68: Regalos y sorpresas

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Sin embargo, a JongIn siempre le gustaba destacar lo mejor de su relación con KyungSoo, le gustaba rememorar eventos y fechas especiales para ambos; le gustaba cada día cuando se levantaba, abrazarlo y darle el beso de los buenos días, sonreírle y recordarse a sí mismo por qué había elegido a Do KyungSoo como hombre para él.

Y lo cierto era que aunque algunas veces se dormían enojados, JongIn por inercia terminaba el protocolo de despertarlo en las mañanas con un beso, algunas veces inconscientemente y otras a propósito, para ver si es que dejaban los dos su mal humor y se ponían a algo más provechoso. Y no era el único, por supuesto que KyungSoo también daba su brazo a torcer, pero si algo tenía en común sobre las discusiones... es que ambos pensaban que las reconciliaciones eran de lo más exquisitas que podrían existir.

ㅡ No reservé porque quería llevarte a donde tú quieras. ㅡ murmuró JongIn esbozando una bonita sonrisa para KyungSoo, que asintió con tranquilidad.

ㅡ De ser así... quiero que me lleves a las estrellas, Kim JongIn ㅡ Las manos traviesas de KyungSoo caminaron por los brazos fuertes de su marido que contrastaban perfecto con su camiseta de color oscuro.

El bajito sonrió con coquetería y JongIn no tardó en tomar la indirecta y sonreírle de regreso, porque en efecto, iba a llevarlo a la luna y de regreso, iba a pintarle estrellas en su albino cuerpo, como cada que besaba los bonitos lunares de su cuello.

JongIn se acomodó para poder tomarlo entre sus brazos, y KyungSoo le pasó las manos por el cuello, mientras su marido hacía lo que podía para levantarlo del sillón, jadeando un poco porque ya no era el muchacho flacucho con el que se había casado, pero era su amor, su precioso marido que batía sus pestañas para él, con las mejillas sonrojadas mientras él hacía fuerza en sus brazos para comenzar a caminar con él.

KyungSoo sonrió lleno de felicidad, porque JongIn lo estaba llevando al dormitorio como la primera vez que llegaron a esa casa, con un montón de sueños, ilusiones y esperanzas en los zapatos, con los ojos brillando de amor y de anhelo por entregarle todo al contrario, del que no saldrían hasta el día siguiente, seguramente como en esa ocasión.

Avanzaban a paso lento y KyungSoo se aproximó con dificultad para besar su mejilla, esperando paciente hasta que fue finalmente depositado sobre la acolchada cama, JongIn subiendo una de sus rodillas mientras lo recostaba, para después sentarse e inclinarse, besando sus labios una vez más, con los latidos de su corazón acelerado.

ㅡ Pero antes de que comencemos, tengo una sorpresa para ti...

ㅡ También tengo un regalo para ti, y para nosotros. ㅡ JongIn se levantó de la cama y se apresuró hacia el armario, donde tenía escondido una cajita dentro de la caja de sus viejos zapatos deportivos.

El aludido caminó hacia el bajito, que se sentó sobre la cama con los ojos bien abiertos de curiosidad, JongIn le sonrió y después tomó la mano de KyungSoo para dejar la pequeña cajita en su palma. KyungSoo tragó saliva, emocionado, mientras que el moreno abría el regalo y le mostraba una cadena con un dije, con sus iniciales enlazadas a un pequeño corazón.

ㅡ Sé que es súper cursi pero no podía decidirme por algo que demostrara un poquito de todo lo que significas para mí ㅡ KyungSoo asintió, con las mejillas arreboladas mientras las manos de JongIn tomaban la cadena y se acomodaba para colocársela en el cuello con parsimonia.

ㅡ Es preciosa... estamos entrelazados ㅡ KyungSoo no tenía palabras para describir la emoción que albergaba en su pecho, así que se apresuró a besarlo una vez más, con movimientos poco tranquilos que encendieron al menor, indicándole que estaba dispuesto para él.

ㅡ Voy a hacerte el amor mientras la llevas puesta, Jagi... ㅡ JongIn le sonrió contra sus labios de manera seductora, haciendo a KyungSoo suspirar y cerrar sus bonitos ojos, completamente azorado mientras asentía porque estaba totalmente de acuerdo.

ㅡ Pero antes... ㅡ KyungSoo lo detuvo con su dedo índice sobre sus labios carnosos, en su turno de regalarle una preciosa sonrisa exclusivamente para él.

Su corazón latió fuerte mientras buscaba la manera exacta de decirle lo que intentaba, mordiéndose el labio inferior porque estaba nervioso, se sentía como si fuera la primera vez, pero quería ver la reacción de JongIn por sobre todas las cosas.

ㅡ Vamos a ser... padres de nuevo, Jagi-yah.

JongIn se quedó helado, completamente inmóvil mientras la sangre le hervía en las venas a la par que la voz de su marido se repetía una y otra vez en su cabeza, el dulce tono de voz que KyungSoo había usado, su puchero infantil que adoraba, y la sonrisa de felicidad que lo podía todo.

El dentista tragó saliva y KyungSoo lo besó, sacándolo de su ensimismamiento mientras su corazón se aceleraba aún más porque... ¡Iba a ser papá por segunda vez!

Eso significaba que sus sesiones de sexo cada que podían había funcionado y ambos serían padres otra vez.

ㅡ Voy a ser... Jagi, voy a ser... ㅡ JongIn parpadeó con la incredulidad tocando sus pestañas, con sus labios gruesos entreabiertos que lo hacían lucir un poco más adorable.

ㅡ Vas a ser papá.

JongIn se abalanzó contra él para abrazarlo sin dudarlo y después se quitó de encima porque no quería lastimarlo, se sentía como en un sueño, como en las nubes, no sabía cómo demostrar su felicidad más que echándose a reír a todo pulmón para después llenarle la cara de besos a su marido, que lo recibió con los brazos abiertos y lo atrajo hacia la cama para que se acostara junto a él.

ㅡ Seremos padres... ¿Cuánto?

ㅡ Apenas mes y medio aproximadamente, o quizá un mes, me hace falta hacer una cita... me pregunto si el Doctor Wu... ㅡ

Pero JongIn no lo dejó terminar porque volvió a apoderarse de sus labios nuevamente, su pecho estaba henchido de felicidad y quería demostrárselo de todas las maneras posibles. KyungSoo se pegó a su cuerpo casi con necesidad y se entregó a la serie de besos demandantes que el moreno le propinaba, a las caricias de sus manos inquietas que se dirigieron a su estómago para comenzar.

Y sí, Kim JongIn iba a ser padre por segunda vez, era el día de su aniversario y ese sin lugar a dudas sería su mejor regalo; así que derrochando felicidad, definitivamente llevaría a su marido a la luna y las estrellas únicamente con el pequeño collar puesto en su pecho.

🐧❤🐻

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Notas:

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Notas:

¡Hola!

Espero que les haya gustado la sorpresa y el regalo (?) Soy muy cursi :v yo creo que ya lo notaron.

Muchas gracias una vez más por todas sus bonitas muestras de afecto para esta historia y sus personajes, son bien recibidas y las aprecio muchísimo.

Nos leemos en el siguiente :P

Besos posholatosos

🌠Ary.

Desde el primer momento ❀ KaiSooWhere stories live. Discover now