CAPÍTULO 80

21 8 10
                                    

- Rodrigo: así es, hace poco se hizo aliado del país de la República Dominicana

Chiara miró a Raymond cuando Rodrigo avanzó hacia ellos para hablar.

- Chiara: ¿es confiable? (Pregunto con extrañeza)
- Raymond: (se encogió de hombros) el está al lado de quien le conviene (dijo viendo al hombre) pero no, no lo es

Chiara le miró aun sin saber qué pensar, viendo a Rodrigo hablar con ellos asintiendo con su cabeza varías veces, pasados unos minutos, regresó con ellos.

- Rodrigo: está todo listo, nos separaremos para cubrir las dos

Chiara asintió viendo a Raymond, que no hizo comentario alguno.

(•••)

Entro con paso lento, analizando toda la situación, si hermano ya debería de haber llegado a la ubicación de Carlos, pero no lo había hecho, nadie de la República Dominicana. Entonces ¿para que en ese rastreador?

Bufo molesto, no entendía las intenciones que tenían.

Camino por el pasillo y vio a Josep lavarse las manos, mientras él agua se volvía roja, pero el rubio no parecía tener herida alguna, además de que acaba de llegar de una misión con Thomas. El rubio dirigió su mirada hacia el moreno y le dio una sonrisa algo retorcida.

- Josep: la chica (dijo mostrándole las manos aún ensangrentadas)

El moreno le vio sin interés volviendo a caminar, Josep le molestaba. Detuvo su andar, algo en su mente acababa de encajar por alguna razón.

Cuando llego a la puerta de la celda, supo que había acertado, la sangre comenzaba en uno de los lados del pasillo y seguía el patrón de arrastre por la celda hasta una de las esquinas, en la que la chica estaba tirada de lado con la respiración entrecortada. Su cabello cubría su cara, mientras la sangre cubría su cuerpo, contrastando con su piel, más pálida de lo usual. Sus heridas eran notorias y de muchas aún seguía sangrando, unas eran quemaduras, otras eran cortes limpios, como el filó de una navaja.

Eso era obra de Thomas y Josep, estaba seguro.

Camino con paso lento hacia ella y la miró con indiferencia por unos segundos. Salió de la celda, regresando minutos después con un cazo con agua y in trapo, suspiro con molestia inclinándose a su lado.

Limpio la sangre seca de la chica, escuchándola gemir de dolor, removiéndose levemente contra el, que ignoraba intencionalmente la presencia de la puerta.

- Orion: no creo que sirva de nada (dijo con calma)
- Melvin: ¿por qué?
- Orion: Josep no logró sacarle nada de información, así que lo repetirá mañana
- Melvin: (vio a la chica mientras la seguía limpiando) de nada nos sirve muerta (dijo con indiferencia)
- Orion: (lo miró por unos segundos, Melvin era muy serio, pero se notaba la lástima que tenía por esa torpe chica) no demores demasiado (dijo con molestia alejándose de la celda)

Melvin no dijo nada mientras continuaba con su trabajo, por unos momentos pensó en cocerla, pero no era su especialidad y no serviría de nada si Josep continuaba con ella al día siguiente, lo cual es muy probable, ya que aún no tenían noticias de Carlos. Se quedó completamente inmóvil segundos después al sentir la mano de la chica en su brazo con algo de fuerza ¿estaba fingiendo?

- Aurora: estás aquí (dijo con voz baja) Raymond

Melvin abrió los ojos sorprendido al escuchar ese nombre.

- Aurora: cuando regrese c-creí que t-te ibas a e-enojar porque m-mi cabello estaba corto (dijo con voz entrecortada) p-pero no estabas ahí

Melvin la miró fijamente por unos segundos, ella tenía los ojos casi cerrados.

- Aurora: ¿e-esta v-ves te quedarás a m-mi lado Raymond?

Melvin solo siguió mirándola, sin saber, por primera vez en muchos años, como debía reaccionar, cerró los ojos momentáneamente, abriéndolos después dejando ver toda su frustración, nada tenía sentido para el, ¿como alguien relacionado a Adrián podía ser cercano a su hermano!

- Aurora: no p-pongas esa c-cara

Dijo sobresaltándolo cuando pasó su mano de su brazo a su mejilla, dándole una sonrisa que solo terminó por confundirlo.

- Aurora: y-yo s-solo quiero q-que...

Dejó caer su mano mientras sus ojos se cerraban y su cabeza caía hacia atrás, evitando el golpe por la mano del moreno, Melvin la miró sin dar crédito a sus palabras, no solo por lo dicho, sino porque ya nada tenía sentido.

¿Que eran ella y Raymond?

(•••)

Miró al moreno lejos de ella, viendo la luna con mucho entusiasmo, no pudo evitar suspirar ¿de verdad Raymond quería estar con ella o solo era un plato de segunda mesa.

- Rodrigo: ¿está todo bien?
- Chiara: (dirigió su mirada hacia el moreno y asintió con la cabeza) todo bien (mintió) solo estoy algo preocupad
- Rodrigo: (asintió despacio) creo que esta podría ser nuestra única oportunidad de voltear la situación, y para eso necesitamos muchos aliados, aunque no sean confiables (dijo en voz baja viendo a David que iba con ellos) así que le pido por favor, que esté atenta
- Chiara: (asintió, viendo re reojo a David) ¿como fue que Raíz se alió a Lorenzo?
- Rodrigo: (le dio una sonrisa que la hizo sentir incómoda) no lo hicimos, el trato es directamente con la República Dominicana
- Chiara: (le miró sin dar crédito a sus palabras) siendo la República Dominicana tan precavida (dijo sin creerlo)

Rodrigo se encogió de hombros sin saber que decir.

- Raymond: creo que es algo normal

Escucharon tras de ellos, saltando un poco.

Rodrigo miró a Raymond dándole una sonrisa.

- Chiara: ¿por qué dices eso Raymond?

El moreno se sentó junto a Chiara, entre ella y Rodrigo, haciendo que este se moviera un poco hacia un lado, dejándolo confundido una que había mucho espacio, no tenía que meterse entre ellos.

- Raymond: son tiempos difíciles, además no creo que sea una alianza
- Rodrigo: (analizó la situación por unos momentos) ¿más bien como un acuerdo?
- Raymond: (asintió) supongo que si, deben tener algo que él quiere
- Rodrigo: (asintió con calma) supongo que por eso Lorenzo fue con el gobernador de allá
- Chiara: (les miró por unos momentos) David está casi a su mismo nivel (dijo en un susurro)
- Raymond: (asintió) no debemos confiarnos (dijo viendo a Rodrigo) será mejor hacer una guardia

Ambos asintieron viendo de reojo a David.

(•••)

Tenía el ceño fruncido y las manos juntas, ese enredo de verdad le estaba causando dolor de cabeza, y por más que lo pensara, no podía formar un equipo efectivo paga esa misión.

- Alejandra: ¿qué tanto piensas?
- Pedro: (dirigió su mirada hacia su esposa y dio un suspiro) en toda la situación de Raíz
- Alejandra: (le frunció el ceño) ¿por lo de la esposa de Rodrigo?
- Pedro: (asintió con calma) hay algo más tras de todo esto (dijo Viéndola) es una misión de rescate contra la mafia napolitana, fueron como 5 militares
- Alejandra: (asintió pensativa sentándose junto a él) pero en ellos van Raymond y Chiara
- Pedro: (frunció más el ceño) eso es lo segundo (dijo viendo los papeles) si tenía el equipo de rastreo completo ¿por qué sólo llevar a Chiara?

UN AMOR DESPUÉS DEL DOLOR Kde žijí příběhy. Začni objevovat