#24

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Robin retrocedía con un poco de confusión, se había quedado dormida tras pasar toda la noche despierta intentando terminar unos libros y no se había dado cuenta que habían llegado a una isla y al parecer habían bajado a ella, dejándola sola.

Y ahora se encontraba desorientada, recién levantada, con un gran dolor de cabeza y un montón de hombres frente a ella, cubiertos totalmente con Armaduras y viéndola de forma amenazante.

-¡Robin!- Se escuchó una voz detrás de los hombres, Robin llevó una mano a su pecho con una enorme sonrisa.

-¿Zoro?- preguntó mirándolo llegar a su lado.

-He venido a salvarte.- Susurró él poniendo una mano en la cintura de la morena y acercándola a él.- Y a salvarte, para poder vivir una aventura juntos.

Y de pronto se escucho un fuerte estruendo, la imagen se oscureció y Robin dio un salto, abrió los ojos sorprendida.

Todo había sido un sueño.

Miró desde el suelo su escritorio, su silla y los libros que había estado leyendo toda la noche, suspiro poniendo una mano en su cabeza, intentando peinar su cabello.

Escucho pasos y la puerta de su habitación ser tocada, sin esperar respuesta se abrió y se asomo la cabeza de Zoro, Robin sonrió sintiendo algo de pena, pero sin llegar a un sonrojo.

-¿Está todo bien?- Preguntó el peliverde entrando y extendiendo su mano hacia ella, Robin asintió mientras la ayudaba a ponerse de pie.

-Me desperté de golpe por un ruido.- Susurró pasando una mano por su cabello nuevamente.- Creo que algo cayó en cubierta.- Zoro asintió.

-Lo siento, fui yo.- Señaló hacia cubierta.- No hay nadie, todos bajaron a la isla, Nami no te quiso despertar, pero dijo que cuando despertarás fueras con ella.

Robin asintió lentamente y salió de la habitación seguida de Zoro, quien caminaba observándola en una cómoda pijama, Robin se giro y le sonrió.

-¿Nos han dejado solos?- Preguntó y Zoro asintió.

-Sanji te dejo comida en la cocina, dijo que te había dejado un gran desayuno.- Robin asintió.

Zoro sonrió mirando hacia la isla, luego miró a Robin, quien camino por cubierta y se recargo en el barandal, él la siguió y se recargo  justo a su lado.

-¿Por qué no has bajado con los otros?- Preguntó ella, Zoro se encogió de hombros.

-Por qué estabas dormida, Chopper iba a quedarse, pero le dije que podía quedarme yo.- se encogió de hombros.- No me apetecía mucho ir.

Robin le sonrió mirando hacia el agua, hasta que algo voló por encima de ellos, Robin sonrió que sus pies no tocaban el suelo y se vio a ella misma cayendo hacia el agua, Zoro gritó y dejó de sentir por unos segundos hasta que se vio rodeada de agua.

Escucho un grito de Zoro, su visión se torno borrosa de inmediato mientras se sumergía con rapidez hacia el fondo, dos cosas cayeron dentro del agua.

Zoro observo a Robin caer al agua gracias a un hombre que sonreía y le apuntaba con un arma, Zoro se quitó las katanas y tras un rápido movimiento el hombre terminó herido cayendo al mar, seguido de Zoro, que fue tras Robin.

Zoro nado con rapidez, alcanzando el brazo de la morena y llevándola con rapidez hacia arriba, de inmediato Robin comenzó a toser, zoro la miró preocupado.

-¿Estas bien?- Preguntó acercando al barco, ella asintió mientras la ayudaba a subir por las escaleras laterales.

Robin subió a cubierta seguida de Zoro, que la miraba con un poco de preocupación.

-¿que fue eso?- Preguntó Robin mirando hacia el mar, en donde el hombre nadaba con mucha dificultad hacia la orilla, Zoro se encogió de hombros.

-No lo sé, pero creo que lo mejor es ir a cambiarnos antes de que nos vean.- susurro señalando hacia dentro del barco.- ¿No estas herida?- Robin negó con una pequeña sonrisa.

-Estoy bien, fue un susto.-susurró caminando junto a Zoro hacia el barco.

Llegaron al baño, Zoro tomó un par de toallas y le extendió una a Robin, quien le sonrió y se acercó a él, pasando la toalla por el rostro del Chico, Zoro se quedó sorprendido por unos segundos, pero pasó su toalla por el cuello de ella.

-Creo que jamás te he agradecido adecuadamente por todas las veces que has salvado mi vida.- Susurró ella mientras pasaba la toalla por todo el rostro de Zoro y se detenía en su cuello.

-No veo necesario un agradecimiento.- Dijo él poniendo la toalla en el cabello de ella.- Siempre estaré dispuesto a arriesgarme por cada uno... Y por ti.- susurró deteniendo sus manos y perdiendo la mirada en ese par de ojos azules que siempre evitaba ver.

Los ojos de Robin se habían fijado en su rostro, mirándolo con intensidad, Zoro sostuvo la mirada con mucha voluntad, hasta que flaqueo por unos segundos cuando la vio acercarse peligrosamente hacia él.

Robin se acercó, Zoro cerró los ojos y suspiro cuando la sintió recargarse en su pecho, abrazándolo con fuerza.

Zoro de inmediato correspondió al abrazo, atrayendola contra su pecho con mucha fuerza, la escuchó reír y la hizo sentarse en sus piernas, Robin se separo un poco y paso ambas manos por el húmedo cabello del peliverde.

-¿Que estas haciendo?- preguntó Robin dejando sus manos sobre el cuello del chico y atrayendolo hacia ella, haciendo que sus narices chocaran.

-No sé.- Murmuró entrecerrando los ojos.- ¿Que te gustaría que hiciera?- Robin sonrió y se acercó aun más.

Los labios de ambos se rozaron por unos segundos, zoro reforzó el agarre en la cintura de la morena, pegandola más contra él, sintió su humeda lengua en su labio inferior y la escucho suspirar cuando tomó su cabello y la empujó para poder besarla con intensidad.

Robin sonrió en medio del beso, bajando las manos por el pecho del peliverde.

-¿No crees que esta muy mojada?- Preguntó tocando la camisa, Zoro sonrió y asintió, Robin de inmediato la deslizó por encima de su cuello.

Y ambos maldijeron cuando se escucharon pasos, gritos y risas, Zoro se puso de pie con Robin aún encima de ella, sosteniendola con fuerza del trasero.

-Ya están aquí, pensé que iban a tardar más.- murmuró Zoro, Robin sonreía dejando pequeños besos en su cuello.

-¿Y por qué no hacemos que se vayan?- Preguntó Robin, Zoro sonrió mientras ella bajaba de sus brazos.

-Es una buena idea. - Le guiño un ojo, Robin le dio un corto beso en los labios y camino por el pasillo, en dirección a los chicos, Zoro se quedó en el baño.

Miró a su alrededor ahora solo y no pudo evitar sonreír por lo bajo, no sabía que habia pasado con la morena hacia unos segundos, pero le había gustado y quería que volviera a pasar.

one shorts de ZoroxRobin.Where stories live. Discover now