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Las clases estaban por terminar, era un viernes a escasa media hora de que sonara el timbre para anunciar el inicio del fin de semana y nadie podía esperar para irse a casa.

Zoro estiro las piernas en su asiento y miró impaciente el reloj, estaba ansioso por salir, tenía ciertos asuntos importantes que hacer y los minutos parecían horas.

-Hey.- Escucho una voz detrás de él, se giro.- ¿Que harás hoy en la noche? Me invitaron a una fiesta.- Luffy, su mejor amigo, le sonreía emocionado y Zoro se encogio de hombros.

-Tengo pendientes con alguien, pero si termino temprano voy.

Luffy asintió y se regreso a su lugar un poco decepcionado, él conocía la verdad y sabía que no podía pedirle que llevara a esa persona a la fiesta.

La preparatoria en la que se encontraban era bastante conocida por albergar grandes talentos, un ejemplo de todo esto eran Luffy y Zoro, capitanes del equipo de artes marciales, incluso Zoro daba clases de defensa personal los fines de semana en la institución al lado de Luffy.

Otro de sus amigos, Sanji, era un prodigio de las cocinas y amante de las artes marciales, sin embargo lo suyo eran las largas jornadas laborales dentro de calurosas cocinas.

Y por otro lado tenían a la mayor competencia, Nami, una chica bastante inteligente y buena para manipular, con mucho conocimiento sobre economía, geografía y cartografía, Franky, un genio de las máquinas y carpintería con grandes habilidades para la creación de robots... Y Robin, una prodigio en casi todo, buena para la historia, leyes, psicología y casi cualquier actividad, una chica de cabello negro y ojos azules que se la vivía perdida entre libros.

-Supe que estaban organizando una feria de ajedrez.- Habló Ussop, amigo de los chicos.- Franky me contó, realmente no sé por qué ustedes los tratan con odio.

-Por que se creen superiores.- Bufo Luffy haciendo un puchero.- Sobretodo Nami, ella se cree la mejor en todo, Robin no es mala, ella me cae bien.- giro su mirada a Zoro, quien se encogió de hombros.

-No son mi problema.

Los minutos pasaron y las clases finalizaron, hoy zoro llevaba cargando tres katanas dentro de una funda especial, pero había tenido que cancelar las clases debido a que tenia algo importante que hacer.

Pero llevaba ya veinte minutos esperando, hasta que la miro caminar en su dirección con la cabeza perdida dentro de un libro, sonrió por lo bajo.

-¡Hey! Llegas tarde.- le dijo teniéndola cerca y ella bajo el libro para verlo y sonreír.

-Zoro.- Susurro acercándose un poco y besando su mejilla.

-¿La biblioteca? De nuevo con tus libros.

-¿Llevas mucho esperando?- preguntó ella sonriendo y él negó con las mejillas algo sonrojadas.

-Recién voy llegando... ¿Nos vamos?- Preguntó extendiendo la mano hacia Robin, ella asintió y la tomó.

Ambos comenzaron a caminar mientras conversaban de su día, sin embargo, desde la ventana de un salón un par de ojos café observaban todo, Nami sonrió por lo bajo.

-Nami, ¿Zoro no tenía entrenamiento hoy?- Preguntó Chopper, quien cursaba último año de secundaria pero tomaba clases extra en la preparatoria en la tarde debido a su gran inteligencia.

-No lo sé.- Dijo ella pasando una mano por su cabello.

**
-¿Estas segura?-preguntó Zoro hacia Robin y ella asintió mordiendo su pulgar.

-Tengo un retraso, gracias al estrés suele retrasarse un poco, pero no más de un mes y este es el segundo mes que no me llega.

Zoro asintió y miró el la laboratorio de análisis médicos frente a ellos, abrió la puerta para robin y ambos pasaron dispuestos a salir de dudas y hacer una prueba de embarazo.

one shorts de ZoroxRobin.Där berättelser lever. Upptäck nu