Dios del omniverso

95 Capítulo 95: Conoce a tu enemigo Parte 2

Ambos asesinos hicieron una mueca ante el repentimiento giro de los acontecimientos, estaba completamente fuera de su espectro de posibilidades. Esta nueva variable ahora significaba que sus esperanzas de matar a Arias se habían desvanecido y no se habían preparado para esto.

Su única esperanza ahora era escapar para reformular un plan o contactar a la liga y revelar esta información. Tristemente, Arias no iba a dejar que nada de eso sucediera.

"¿Nada que decir?" Arias inquirió casualmente con una ceja levantada y una postura relajada. Dadas las circunstancias, esperaba que suplicaran por sus vidas o al menos intentaran negociar.

Pero no...

La mirada de las dos hermosas mujeres no había cambiado, en todo caso, parecían más decididas a acabar con su vida.

No respondieron a sus palabras y continuaron mirándolo con saña, dejando en claro que no iban a hablar. A diferencia de los mercenarios a sueldo, los asesinos de la liga eran increíblemente leales y disciplinados. Ninguna cantidad de tortura los hara hablar.

Desafortunadamente para ellos, Arias no tenía motivos para siquiera intentar torturarlos. Si no estaban dispuestos a hablar, obtendría la información que quería directamente de sus mentes. "No importa, no es como si creyera lo que dices de todos modos".

Sin perder tiempo, descartó la idea de hablar y sus ojos brillaron tenuemente mientras miraba a sus dos cautivos. No pasó mucho tiempo para que ambos sintieran un fuerte dolor en sus cabezas.

Querían gritar y hacer muecas de dolor, pero su entrenamiento no les permitía mostrar debilidad frente a un enemigo. En cambio, se mordieron los labios con fuerza, sacando sangre incluso mientras hacían todo lo posible por no emitir ningún sonido.

A pesar de su agenda apretada, Arias siempre practicaba sus habilidades durante su tiempo libre, profundizando en ellas.

Como tal, extraer información no fue difícil... siempre y cuando el objetivo tuviera poca fuerza de voluntad o resistencia, menos cuanto tienen, menos esfuerzo necesitan poner, haciendo que todo el intercambio fuera rapido y bastante indoloro.

Sin embargo, sus dos cautivos eran todo menos débiles de voluntad mientras luchaban contra la invasión extranjera en su mente, haciendo que toda la experiencia fuera muy dolorosa.

Por parte de Arias, él también sentiría un dolor cada vez peor junto con el agotamiento mental a medida que avanzaba... pero no le importaba. Con su cuerpo reparando activamente todos y cada uno de los daños que él mismo se había causado, no tenía motivos para detenerse, a pesar del dolor... ni siquiera trata de negarlo.

La extracción forzosa no mostró mucho, pronto los dos cautivos comenzaron a sangrar por los ojos y los oídos, siendo el daño en sus mentes... enorme.

Sus mentes se estaban desvaneciendo y comenzó a parecer que Arias finalmente se saldría con la suya. Incluso entonces no se dieron por vencidos, hasta que...

pa~

Un fuerte estallido resonó en toda la habitación cuando a ambos cautivos les explotaron los cerebros, materia incluso saliendo de sus oídos y rezumando por los bordes de los ojos.

"Tsk". Fue una novedad para Arias y completamente inesperada, pero al mismo tiempo fue una experiencia enriquecedora.

Inicialmente había pensado que podía romper fácilmente cualquier mente con solo un poco de práctica, pero esta interacción emergió lo contrario. Mirando hacia atrás en lo que sucedió con la Rullette, tenía cierto sentido.

Cuánto más relajado e inconsciente estaría alguien, más fácil sería entrar en su mente. Además, con ella no estaba tomando sino poniendo algo en su mente.