26. La hora punta.

4.6K 433 145
                                    

...

Madara la había besado, sin decir una sola palabra más. Simplemente, se acercó a sus labios, y los probó. Por otro lado, Alice, estaba muda. No se lo había visto venir en ningún momento y sucedió de la nada.

El Uchiha estuvo unos segundos más y se apartó despacio, mirándola después a los ojos totalmente serio. La azabache tenía el rostro completamente rojo y su respiración era agitada y nerviosa, y, aún más, al ver la mirada seria y penetrante que tenía él.

—Eres una idiota.—Bufó.

Con el mismo rostro impasible y tras haber dicho eso, salió de la habitación. Dejando a la ojiazul en la misma postura petrificada y con la misma sensación.

...

—¿¡Qu-Qué!?—Exclamó volviendo en ella.

Se cogió la manga y se la puso en la boca, aún sonrojada. No entendía porqué había hecho eso y ahora, dentro de ella algo no paraba de latir fuertemente.

«Mierda...» Pensó, gruñendo.

***** ***** ***** *****

...

«Tenía que hacerme más y más fuerte, desarrollar más jutsus y aprender a cooperar mejor con mi zorro. No iba a dejar ni de broma que Sasori muriera, aunque me tuviese que enfrentar a Kakashi. Inclusive al equipo siete entero». Rumió, impasible y decidida.

«Me daba igual».

«Lo mismo iba para los demás; No dejaría que ninguno de ellos falleciera, ya lo dije desde el momento en el que les vi el rostro. Por encima de mi cadáver pasaría algo así». Se dijo a si misma.

Probablemente, eso, acabaría sucediendo...

Alice no descansaba ni un segundo, seguía entrenando y entrenando. Luchando con su katana y haciendo jutsus junto a Tomoe mientras pegaba al árbol a más no poder, con toda la fuerza e ira que desbordaba en su interior.

Después de todo aquello, después de que Madara la besara por la cara y sin decir una sola palabra se esfumara, cogió su espada con la cabeza hecha un lío y, junto a su zorro, se largó a luchar fuera de la base. 

No llevaba su kimono rojo puesto de siempre, portaba su otra ropa; La camiseta negra que dejaba el ombligo un poco a la vista—Mostrando así el piercing que llevaba ahí—, y sus pantalones negros. Eso sí, las botas negras altas siempre con ella. 

Seguía luchando por muy fatigada o enferma que estuviera, pero si se tenía que enfrentar a ellos por alguna razón del destino, tendría que aprender más. Kakashi tenía el sharingan, y si le metía en un genjutsu, ya estaba más que mal.

Sakura tenía una gran fuerza, pero de eso no se preocupaba, a ella no le faltaba. Aun así, no habría que subestimar a la pelirrosa.

Y, Naruto...Bueno, mejor no pensar en él. 

El peligro aquí es...Kakashi, por muchas y diversas razones. 

—Acabarás por romper el árbol.

La azabache se giró, mirando sin expresión al hombre que le acaba de hablar. Posteriormente, se sacó sus guantes negros para después, beber un poco de agua fría.

—No deberías de entrenar, sigues enferma.—Profirió, con el ceño fruncido.

—Tengo que hacerlo.—Fue lo único que dijo, tan simple y sin llegar a mirarlo. 

Mundo deseado|Akatsuki & Naruto|Where stories live. Discover now