esposa. Era la mujer con la que decidió compartir su vida, pero al parecer ella no valoraba eso. A ella no le importa que la eligiera, por fin después de tantos años cuando regresó de la ciudad, no le importó el hecho de haberle dado una hija. No les importo que el propio Luis tuviera una familia por la cual velar, aunque si era sincero, eso no haría ninguna diferencia, el rubio prácticamente tenía abandonados a su hijo y esposa.

Tal vez próximamente ex-esposa.

Sacudió la cabeza, eso no debía porque impórtale, lo mejor era que se ocupara de sus propios asuntos; miró su casa desalada una vez más antes de caminar y perderse en la oscuridad, después de todo, necesitaba curar sus manos.

(•••)

Su cabeza daba vueltas y sentía que en cualquier momento se iba a desmayar, pero en su lugar pasó sus manos hacia atrás y se apretó con fuerza la barriga de la cocina a sus espaldas. Su mano herida punzó dolorosamente, pero ignoró el dolor mientras trataba intensamente de permanecer lucida. De comprender la magnitud de las palabras que el rubio le había dicho. Tratando de decir que ya estaba todo solucionada y ella no podía decidir nada.

- Chiara: n-no comprendo (dijo apretando aun mas sus manos. Si lo hacia. Comprendía cada palabra que había dicho su esposo, pero su corazón, e incluso su mente se negaba a aceptar esa verdad)
- Luis: nos vamos a separar (repitió)

Cuatros simples palabras acababan con los años que estuvieron juntos como si fueran nada.

Ella bajo la mirada huyendo de la brutal honestidad de esos ojos azules que no mostraban ninguna calidez como lo habían hecho en el pasado. Esos ojos fríos que amenazaban con destruir lo que quedaba de su corazón. Apretó los ojos deteniendo las lagrimas en ellos sin atreverse a decir nada, no sabia que hacer, pues lo que estuvo temiendo por varios meses se estaba haciendo realidad.

- Luis: tu padre acepto recibirte en unas de sus casas, dijo que Jeison podría pasar por ustedes mañana y quedarse para cuidarlos

y la mujer volvió a apretar sus manos haciéndose daño. hablaba como si el no hubiese roto el corazón de su hijos en innumerables ocasiones ¿ERA MAS IMPORTANTE ACOSTARSE CON JESSENIA GARCIA QUE LLEVAR A SU HIJO A SU PRIMER DIA DE ESCUELA? ¿QUE ENTRENAR CON AL BASKET? apretó los ojos nuevamente y estrujo toda su alma para sacar un valor y una fortaleza que no tenia.

ANTES DE SER LA ESPOSA DE LUIS, O EX-ESPOSA, ERA MADRE. MAX ERA SU MUNDO y no permitiría que se viera involucrado en medio de esta situación. Sobre todo al comprender las palabras de Luis, cuando le dijo que su padre los recibiría en unos de sus casas. No permitiría que alguien de la familia DI SANTIS le hiciera daño a su hijo. Ella ya no era la heredera de esa familia, no lo era desde que era pequeña, y no permitiría que las normas antiguas y tontas pusieran en peligro el futuro, o la vida de su hijo pequeño, que no tenia culpa de lo que pasaba. La sola idea de que los ancianos de la familia quisieran entrarlo en esa vida, le daba el valor suficiente para plantearle cara a esa situación. Aun cuando su corazón se estrujara en su pecho dolorosamente.

- Chiara: N-NO SOY UNA MALETA A LA QUE PUEDAS DEVOLVER (dijo con el poco valor que tenia)
- Luis: (la vio con el ceño fruncido. No sabia que pretendía Chiara, pero tenia que dejarle las cosas claras. Había esperado tantos años para estar con Jessenia, y no permitía que Chiara lo echara a perder. no podía permitirlo. El tenia derecho a ser feliz) CHIARA (le dijo con voz dura) LA SITUACION NO VA A CAMBIAR (SUSPIRO) YA NO TE AMO

''NUNCA LO HAS HECHO''

- Chiara: (Quiso gritarlo. desahogarse de esa mentira que vivio durante años, pero no pudo, de su boca no salieron esas palabras acusadoras dirigidas al rubio, en su lugar, se guardó esos sentimientos en los más recóndito de su corazón roto. Solo era sentimientos infantiles que no le servirían para proteger a su hijo) n-no hablo de eso (dijo sin verlo a la cara) n-no modificare la rutina de mi hijo para darte gusto
- Luis: (frunció aún más el ceño. Él también había pensando en su hijo en un principio, pero eso no lo iba a detener cuando había cruzado la línea ya hace tiempo atrás. No cuando jessenia saco a raymond de su vida para estar con él) quiero a max, es mi hijo... pero eso no hará que me quede a tu lado

"DE VERDAD ES UN IDIOTA"

La mujer se guardó sus pensamientos una vez más. No entendía como en rubio no comprendía lo que quería decir. No necesitaba que le estuviera repitiendo a cada momento que las cosas se habían acabado. Necesitaba que comprendiera que trataba de proteger a su hijo. Sintió líquido caliente escurrir de su mano y se dio cuenta de que su herida se había vuelto a abrir, esa que le había gritado lo que pasaría el día anterior, y tal vez la razón por la que en ese momento no estaba haciendo una escena. Ignoro el dolor, pero este le dio la concentración suficiente para poder estructurar las palabras que necesitaba, salieron de su boca) no me refiero a eso (dijo sin tartamudear por fin) no me iré de la casa

UN AMOR DESPUÉS DEL DOLOR Donde viven las historias. Descúbrelo ahora