#34

1.6K 91 27
                                    

Un camión de mudanza llegaba a la ciudad, era extraño ver personas nuevas ahí, por lo que los vecinos salían de sus casas a ver a las nuevas personas.

Las cosas fueron bajadas del camión e introducidas a la casa con mucha rapidez, de un pequeño auto bajaron dos mujeres, una de cabellera abundante y ondulada color rosa y una morena de cabello negro.

-¿Quienes son ellas?- pregunto Nami, una chica pelinaranja que miraba curiosa hacia ellas.

-¿Está embarazada?- Pregunto Nojiko, su hermana.- Mira a la morena.

La chica morena llevaba un vestido bastante holgado pero que no hacía nada para ocultar el crecido vientre de la chica.

-Parece que si.- susurró Nami mirando muy interesada.- ¿Por qué crees que se hayan mudado?- pregunto a su hermana.- Y no veo a ningún hombre por aquí, así que tendré que investigar.

Nojiko rodó los ojos, conocía muy bien a su hermana y sabía que ella estaría al tanto de todo y que en unos días se sabría todo el chisme.

-No las sofoques.- La señaló.- Mejor ayúdame a cargar las Mandarinas para llevarlas al mercado y tú deberías ponerte a hornear los pendientes.- Nami sonrió.

-¡Les llevare una tarta de mandarina!- salto emocionada y ayudo a su hermana a cargar las cosas para poder irse a hornear.

****
Robin estaba cansada, una mudanza, lugar nuevo, personas nuevas, se sentía sola, la guerra había hecho estragos en ella y su familia, ahora estaba lidiando con un embarazo sola,  su única compañía era la hermana de su esposo, misma que no siempre estaba presente pues a veces se iba largas semanas a trabajar.

Entre las cajas encontró varias fotografías, entre ellas una de su boda, cuando estaban muy jóvenes y enamorados, cuando la guerra no había iniciado y podía estar felizmente casada, sin una guerra que los separara.

-Va a regresar.- Susurró Perona mirando la fotografía.- Te quedan dos semanas antes de la llegada del bebé y  ambas sabemos que estaría muy molesto si no llega a la fecha... ¿Necesitas algo? Me regreso al otro pueblo y llego hasta el anochecer.

Robin negó sonriendo y dejo las fotos en su lugar en la sala de estar, llevaban gran parte de la mañana acomodando, no era mucho lo que llevaban así que no tenían mucho más por hacer.

-Todo esta perfecto, puedes ir tranquila, gracias por acompañarme.- Perona le dio un gran abrazo antes de irse y dejarla sola.

****
Casi una semana después de la mudanza todo estaba en orden, la casa estaba impecable, incluso había logrado decorar y mantener lista una habitación para su bebé, así que todo estaba en orden.

Sabia que estaba muy próxima a dar a luz, así que mantenían todas sus cosas listas para tomarlas e ir al hospital más cercado, mismo que ya había ido a conocer y sabía como estaba todo el proceso en el lugar.

Escucho la puerta ser golpeada, limpio sus manos y camino hacia ella apresuradamente, cuando la abrió se encontró con dos hombres de pie, la miraban con pesar y entre sus manos llevaban algo, cerró los ojos con fuerza y negó.

-No es cierto, ¿verdad? Esta escondido por ahí viendo mi reacción, ¿cierto?- Ambos hombres se miraron y luego la miraron ella.

Los miró mover los labios, pero no comprendía que era lo que le estaban diciendo, le extendían una pequeña caja mientras seguían hablando, retrocedió rápidamente hasta chocar contra una pequeña mesa, sintió líquido correr por sus piernas y maldijo sintiendo un extraño piquete en su vientre.

****
Regresar a casa se sentía desolador, estaba completamente sola y con un bebé, era una niña que él hubiera amado con todo su corazón, una niña muy tranquila que solía mantenerse en calma pero cuando lloraba era muy potente, tenía un par de semanas con la pequeña y se había acostumbrado muy rápido a ella y su calor, a fin de cuentas era lo único que le quedaba.

one shorts de ZoroxRobin.Where stories live. Discover now