#92

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Manifestaciones, gritos, estruendos, balas rompiendo el aire, humo llenando mis pulmones y el constante sentimiento de que iban a acabar con mi vida gracias a alguna bala qué no alcance a prevenir.

Mi respiración era alterada, había miles de estudiantes a mi alrededor luchando contra las malditas injusticias a las qué nos habían sometido, habían desaparecido a más de cuarenta compañeros en situaciones sospechosas y estábamos manteniendo la resistencia para que pararan con ese genocidio.

Miré a mi alrededor, compañeros y algunos profesores peleaban con nosotros para detener a los altos cargos educativos qué peleaban por mantener su maldita corrupción.

Podía ver a Sanji y Luffy, mis mejores amigos y compañeros de toda la vida.

A lo lejos Franky, un conocido junto a un tipo de nariz larga y lo que parecía ser un adolescente.

Había incluso profesores, como el profesor Brook, un hombre de avanzada edad qué había decidido dejar la comodidad de su hogar para venir a luchar.

Sostuve fuerte el bate de béisbol entre mis manos, el humo se alzaba frente a nuestros ojos, por lo cual llevaba una bandana escondiendo mi nariz y labios, la gran mayoría de personas a mi alrededor estaban igual, todos cubiertos, cuidando y protegiendo sus rostros, sus escencias y su identidad, ya que si por alguna razón alguien descubría tu identidad ibas directo a ser un maldito tirano o delincuente ante los ojos de la justicia.

Levante la mirada y me encontré con las malditas fuerzas especiales apuntando en nuestra dirección, las armas de gran calibre estaban apuntando en nuestra dirección y estábamos prontos a sufrir una buena cantidad de bajas.

Estaban a punto de reducirnos.

Solo eramos estudiantes qué queríamos mejor calidad educativa y más oportunidades dentro del sistema educativo qué nos mantenía constantemente reprimidos.

Suspire agachando la cabeza cuando comenzaron a lanzar bombas de humo para aturdirnos, cubrí mi cabeza con el pánico creciendo dentro de mi, si nos lograban someter íbamos a desaparecer todos.

Busque con la mirada a mis compañeros pero no podía ver nada, ahí fue cuando enmedio del apogeo el caos comenzó a nacer.

Escuche los gritos y supe que estaban entrando en la resistencia, los neumáticos ardían frente a nosotros como un mecanismo de defensa, ellos no podrían pasar por encima de las llantas sin qué se adheriera a sus botas o les causará quemaduras.

Comenzaron a aplastarnos unos contra otros, sentí empujones y los gritos se hicieron presentes, me puse de pie para intentar detenerlos.

-¡Alto con la violencia!

-¡Solo queremos mejores oportunidades!

-¿¡A donde se la llevan!? No ha hecho nada.

-¡Basta, le han reventado la cabeza!

Di un rápido vistazo a mi alrededor, algunos se estaban poniendo en pie y otros seguían en el suelo, hasta el frente comenzaban a caer los nuestros y a ser abatidos.

Miré a uno de ellos, era una persona casi tan alta como yo, tenía un uniforme grueso y podía asegurar que toda esa ropa ocultaba un cuerpo delgado, llevaba un casco bastante grande.

¿Una mujer?

Comencé a dar grandes zancadas en su dirección para intentar ayudarla, y justo cuando estaba por llegar a su lado uno de los policías le dio un golpe qué hizo al casco salir de su cabeza y chocar contra el suelo, la ventaja era qué llevaba un cubrebocas negro.

Una cabellera negra y larga vio la luz, su cabeza resonó en el suelo y vi como le daban un par de buenos golpes, me interpuse enmedio de todo el caos y uno de ellos dio un fuerte golpe en mi costado qué casi me saca el aire.

one shorts de ZoroxRobin.Where stories live. Discover now