Capítulo 32. Don't love me now.

422 38 7
                                    

—¿Tenemos un plan?— pregunta, a la vez que ayuda al rizado a guardar las golosinas.

—¿Amsterdam en Año Nuevo? Obviamente si.

Niall sonríe alegre —Creo que hace mucho no hago algo en Año Nuevo.

—¿No saliste con esa chica de media cabeza rapada? Creí que estabas con ella en Año Nuevo.

El rubio se encoge de hombros —Solo hablaba de Fleetwood Mac, no me dieron ganas de besarla a la medianoche.

—Que selectivo, Horan.

—Lo peor es que ni siquiera sabía el nombre de la banda, los llamaba "Flatmac weed" y se decía gran fan, quiero decir, ¿por qué?

—¿Una fase?

—No me importa, era terrible, Rumours era su motto.

—Conflictiva.

—Dramática, no hablemos más de ella por favor.

—¿Alguna chica que te interese ahora?-

—No realmente... estoy en descanso.

Terminan de guardar los dulces, y ambos se tiran sobre sus espaldas en la cama de Niall.

—¿Crees que mamá me quiera conseguir entradas para la NBA? Hace mucho no vamos.

—Desde que Liam encontró alucinógenos en su soda.

El rubio comienza a reír —Oh, mierda, eso fue todo un espectáculo... ¡quería demandarlos!

—¿Alguna vez se enteró?

—No, mientras tú no se lo digas, no hay forma de que se entere... ¿crees que quiera venir?

—Siento que, muy en el fondo, le hiciste un favor.

—¿Por qué lo dices?

Se encoge de hombros —El basquetbol nunca fue mucho de su agrado, creo que le hiciste un favor al darle una excusa para no volver a ir.

—¿Entonces sólo dos?

—Si... o no... quiero decir, pregúntale a él, nunca se sabe.

—De acuerdo— suspira —Bobby quiere quitarme mi nueva tarjeta.

—¿Qué hiciste ahora?

—¡Nada! Compré algunos tés en línea, y están un poco caros... ¡pero son de lo mejor!

—Niall, tú no bebes té.

—Porque no había probado ese té, es fabuloso... ¿quieres un poco

—Seguro.

El rubio se pone de pie, saca algo del último cajón de su enorme librero, y llama al personal del servicio por el pasillo. Esta vez, una de las amas de llaves se acerca. El rubio le entrega una caja con extracto de té, y le pide que le haga dos tazas, y que después suba la caja nuevamente, ya que no quiere que sus padres lo vean.

Locked In [larry stylinson]Where stories live. Discover now