88

2.5K 199 80
                                    

—Llegas tarde.

—Como sea —rodó los ojos—. Vamos, súbete.

Ahora fue mi turno rodar los ojos. Me subí al auto antes de que Jordan comenzara con alguna escena. Esperaba que al momento de estar arriba, me saludara o tan siquiera se dignara en mirarme, pero solo aceleró al segundo en que se cerró la puerta.

El viaje a su departamento estaba siendo silencioso y demasiado incómodo, al menos por mi parte, ya que parecía que a él no le importaba tanto.

—Creí que te vería esta mañana —dije neutral. Giré un poco el rostro para poder ver su reacción.

—Me quedé dormido —se hundió en hombros—. Acabo de despertar hace unos minutos.

—Lo sé, llegaste tarde por mí —reproché. Jordán sonrió de lado.

—Estoy aquí ¿No? Eso debería ser suficiente.

Me di por vencida y regresé mi vista hacia la ventana. Era un caso perdido insistir con él cuando era obvio que había olvidado que nos veríamos para este día. Es decir, a veces también se me olvida lo que hemos planeado juntos, pero al menos me preocupo por ello y tratar de remediarlo. Jordan no era así, no debería sorprenderme.

Llegamos al edificio de su departamento y subimos hasta el piso correspondiente. Cuando buscaba las llaves en su bolsillo, el celular sonó. Dejó a un lado lo que estaba haciendo para contestar. Me recargué contra la pared estando segura de que pasaría mucho tiempo hasta que decidiera colgar la llamada.

—¿Hola? —no sé quién era, pero se podía escuchar música del otro lado de la línea— ¿Ahora? —me miró con disimulo—. Está bien, voy en un momento.

—¿Qué?

—¿Recuerdas a mi amigo del otro día? —arrugué la frente. Jordán tenía muchos amigos por todos lados, no sabía de quién podía estar hablando—. No importa. Está con los demás chicos y me invitaron a pasar la tarde con ellos.

—¿En serio te vas a ir? —pregunté incrédula.

—Si, ¿Por qué no?

—No lo sé. ¿Tal vez porque tú y yo ya teníamos planes? ¡Estoy aquí, Jordán! Te esperé toda la maldita mañana hasta que decidiste aparecerte. No te puedes ir solo así.

—No rechazaré la invitación a una fiesta solo por ti —suspiró frustrado. Colocó sus manos en los bolsillos de su pantalón y sonrió coqueto—. No te molestes, vamos con ellos.

—Yo no quiero estar con tus estúpidos amigos.

—Bien —soltó molesto— Entonces vete a tu casa o quédate aquí, me da igual —comenzó a caminar molesto hacia los elevadores.

—Si te vas en este momento no pienses que estaré esperándote —amenacé con él de espaldas—. No volverás a verme.

Jordan se quedó quito unos instantes como si realmente lo estuviera dudando, pero solo fue en lo que elevador abría sus puertas. Grité su nombre para que regresara, pero me ignoró por completo y se metió al elevador. Al quedarme sola en el pasillo, solté un fuerte gruñido y para desahogarme, le di una patada a la puerta. No hubiera importado si no hubiera sido la puerta del vecino. Escuché como se quitaban los seguros por dentro, siguiendo el sonido de la perilla. Luke apareció detrás de ella, notoriamente molesto. Cuando vio que se trataba de mí, él enojó desapareció de su rostro.

—Oh, eres tú. Creí que había sido el salvaje de tu novio de nuevo.

—En serio lo siento, Luke. Estaba enojada y fue sin querer...

imagines | lrhNơi câu chuyện tồn tại. Hãy khám phá bây giờ