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20

Entraron a la habitación sin romper el beso. Luke cerró la puerta con el pie mientras guiaba a la chica hacia la cama. Estando justo a la orilla, la tomo de la cintura para alzarla y arrojarla hacia el colchón.

-Oh, vaya -rió fuertemente- El señor si que está impaciente.

-No tienes ni idea -dijo mientras se quitaba su chaqueta y la arrojaba lejos para luego hacer lo mismo con su camisa- no me culpes. Estuve meses sin ti. Te necesitaba.

-¿Ah sí? -lo tomó del rostro cuando se colocó sobre de ella- demuéstralo.

Eso fue suficiente para que volviera a besarla con pasión. Sus manos recorrieron desde sus piernas hasta la cadera subiendo su delgado vestido para quitárselo después.

-¿Que mierda...? -preguntó al ver que la ropa interior era lencería de encaje.

-¿Te gusta? -sonrió orgullosa al ver como recorría todo su cuerpo con la mirada.

-¿Has traído esto puesto todo el día? ¿Porque no me dijiste?

-Si te hubiera dicho antes ni siquiera hubiéramos llegado al hotel.

-Me encanta -dejo varios besos en su rostro- me encantas.

Lo atrajo de nuevo hacia ella para besarlo. Luke no tardó en bajar hacia su cuello y dejar algunas marcas en el mientras se ocupaba de sacarse el pantalón. La necesitaba, necesitaba estar dentro de ella desde el momento en que la había visto con ese vestido.

Sus manos recurrieron su cuerpo desde sus pechos cubiertos por la delgada tela de encaje hasta llegar a las bragas, se fue adentrando lentamente hasta llegar a su centro.

-Mierda -acarició suavemente provocando un jadeo por parte de ella- estás tan húmeda...

-Eso es lo que...¡Dios! -exclamó al sentir como metía un dedo en su interior- más rápido.

No solo incrementó la velocidad si no que introdujo otro dedo. Verla retorcerse de placer era casi igual de placentero que embestirla. Amaba saber que solo con el movimiento de su mano podía hacerla gritar de placer y enloquecerla. Quería hacerla disfrutar pero no tanto. Apartó la mano cuando sintió que estaría a punto de correrse.

-¿Pero que te sucede? -dijo apenas recuperando el aliento.

-Aun no, nena -sonrió victorioso por su reacción.

Ella no dudo en actuar y lo empujó para que ahora ella estuviera arriba.

-Quieres jugar ¿Eh? -gateó hasta donde se encontraba de manera sensual. Aún traía puesto el conjunto de lencería por qué acaparó por completo la atención de Luke- pues vamos a jugar.

Llevo su mano hasta el bulto sobresaliente de los boxers del chico y dió leves acariciadas haciendo que soltará uno leves jadeos. Se acomodo sobre su cuerpo y bajo por completo los boxers dejando salir la erección del muchacho.

-Vaya, vaya. ¿Que tenemos aquí? -apenas rozó con unos de sus dedos y el cuerpo completo del rubio tembló.

-No hagas eso -sabia hasta donde llegaría y como lo dejaría. No estaba dispuesto a que lo dejara antes de sentir el orgasmo.

-¿Que? Esto -rodeó con su palma el grusor de su miedo y comenzó a mover de arriba hacia abajo de manera lenta.

-Mierda -dejó caer su cabeza hacia atrás dejandose llevar por los actos de la chica.

Ella siguió moviendo su mano a un ritmo constante hasta que inclino para lamer la punta del glande. Escuchó como comenzaba a gemir dándole ánimos para continuar. Abrió su boca lo suficiente para poder acaparar el miembro por completo y siguió con los mismos movimientos.