46 (Segunda Temporada)

543 38 12
                                    

2/2

Narra Paula

- Quiero que sepas que esto no es una novedad para él. Y comienzo a pensar que un patrón se está formando.

- ¿Qué queres decir? Paio me contó sobre lo que hiciste con una antigua novia de él. Te puedo garantizar que, a pesar de que el escenario sea parecido, la actriz principal cambió, y la historia es otra.

- Cuidado, porque las historias pueden repetirse- Alertó en un tono amenazante.

Yo no supe qué responderle. Usando toda la fuerza que tenía, lo empujé lejos, finalmente liberándome de él.

- ¡Déjame en paz, demonio!

- ¿Demonio, yo? - Preguntó riéndose. - ¿O le temes al demonio que despierto en vos?

- Es la última vez que te lo digo, ¡déjame en paz!

- Mi querida Paula, todos tenemos un lado oscuro en nosotros, un lado menos noble que generalmente mantenemos muy bien guardado. Por miedo, vergüenza, reglas de la sociedad o como vos dijiste, escrúpulos que mantenemos sobre control. No tengo ese problema, Paula. Y me doy cuenta que vos sentís eso. Siento que sabes que yo ayudo a despertar ese lado tuyo, ¿no? Y vos queres, ¿no queres? ¡Queres ser una chica mala, muy mala!- Me levanté del sofa como si estuviese siendo electrucutada.

Hablé con voz firme, a pesar de que por dentro estaba sintiéndome asustada.

- No sabes nada sobre mí. Y eso es todo lo que vas a seguir teniendo de mí: nada

Él también se puso de pie, parado adelante mío, mirándome con una visible apreciación.

- ¡Ah, Paula lo sé! Lo sentí desde la primera vez que te vi y supe que finalmente, encontraría a una compañera que estuviera a mi altura.- Él me miraba como si fuese a hacerme algo. - El único problema es que él siempre prefiere lo que debería ser mío.

Me tensé ante sus palabras tan cargadas de odio y envidia. Antes de que algo más pudiera ser dicho o hecho, salí corriendo y me encerré en el cuarto de Paio.

Me quede parada, apoyada en la puerta, intentando controlar los latidos asustados de mi corazón y el pensamiento confuso.
Miré a la cama en donde él dormía y, con alivio, me acosté a su lado, abrazándolo con fuerza y apoyando mi cara en su cuello.

- ¿Está todo bien?

Lo abracé con más fuerza y cerré los ojos antes de responder.

- Si, está todo bien. No te preocupes.

********

Narra Mica:

Ya estaba viajando desde hace bastante tiempo. Normalmente, me llevaría menos tiempo pero por causa de mal tiempo, tenía que manejar más lento y el viaje se tornó más largo.

Prendí la radio bastante fuerte para distraerme y pasar el tiempo.
Cuando volví a casa a la tarde, no había nadie. Fui hasta el garage y confirmé que mis papás habían salido, ya que solamente el auto de mi mamá estaba ahí.

Decidí dejar una nota para avisarles que había salido y a donde iría. En seguida, le mandé un mensaje de texto a Bruno para avisarle que iría a encontrarlo.

Mi mente estaba llena de expectativa y cuestionamientos:
¡Un bebé! ¡Un bebé mío y de Bruno! - No dejaba de pensar mientras sentimientos contradictorios me invadían en el pecho. Yo estaba asustada, ¡y muy!

Esa noticia era completamente inesperada y yo estaba con miedo y llena de dudas.
Yo no estaba desinformada, sabía muy bien lo que el sexo sin protección podría traer. Pero las circunstancias habían sido extraordinarias y la emoción superó cualquier racionalidad.
Yo sé que eso no justificaba nada. Pero era la verdad y, después de todo, nosotros estamos casados.

Más Que Hermanos [Adaptada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora