138

1.6K 115 54
                                    

—¿Estas son las últimas? —preguntó Luke al entrar a la habitación cargando un par de cajas.

—Si, ya bajé las de mi auto. ¿Te molesta si ocupo esta parte del closet?

—Cariño, vas a vivir aquí a partir de ahora. Puedes hacer lo que quieras, no tienes que preguntarlo antes.

Sonreí complacida ante el hecho de que él estuviera feliz de tenerme ahí, y debería de estarlo, ya que fue él quien me pidió que me mudará con él en primer lugar.

La idea de vivir juntos me parecía emocionante y aterradora al mismo tiempo. Vivir en pareja es ese momento crítico dónde todo funciona o todo se va al cajero, y yo quería que todo anduviera sobre ruedas y mi estancia aquí se alargará hasta el final de nuestras vidas.

Continué metiendo mi ropa a su closet, o mejor dicho, nuestro closet mientras él solo se dedicaba a mirarme a unos metros de distancia.

—Deja de mirarme, me pones nerviosa.

—Lo siento, aun no termino de asimilar el hecho de que viviremos juntos —conforme hablaba, se fue acercando hasta llegar a rodear mi cintura con sus brazos. Tuvo que encorvarse un poco para poder alcanzarme—. Es emocionante, ¿no lo crees?

—¿Ah si? —le respondí colocando mis brazos rodeando su cuello—. ¿Por qué?

—Porque estaremos juntos todo el tiempo posible —su rostro se fue inclinando lentamente sobre mi—, Lo primero que veré al despertar y lo ultimo antes de dormir será a ti y me siento muy complacido por ello. Así será un día tras otro y otro y otro, y realmente siento que no podría cansarme nunca...

Faltaban solo unos pocos milímetros antes de llegar a mis labios, pero no pude soportarlo y fui yo quien terminó con la distancia. Y es que mi respuesta inmediata a su propuesta de mudarnos juntos fue rechazarlo ya que me daba miedo dar este paso. Compartir el mismo espacio puede llegar a ser más difícil de lo que cualquiera puede pensar. ¿Realmente podia sentirme como en "mi casa"? ¿Tengo completa libertad para moverme por todos lados? ¿Cuando te dejas de sentir como una intrusa? No quería tomar confianza tan pronto como para ser invasiva, pero tampoco quería que él pensara que me sentía incomoda estando aquí.

Muchas cosas que considerar.

Sus palabras realmente lograron calmar esos extraños pensamientos, permitiéndome disfrutar del momento y del inicio de algo nuevo.

—Lastima que te tienes que ir esta noche —susurré contra sus labios.

—Lo sé, pero sé que estarás aquí para cuando regrese.

—Por supuesto que si.

Volvimos a besarnos antes de continuar acomodando mis pertenencias en "nuestra" habitación. El resto del día solo nos dedicamos a aprovechar el tiempo juntos antes de que los chicos pasaran por él para llevárselo al otro lado del país por cuestiones de la banda. Cuando la hora llegó, lo acompañé por su maleta y lo seguí por el trayecto hacia la puerta principal, asegurándome de que llevara todo lo necesario.

—¿Guardaste suficiente suficiente ropa?

—Si.

—¿Llevas el cargador? No puedes dejarlo como la vez pasada.

—Aquí lo llevo —señaló la mochila colgada en sus hombros.

—¿Estás seguro? Podrias revisar para asegurarte...

—Hey, todo está bien —se detuvo justo al lado de la puerta y giró hacia mi—. Llevo lo necesario, no te preocupes. Estaré bien.

—Lo sé, lo sé, es solo que te extrañaré.

imagines | lrhHikayelerin yaşadığı yer. Şimdi keşfedin