18: Noches en vela

3.2K 511 67
                                    

.

.

.


Cuando abrió los ojos, JongIn se dio cuenta de que aún no amanecía, de hecho sentía que no había dormido demasiado, estaba casi seguro de que no tenía demasiado de haberse acostado a dormir.

Apretó los ojos con fuerza al escuchar el incansable llanto de su princesa, quien por supuesto estaba dispuesta a llevarse toda la atención que necesitaba esa noche, como había estado haciendo desde que llegó a casa.

JongIn suspiró con dejos de cansancio instalándose en sus facciones mientras negaba lentamente, quería girarse en ese preciso momento, echarse la almohada encima y apretar los ojos hasta dormir, ignorando el llanto que cada vez iba en aumento, ese que se había trasformado en su alarma desde hacía más de quince días.


Y tal como tenía aproximadamente una semana haciendo, el moreno suspiró resignado, y se irguió hasta quedar completamente sentado, escuchando a su marido removerse sobre el colchón.  JongIn se talló los ojos con los las manos hechas puños y sacó los pies de las gruesas y tibias sábanas, buscando a tientas sus pantuflas de ositos para apresurar a levantarse.

Dio un profundo suspiro seguido de un bostezo que intentó reprimir entre sus manos mientras observaba el reloj en la mesita de noche parpadear. Eran las cuatro de la mañana, la mayoría de las personas estaban profundamente dormidas, pero él era padre primerizo y necesitaba ir a buscar a su nena.

JongIn avanzó a paso tranquilo el par de pasos hasta el pequeño rincón del cuarto, dando gracias a KyungSoo y su brillante idea de comprar un aparato de calefacción, porque la habitación estaba calientita a pesar de ser finales de Enero.

Sonrió en automático, haciendo que todo  lo demás quedará atrás, la pesadez de tener que abandonar sus más profundos sueños lo dejaron al instante en que sus ojos se posaron sobre la silueta de JiSoo, que se calló un poco cuando lo vio asomarse en su cuna.

JongIn la tomó entre sus manos como ya estaba acostumbrado a hacer y suspiró, acunándola contra su pecho y esbozando para ella una tierna sonrisa. Los ojitos brillantes de la bebita le respondieron con alegría muda, mientras que sus labios volvían a abrirse para soltar ligeros sollozos.

ㅡ ¿ Mi princesa tiene hambre? ㅡ  preguntó el moreno con voz melosa.

Y estiró su diestra hacia una mesita que habían colocado al lado de la cuna con un par de biberones de reserva. Con mucho cuidado JongIn tomó uno, mientras sostenía con precisión a JiSoo y le susurraba que dos “Shh Shh, papá está aquí” para ver si la niña dejaba de llorar.

No quería que KyungSoo se despertara, sabía que estaba cansado porque era él quien se había estado quedando en casa a cargo de la bebé todos los días y sentía que dejarlo dormir en las noches era lo único que podía hacer para que descansara.
Había escuchado que tener un bebé no era tan bonito como lo pintaban, pero aún con lo difícil que estaba siendo para ambos el acostumbrarse, JongIn sabía que ninguno de los dos se arrepentía.  Que podían con esa nueva rutina y más, con lo que viniera más adelante. Estaban los dos convencidos de ello.

JongIn se aproximó con el biberón en mano hasta el bordo de la cama y se sentó, llevándose a la boca la tapadera del bibi para destaparlo con algo de dificultad, lanzando la tapa a la cama que más tarde se encargaría de recoger.

Desde el primer momento ❀ KaiSooحيث تعيش القصص. اكتشف الآن