NO ES CAPÍTULO

2.2K 103 6
                                    

Para: Oso.

Cabellos blancos.

Suaves según el momento.

Mirada dulce que solo me regalaba a mí y me hacía sentir amada aun cuando todo el mundo me odiase.

Cuerpecito que se acoplaba perfectamente a mi pecho y que consolaba mi dolor tratando de hacerlo suyo para que yo no sufriese.

Juguetón. La emoción sentida cada vez que le lanzaba la pelota o un simple palo.

El movimiento de sus orejas cuando venía de vuelta y la hermosa sonrisa que juraba se le formaba en el rostro.

Quizás era mi propia mente la que se la imaginaba, pero juraba que se dibujaba una enorme sonrisa en él cuando jugábamos.

Era como si todo estuviese bien.

Era como si con solo mirarme todo en mi mundo estuviese bien.

Su paciencia. La paciencia que me tenía cuando yo me estresaba.

Su forma cautelosa de acercarse. Tímido, hasta que lograba hacerse espacio cerca de mí y me susurrará un imaginario "no estás sola, me tienes a mí"

Como me esperaba. A donde sea que yo fuese, él se quedaba en la puerta esperando hasta mi regreso.

Como me recibía. Nunca nadie podría actuar o imitar tal emoción tan pura. Un brillo iluminaba su mirada y daba brincos sobre mi pierna para que yo le alzara y lo abrazara.

Su nobleza.

Su bondad.

Su protección.

Y su loca idea de creerse el perro más temible en su mentecita cuando en realidad era solo una bolita de pelo.

Su compañía. Como estaba a mi lado incluso cuando yo no quisiese estar con nadie.

Él me esperaba. Esperaba paciente y tranquilo. Con sus cejas gachas y ese suspiro que me hacía entender que hiciese lo que hiciese. Él jamás me abandonaría.

Lo extraño.

Y es tan desesperante saber que no lo puedo escuchar.

No lo puedo sentir.

No lo puedo abrazar.

Lo extraño y no puedo evitarlo.

No quiero evitarlo.

Te extrañaré siempre, mi pequeño osito.

Gracias por todo.

Gracias por tu amor.

Gracias por todos los años que me regalaste.

Gracias.

Gracias

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.



--------------------------------------------

Siento mucho que esto no sea un capítulo. Pero como pudieron leer, mi perrito falleció.

Así que quería rendirle un homenaje por aquí, porque él me acompañó durante todo el trayecto de éste fanfic. Se quedaba a mi lado y me veía mientras escribía.

Cuando me sentía frustrada por no saber como continuar el me acariciaba y sé que con ese simple gesto, me daba a entender que debía tranquilizarme.

A él le pertenece gran parte de toda esta historia y solo quería... mas bien necesitaba, darle su reconocimiento.

Y... ¿Saben algo? siento algo de rabia, porque todos continúan con su vida, tan normal como si él no hubiese existido. Cuando para mí significó el mundo entero.

En fin. Solo eso. Te querré siempre, mi pequeño Oso.

Dai.

Detrás de las Cámaras | Caché | TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora