Capítulo 33 - Rogers Centre

Start from the beginning
                                    

— ¡LLE...GA...MOS! –dijo con una voz cansada.

— Te hace falta cardio, amigo. Tienes que conseguirte un novio urgentemente.

— JA.JA.JA Tan graciosa –me dedicó una sonrisa sarcástica —dices eso porque por un lado los hombres te desean y por otro lado, las mujeres también.

— No es mi culpa tener tanto sex appeal, querido. Además, te he dicho que...

— Si, si... No me interesa, D --me interrumpió —solo cállate y vamos a pasar –tímidamente él toco varias veces la puerta y bastaron unos segundos para que una mujer de unos 45 años abriera la puerta.

— Mauricio, pensé que ya no vendrías –comentó la señora haciéndonos pasar.

— En realidad, casi no vengo, tenía bastante trabajo. Pero aquí mi amiga presente, necesitaba distraerse. Daniela, te presento a Miriam, Miriam ella es Daniela Calle.

— Mucho gusto, Miriam –extendí mi mano recibiendo un apretón de su parte —Un placer conocerla.

— ¿Y...bien? ¿Dónde está? –Mauricio parecía buscar a alguien con la mirada —por favor, Miriam, dime que no llegue tarde y sigue aquí. Necesito esa foto y cuando ella suba al escenario será muy difícil verla cuando termine el concierto.

— No te preocupes, ahora mismo está en el baño, pero ya sale.

— ¡EXCELENTE! –exclamó pegando un brinquito.

— Wow, amigo, ya tengo muchísimas ganas de conocerla, me intriga saber quién te tiene así –en ese momento el sonido de una puerta nos hizo voltear por inercia, dirigiendo nuestras miradas al mismo sitio.

— Miriam, por favor, comunícate con Maxwell y dile que lo necesito preparado para cuando termine el concierto. Quiero ir a descansar al hotel inmediatamente –esa voz la reconocía, pero no sabía de donde hasta que vi sus ojos.

— ¿Alexa? –pregunté incrédula al ver a la rubia secándose las manos con una toalla.

— ¿Calle? Wow... No...no me esperaba... ¿qué haces aquí? –nos miramos por un par de minutos sin poder decir nada más.

— Ehmm... ¿Ustedes se conocen? –escuché que preguntaba Mauricio lo cual me hizo reaccionar.

— Si...si, nos conocemos. Desde hace algunos años, en realidad –yo estaba atónita mirando la cara de aquella rubia, seguía exactamente igual.

Su belleza continuaba intacta y esa mirada azul que en algún momento me hizo confundir estaba aún más profunda.

— Esto sí que es una sorpresa, Calle. De todas las personas que podría pensar ver aquí, jamás pensé que podría verte a ti.

— Créeme que estamos igual, no esperé que fueses tú la cantante que trae loca a mi amigo.

— ¿Ah sí? –sonrió pícaramente y poso sus ojos sobre los de mi amigo al cual sentí como su cuerpo empezó a temblar.

— Sí, está completamente loco por ti.

— D, por favor no me avergüences –susurró en mi oído.

— Dani... ¿podríamos hablar? –preguntaba la rubia tímidamente mientras se acercaba a mí.

— Claro, me encantaría –le dediqué una sonrisa sincera.

— Miriam, tenemos aún una hora para comenzar con el concierto, por favor toca la puerta cuando falten veinte minutos porque estoy segura que voy a perder el sentido del tiempo con esta conversación.

Detrás de las Cámaras | Caché | TERMINADAWhere stories live. Discover now