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calum's birthday
🎂

—Entonces...—apoyé los brazos sobre la mesa—...lo que estás diciendo es que quieres una fiesta.

Calum dió un suspiro cansado al mismo tiempo que ponía los ojos en blanco.

—Literalmente, estoy diciendo que no quiero una.

—Puedo ver cómo tus labios se mueven pero en tu interior sé que deseas una.

—No lo puedo creer.

Mientras Calum apretaba el puente de su nariz, yo sonreía victoriosa por no ceder ante mi idea de festejar su cumpleaños con una  fiesta sorprendente. Conocía bien al muchacho y sabía que solo quería una simple reunión con los más cercanos pero quería que pasara su cumpleaños a lo grande.

—No tienes que preocuparte de nada —seguí hablando emocionada— yo me encargaré de todo.

—No tienes que hacer nada porque no quiero nada. En serio, solo quiero un día tranquilo.

—Eso no es lo que tus ojos transmiten.

—¿Cómo la convences? —preguntó hacia Luke, quien se encontraba junto al refrigerador comiendo un poco de cereal.

—No lo haces —contestó a medio masticar—. Es más fácil que hagas lo que ella dice a que trates de cambiar su idea.

—Las palabras de Luke siempre son sabías.

Calum intercambió su mirada entre el rubio y en mi. Seguía sin estar convencido ante la idea pero no podía estar encontrá de los dos. Aún así, él sabía que continuaría con la idea aunque se negara a realizarla. Finalmente, resopló, levantó las manos en manera de rendición y se levantó para salir de la casa.

—¡Esa es la actitud! —grité a pesar de saber que no me escucharía— Bueno, creo que hay mucho por hacer.

—¿Crees que sea buena idea hacer una fiesta? —cuestionó al sentarse junto a mi.

—¿Si? —contesté dudosa— ¿Por qué no lo sería?

—Tal vez porque Calum quiere algo tranquilo ¿No lo crees? —llevó su mano hacia mi brazo para acariciarlo.

—A veces la gente no sabe lo que realmente quiere —busqué justificarme pero eso no pareció convencerlo—. Solo quiero que tenga un lindo cumpleaños. ¿Acaso eso está mal?

—Claro que no. Solo espero que en esta ocasión no te excedas como el año pasado.

—¿Por quién me estás tomando, Luke Hemmings? —lo miré indignada al ponerme de pie—. Me ofende tu poca fé en mí.

Di media vuelta para salir de la cocina, dándole la espalda para que no pudiera ver mi rostro lleno de culpabilidad. El año pasado había hecho una de las mejores fiestas de mi vida y puedo asegurar que todos se divirtieron aunque si hubo una que otra excentricidad. Era una clase de extraño talento que tenía y me gustaba hacer fiestas para mis seres queridos.
No iba a aceptar frente a Luke que tenía ya todo planeado, anotado en una pequeña libreta dentro de un cajón. Tenía preparado hasta el más mínimo detalle, incluso unos fuegos artificiales.
Subí hasta la habitación a buscar la dichosa libreta y cambiar todo lo que lo que tenía anotado. Tal vez pudiera llevarla a acabo después pero ahora importaban los deseos de Calum.

—¿Fuegos artificiales? —me espanté al escuchar la voz de Luke detrás de mi— ¿Es en serio?

Taché por completo esa parte. Viniendo de él parecía muy absurdo.

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—¿Creés que esté bien aquí? —miré hacia Luke.

—Ahi estaba hace cinco minutos. Está bien en donde lo dejes.