Robin serviria de vigilancia junto a Ussop y chopper, mientras que Luffy y Franky entraban al lugar.

Por fuera Sanji, Zoro y brook cuidaría y procurarian la seguridad de los que estuvieran adentro.

Todo iba perfecto, solamente que no contaban con ciertos detalles que el hombre había olvidado comentarles, como por ejemplo que cuando Nami y Robin quisieron entrar a despegar el será una ráfaga de viento que cortaba sus cuerpos las embestio, ambas maldijeron y de inmediato Robin generó un par de brazos extra que desactivo los botones de ataque, pero ya tenían a media tripulación entrando a salvarlas, por lo que todos tenían mínimo un par de rasguños y cortadas, Robin se topo de frente con la mirada de Zoro, que estaba justo detrás de ella.

Pero cuando sus ojos se cruzaron el solamente frunció el ceño y se alejo seguido de Brook y Sanji, Robin noto algo extraño en la mirada que el peliverde le dio pero no le tomo demasiada importancia antes de seguir con lo establecido en el plan.

Plan que continuo de manera óptima, pues pronto Luffy y Franky estarían pronto dentro del lugar mientras que a su alrededor Zoro, brook y Sanji cuidaban el área para que nadie entrará, Robin se encargaba de guiar y despejar el camino de Luffy, Franky y Nami que se había unido a ellos para distracción y apoyo extra.

Una vez que Franky y Luffy lo habían logrado y salían del edificio con un par de enormes cajas fuertes con el dinero y documentación del pueblo, hubo algo.

Un segundo.

Un hombre.

Una distracción.

Un hombre que se tendía en el suelo fingiendo estar muerto se puso de pie y atacó por la espalda a Robin, pues la tenía más cerca, Robin sintió el filo de la espada en su espalda y se quejo por lo bajo, pero luego se topo nuevamente con la mirada de Zoro, él tenía al hombre del cuello y lo lanzó lejos, un par de movimientos de pelea después y el hombre se tambaleaba.

Pero llegaron más.

Decenas de enemigos corrían hacia ellos con la única misión de no dejarlos salir con vida, así que todos se prepararon, ni siquiera estaban cansados, así que suponían que no les daría mucho problema acabar con todos.

Dicho y hecho, varios minutos después ya la mayoría de los enemigos estaban el el suelo, simplemente tuvieron que separarse unos de otros, por lo que Robin había corrido hacia el otro punto del edificio seguida de Zoro, quien la vigilaba de cerca pero no se acercaba.

Hasta que por una distracción un puñetazo impacto en su rostro desorientandolo un poco, cayo al suelo y una mano lo levantó con fuerza.

Zoro tomó impuso y de una patada de libero, el único problema fue que su abrigo termino rasgado y la nota que llevaba justo para Robin comenzó a volar, para caer a los pies de la morena, quien reconoció el papel, la letra, todo.

Elevó la vista hacia el peliverde, su pecho ahora desnudo se movía de manera errante mientras el hombre yacía en el suelo agonizando, él la miraba con pánico inyectado en la mirada, retrocedió un par de pasos.

-Siempre fuiste tu.- Susurro ella dando varios pasos hacia él, Zoro la miró acercarse y sacó todo el aire de sus pulmones cuando sus pies chocaron.

La mirada de ambos se cruzo y se quedo fija una con la otra, los labios de Robin temblaron en una sonrisa.

-Creo que puedo explicarlo.- Susurró en voz baja, sus hombros cayeron y sus katanas fueron al suelo mientras levantaba ambas manos.

-¿Que vas a explicar? ¿Me explicaras como es que logras desarmarme con un par de palabras?- preguntó ella.- ¿Me explicaras como demonios consigues hacer mi corazón latir con fuerza con una carta? Por qué me gustaría saberlo.

Sin decir más Robin rodeo el cuello del peliverde y lo acerco a ella, Zoro tambaleó un poco pero la sujeto de la cintura con fuerza para elevarla un poco del suelo y hacerla acercar sus rostros para unirse en un beso ansioso.

Las manos de Robin no tardaron el sujetarse del cuello de Zoro para acercarlo más a ella, Zoro sentía en su rostro algunas gotas de sangre que caían del rostro de Robin hacia el, así como la suya manchaba la camisa de Robin, pero nada de eso importaba cuando sus respiraciones se mezclaban y sus labios se movían uno sobre el otro en movimientos desesperados y manos ansiosas que buscaban cubrir piel.

Zoro sonrió sintiendo el sabor metálico de la sangre cruzando por el beso y la acerco aún más a él, Robin suspiro y se separo solo un poco para verlo, las manos de ella acunaron las mejillas de zoro.

-Siempre fuiste tú.- Susurró nuevamente, él asintió.

-Siempre.

Ella sonrió y limpio una gota de sangre que corría por el cuello de él antes de besar su mejilla y bajar de sus brazos.

Corrió hacia donde la carta descansaba y la tomó entre sus dedos para guardarla.

-Quiero leerla después.- Susurró acercándose a él e instandolo a caminar a su lado.

-Te puedo decir cada cosa que viene ahí escrita.- Le dijo él tomando las katanas y caminando a su lado, ella sonrió.

-Me encantaría escucharlo.

Y así él comenzó a relatar a detalle cada cosa que decía la carta, desnudando sus sentimientos a ella y deslumbrandola con cada palabra que salía de entre sus labios, robin lo miraba asombrado, desconocía que palabras tan hermosas podían salir de entre los labios del peliverde y con cada palabra la hacía enamorarse cada vez más de él.

Cosa que no era necesaria, ella ya había caído por él gracias a las cartas

one shorts de ZoroxRobin.Where stories live. Discover now