one shorts de ZoroxRobin.

By Dair_Cipriano04

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¿Te gusta la pareja tanto como a mi? Pues te invito a disfrutar de estos cortos de romance sobre ellos 💜 Es... More

introduccion.
#01
#02
#03
#04
#05 Parte 1
#05 Parte 2
#06
#08
#09
#10
#11
#12
#13
#14
#15
#07
#16
#17
#18
#19
#20
#21
#22
#23
#24
#25
#26
#27
#28
#29 Parte 1
#29 Parte 2
#30
#31
#32
#33
#34
#35
#37
#38
#39
#40
#41
#42
#43
#44
#45
#46
#47
#48
#48 Parte Dos.
#49
#50
#49 Parte Dos
#51
#52
#53
#54
#54 Parte 2
#55
#56
#57
#57 Parte 2
#58
#59
#60
#61
#61 Parte 2
#62
#63
#64
#65
#66
#67
#68
#69
#70
#71
#72
#73 Parte 1
#73 Parte 2
#74
#75
#76
#77
#78
#79 Parte 1
#79 Parte 2
#80
#81
#82
#83
#84
#85
#85 Parte 2
#86
#87
#88
#89
#90
#91
#91 Parte 2
#92
#93
#93 Parte 2.
#94
#63 Parte 2
#95
#96
#97
#98
#99
#100
#101
#102
#103
#104
#105
#106 Parte 1
#106 Parte 2
#107
#107-B
#108
#109
#110
#111 Parte 1
#111 Parte 2
#112
#112 Parte 2
#113
#114
#115
#116
#117
#116 Parte 2
#117 Parte 2
#118
#119
#120 FINAL.

#36

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By Dair_Cipriano04

Chopper sonreía mientras caminaba al lado de Zoro, el peliverde sonreía un poco mirando al pequeño reno contarle todas las cosas que planeaba enseñarle a Robin al día siguiente en la isla, como la biblioteca que había encontrado con una sección enorme sobre culturas perdidas.

Estaba comenzando a atardecer y todos habían quedado de reunirse en el barco nuevamente antes de que anocheciera, pero ambos se quedaron pasmados cuando notaron que el barco no estaba en el muelle.

-¡Oh, no! ¡El barco no está! ¡Ahí estaban Robin y Ussop!- grito Chopper bastante alterado, se acercaron un poco más y chopper grito aterrado.- ¡Robin está en el agua!- señaló a la playa, justo en la orilla.

Robin estaba tendida en la orilla, apenas sobresalía su cuerpo del agua y había sangre a su alrededor, Zoro maldijo y corrió para llegar a ella, Chopper rodeo todo el muelle y corrió por la arena muy preocupado por la morena.

Cuando llego hacia ella cerro unos segundos los ojos, la ropa estaba totalmente desgarrada dejando a la vista más piel de la que jamás había visto de ella, tenía marcas en el cuello, las muñecas y el vientre, había un profundo corte en la parte interna de su pierna, sus brazos estaban totalmente rasguñados y uno de ellos tenía un corte enorme, había algunos golpes en su rostro y llevaba esposas en los tobillos, las llaves estaban tiradas a un lado, siendo arrastradas por la pequeña corriente.

Zoro no perdió el tiempo, tomó las llaves y de inmediato cargo a Robin para llevarla a la orilla, al llegar al lado de Chopper se percato de la llegada de Nami y Brook, que veían la escena a lo lejos mientras corrían.

El abrigo abandono el cuerpo de Zoro y lo utilizo para cubrir el cuerpo de Robin mientras Chopper se encargaba desesperadamente de revisarla, luego quito las esposas, eso hizo que Robin tomara un profundo respiro.

-Está respirando, pero debo ver sus heridas con más atención.-Susurró conteniendo las lágrimas, Zoro asintió y fue empujado por Nami, que miraba  a su compañera con el terror plasmado en los ojos.

-¿Que pasó? ¿QUE LE HICIERON?- Grito mirando al pequeño reno, él se encogió de hombros.

-¡Cuando llegamos ella estaba en el mar! El barco no estaba y ella estaba casi hundida.- Chopper comenzó a temblar y Nami lo tranquilizo.

-Creo que lo mejor es llevarla a un lugar a descansar mientras resolvemos esto.- hablo brook bastante serio, Nami se puso de pie y señaló al pueblo.

-¡vi un hotel de camino acá!- Nami se puso de pie y señaló al pueblo.- Está en las afueras del pueblo por lo que será más fácil escondernos todos ahí, o por lo mejor a Robin.

-Yo la llevo.- Zoro miró a todos y al no obtener objeciones cargo a Robin entre sus brazos, procurando que el abrigo la cubriera por completo.

Siguieron a Nami y esperaron a que hiciera los movimientos dentro del hotel, después se metieron a la habitación con mucha cautela.

-Iré a buscar a los demás, Brook, ¿podrías ayudarme? Zoro no será de mucha ayuda, podría perderse, mejor que se quede con Chopper.- el esqueleto asintió y ambos salieron dejando al pequeño reno y a Zoro junto a Robin.

Chopper aprovecho la soledad para limpiar cada herida de Robin y dedicarse a darle unos puntos en las heridas que necesitaban sutura, Zoro permanecía en una esquina sentado observando la escena.

La ropa de Robin estaba en el suelo, lo único que la cubría de la desnudez en esos momentos era una sabana del hotel, Chopper trabajaba de manera limpia y tranquila, las heridas en el cuerpo de Robin eran muchas y delicadas.

-Parece que se desquitaron de algo con ella.- Susurró Chopper terminando las suturas de la parte interna de su pierna, tenía muchos rasguños en las piernas, parecía que la habían arrastrado contra algo, pero la mayoría de raspones estaban en sus brazos, por lo que Chopper suponía que se defendió en un inicio.- Las esposas eran de kairoseki, así que no pudo seguir defendiéndose, por las marcas en sus muñecas supongo que también las llevaba ahí, pero se las quitaron.

-¿Y por qué dejaron las de sus pies si nos dejaron las llaves?- preguntó Zoro acercándose para ayudarle con las heridas.

-Tal vez no tuvieron tiempo de quitarlas todas, realmente no lo sé.- Chopper había cambiado de semblante a uno mucho más serio.- Pero no solo fue físico lo que hicieron, Robin ni siquiera tenía ropa interior, y esa clase de heridas no las puedo curar yo.- Susurró mirando a Zoro, el peliverde comprendió lo que estaba diciendo.- Y eso es lo que más me duele.

-Cuando nos encontremos van a arrepentirse de todo, ya lo veras.- Le dio un pequeño empujón al reno para intentar quitar esa mirada tan triste.- Ella es muy valiente, no le va a pasar nada, cuando despierte nos dirá todo y podremos recuperar el barco y tomar venganza.

Chopper asintió muy entusiasmado mientras seguía curando con mucho cuidado las heridas de Robin, Zoro le ayudaba en todo lo que podía, pero el material en la mochila de chopper no era mucho, por lo que terminó siendo insuficiente y acabandose.

-Debo ir a comprar más material, todo mi material extra estaba en el barco, ¿Crees poder quedarte con ella en lo que voy?- Zoro asintió mientras vendaba una de las piernas de la morena con calma.

-Ve tranquilo, si se despierta me encargo de preguntarle que ha pasado.

El pequeño reno salió rápidamente con su mochila lista para ser reabastecida mientras el peliverde se encargaba de terminar el vendaje en la pierna de Robin, pero no contaba con que se iba a despertar.

Solamente le faltaba colocarle el seguro para que su pierna estuviera lista, pero recibió una patada directa en el rostro, misma que lo hizo caer de espaldas al suelo, cuando se pudo levantar llevo una mano a su nariz sangrando y miró a Robin.

Estaba en cuclillas en el suelo, miraba el lugar con detenimiento mientras sostenía firmemente la sabana contra su cuerpo, luego su mirada cayó en Zoro, relajo su rostro y se dejó caer de rodillas.

-¿Estas bien?-pregunto el peliverde mirando su mano llena de sangre, la limpio en su pantalón y Robin suspiro.

-Si, creo que si... ¿Cómo está ussop?- preguntó aceptando la mano del peliverde para ponerse de pie.

-No sabemos aún, te encontramos en la playa, el barco no estaba.- le tendió con algo de cuidado su abrigo, estaba un poco húmedo pero era lo único que tenían para cubrirla, Robin lo tomó y de inmediato abrocho cada botón.- Chopper y yo nos dedicamos a cuidarte mientras Nami buscaba a los otros para armar una estrategia.

-Joder, Ussop salvo mi vida.- una mano de Robin subió temblorosa hacia su pecho, luego miró a Zoro.- Tomaron el barco y lo primero que hicieron fue esposarme de pies y manos para que no pudiera defendernos.- Se sentó en la cama y el peliverde la siguió, tomó con cuidado la pierna de la morena y acomodo el vendaje que se había estropeado.- No sé si querían matarme o solo fue su momento de diversión, pero me ahorcaron hasta que me desmaye, recuerdo pocas cosas, como que rasgaban mi ropa con navajas y me apuñalaban al mismo tiempo, recuerdo ver a varios hombres sobre mi en el suelo... Creo que fue mejor haberme desmayado... Mi último flash de recuerdo es Ussop lanzandome del barco con las esposas de las manos abiertas y las llaves de las otras.- trago saliva, parecía que le dolía hablar.

-No te preocupes, cuando estén todos vamos a recuperar el barco y traer a Ussop de regreso para poder agradecerle.- Robin asintió lentamente, miró a su alrededor y señaló una puerta.

-¿Eso es el baño? ¿Puedo bañarme?- pregunto un poco dudosa, Zoro miro la puerta y asintió poniéndose de pie.

-Si, adelante.- abrió la puerta del baño y Robin se puso de pie, pero al intenté dar un paso sus piernas vencieron, por lo que Zoro se apresuró a sujetarla contra él.- ¿Estas bien?

-La pierna, me está empezando a doler mucho.- Zoro la ayudo a sentarse en la cama y con mucha precaución reviso la pierna de la morena, las vendas seguían limpias por lo que parecía estar bien.

-Te dieron varias puntadas ahí, supongo que no deberías caminar, ¿te llevo?- Robin asintió siendo ayudada por Zoro para llegar al baño.

****

Chopper entró al pequeño cuarto de hotel con su mochila llena y un par de bolsas extra entre sus manos, pero se sorprendió al ver que no había nadie.

Caminó por el cuarto y escucho ruido en el baño, atravesó la puerta y se encontró con Robin en la vieja bañera abrazando sus piernas mientras Zoro se dedicaba a lavar su espalda con mucha delicadeza mientras le decía palabras de aliento.

-... Y no quiero que me digas más por que seguramente los voy a matar a todos, pero no me gusta ver que llores, crei que jamás te vería llorar, y realmente elegiste al peor para hacerlo por que no sé consolar personas.- exprimio la esponja y lavo el jabón de su espalda.- Lo único que puedo decirte es que me comprometo a patear el trasero de todos y cuidar tu espalda siempre, a cada momento, por que sé que será difícil volverlos a ver a todos... ¡Sin llorar! Si lloras te voy a echar agua en la cabeza.

Robin se giro un poco y le sonrió de una forma muy tenue, paso un mechón de su húmedo cabello tras su oreja y cerró los ojos al sentir el agua caer sobre ella, mojando su rostro.

-Hola... ¿Chicos? Llegué.-susurró el reno temiendo  arruinar el momento, pero Robin le sonrió y sus ojos volvieron a llenarse de lágrimas, pero Zoro le volvió a echar agua en la cabeza.

-Te lo advertí, me pone nervioso verte así.- le dijo retirando el cabello de su rostro.

-Te he traído ropa nueva.- Chopper señaló las bolsas.- Cuando quieras salir te reviso las heridas otra vez y te cambias, ¿te parece?- La morena asintió.

-Creo que ya es el momento.- Elevó la mirada hacia el peliverde, él tomó una toalla y rodeo su cuerpo con ella, después la tomó entre sus brazos y la cargo hasta la cama, cosa que antes no había hecho, pues para llevarla al baño solo la ayudo a caminar.

Una vez en la cama fue ayudada a ponerse la ropa interior y luego Chopper reviso todas las heridas, vendando ambos brazos de la morena y una de sus piernas, colocando algunos otros detalles en otras heridas, hasta que termino completamente curada, sana y cambiada.

Varios minutos después  Nami entró con el cabello muy revuelto, se veía molesta pero la banda completa entró a la diminuta habitación, Sanji buscaba rodear a Robin para saber como se encontraba, pero ella se encontraba bien, solo quería ayudar a Ussop y recuperar el barco.

Robin les contó un poco lo que recordaba  dejando muy de lado lo que le habían hecho a ella, sabían a donde irían con el barco, así que planearon rápidamente la estrategia que harían, les tomo una hora aproximadamente, pero en esa hora Franky se había ido  para conseguir un barco, lo que planeaban era bastante sencillo pero elaborado a la vez.

Las personas que les quitaron el barco  planeaban usarlo para transportar personas de una parte de la isla a otra, era una isla grande así que  era un viaje tardado para dar toda la vuelta, por lo que un equipo estaría cruzando la isla por tierra y otro se encargaría de llegar por agua.

Nami, Luffy, Chopper y Robin irían por agua, entrando por pequeños canales con el barco que habían conseguido, mismo que al ser tan pequeño podía entrar el canales para disminuir el tiempo, mientras que Zoro, Sanji, Franky y Brook irían por tierra en un vehículo que Sanji había conseguido.

Se separaron y ambos equipos emprendieron sus caminos, Robin apoyaba en todo creando copias suyas para evitar moverse y empeorar sus heridas, aunque ella estaba deseando levantarse y hacer todo por ella misma chopper la tenía obligada a permanecer sentada.

Mientras tanto en tierra Zoro manejaba el auto con una velocidad sorprendente, siendo guiado muy firmemente por Sanji, quien se dedicaba a cuidar detalladamente el camino para no perderse, Franky de fondo se mantenía creando mejoras en ciertas armas que había conseguido, por que si entrarían de forma discreta era mejor ser cuidadosos con las armas a utilizar.

El viaje no duró unos minutos, ambos equipos duraron un par de horas en el viaje hacia la otra parte de la isla, misma que planteaba un escenario mucho menos alentador que el anterior, pues en el otro lado de la isla había alegría, muchos colores y risas, y este lado de la isla era sumamente sombrío, los edificios estaban en su mayoría abandonados o en aparecía muy descuidada, no se veían muchos vehículos y parecía que desconocían la presencia de canales a los lados del muelle, pues estaban vacíos y fue fácil para los equipos reunirse.

Sanji bajo del auto  revoloteando alrededor de Nami con una enorme sonrisa mientras la atrapaba entre sus brazos para bajarla y adorarla como era usual en él, pero cuando terminó de admirar a la navegante se giro y se encontró con Zoro gritando hacia Robin, la morena lo veía con mucha diversión mientras se cruzaba de brazos y negaba a dejarse ayudar.

-¡Estas obligada a ser ayudada!- el peliverde la señaló, estaba metido en el agua hasta las rodillas para poder llegar al barco, Robin volvió a reír.

-No voy a saltar, es una locura.- le dijo ella mirando hacia abajo, Zoro miró a su alrededor.

-Tampoco es que tengas muchas opciones.- se encogió de hombros.- ¿O no confías en que te atrape?- pregunto abriendo los brazos, Robin le guiño un ojo.

Pero luego hubo ruido, Franky entró al agua influenciado por el rubio y cargo a la morena de sorpresa, dejando al peliverde y a la misma morena sorprendidos por la acción, aunque el pobre ciborg no había visto la divertida escena que habían montado y sólo siguió indicaciones del cocinero para poder ayudar a su nakama.

La dejo suavemente sobre sus pies en la arena al lado del rubio, mismo que pudo halagarla completamente de los pies a la cabeza y recordarle lo mucho que la amaba, Robin le sonreía aceptando los cumplidos con calma y observando a su compañero peliverde salir del agua con molestia y colocarse los zapatos mirando la escena de reojo.

El vehículo los ayudó a trasladarse rápidamente hacia la zona principal del muelle en donde lograron ver el barco, estaba siendo resguardado por varios hombres fuertemente armados, no lograban ver a Ussop por ningún lado, sin embargo lograron ver a grandes cantidades de mujeres siendo bajadas, Robin abrió mucho los ojos al ver que ese pudo ser el destino de ella si Ussop no la hubiera lanzado fuera del barco.

Observaron como fueron subidas a varios vehículos y trasladadas con mucha seguridad, así que se pusieron de acuerdo para dividirse nuevamente, unos irían por el barco y otros a buscar a Ussop, como para la búsqueda de Ussop necesitaban mucha discreción se decidió a que irían Robin, Nami, Sanji y Zoro, mientras que por el barco irían Luffy, Brook, Franky y Chopper.

Los equipos emprendieron el viaje a sus respectivos lugares, la morena iba sentada junto a la navegante en la parte trasera del vehículo mientras el peliverde manejaba y el rubio lo guiaba con mucha molestia.

Lograron estacionarse a una buena distancia del edificio a donde entraron los otros vehículos, en esta ocasión Sanji logró ayudar a ambas mujeres a bajar, siempre recordando que se veían hermosas, mientras él las ayudaba Zoro había inmovilizado a cuatro personas para quitarles los uniformes y poder escabullirse dentro del edificio.

Se pusieron los uniformes sobre la ropa que llevaban puesta, eran uniformes muy grandes y holgados que los hacían verse bastante iguales a todos, sin embargo el peliverde era el que terminaba estando más apretado que los demás, llamando un poco la atención.

Se colocaron las gorras y cubrebocas, ahora tenían casi todo el rostro cubierto y pudieron entrar muy fácilmente, pero a diferencia de los verdaderos hombres del lugar, todos llevaban una cosa de fuera para identificarse y esto eran pequeños listones de color blanco atados en el cinturón.

Se separaron un poco todos una vez dentro, no se alcanzaba a distinguir con quien iban, pero Sanji buscaba siempre tener a su lado a alguna de sus compañeras, no sabía a quién tenía a su costado, pero sabía que era una de ellas y con eso se sentía un poco mejor, esperaba que fuera Robin por que sentía un extraño sentimiento de celos al verla sonreír y alargar muchas sonrisas con su idiota compañero.

Miraba a la persona a su lado con ojitos de amor y sostenía el arma contra su pecho para verse mucho más grande con ella entre sus brazos, cuando logró ver a los ojos a su acompañante se dio cuenta de que era Nami, maldijo en voz baja y luego se giro buscando a la morena, pero se topo de frente con dos hombres que señalaban un escalón que parecía dirigir a unas habitaciones.

-Necesitamos una mano allá en esas habitaciones, mano dura por favor.- Sanji asintió sin hablar y Nami lo acompaño con silencio completo, principalmente por que ella era una mujer haciéndose pasar por hombre y si la descubrían le iría muy mal.

Por otro lado Zoro no tenía una preocupación de quien estuviera a su lado en la caminata, la persona que iba con él mantenía un poco de distancia y miraban con cautela cada pequeño rincón, hasta que encontraron una puerta que parecía dar a un sótano, el peliverde sintió una mirada y se perdió unos segundos en un par de profundos ojos azules, sintió un extraño sentimiento en el pecho.

-¿Entramos?- preguntó él y Robin asintió, así que abrieron la puerta y observaron el lugar con cautela, tenia luz pero muy tenue y alumbraba a una extensa habitación que parecía estar hecha para baile, por que había un tubo colocado sobre un escenario, sillas regadas y un bar colocado en toda la extensión de la pared.

Las personas que estaban ahí los llamaron, ambos se acercaron y siguieron las indicaciones que les dieron y se tuvieron que mezclar con otros guardias a mantenerse en el evento, Zoro busco en todo momento seguir con la morena a su lado y a cada pocos segundos se giraba para verla a los ojos y siempre se encontraba con ellos, mismos que se entrecerraban un poco para dar a entender que le estaba sonriendo.

El extraño evento comenzó y mujeres muy asustadas eran obligadas a salir y presentarse, algunas incluso lloraban asustadas mientras las obligaban a danzar y bailar, Robin tenso su cuerpo dándose cuenta que ese hubiera sido su destino.

Pasaron unas cuantas mujeres y luego comenzaron a salir hombres, uno tras otro, todos asustados con movimientos temblorosos y esposados, de pronto se encontraron con Ussop, llevaba solamente un pantalón y miraba a su alrededor con pánico, lo estaban promocionando para ¿venderlo? Lo mencionaban como esclavo y detallaban que era bastante fuerte, Robin se preocupó bastante al verlo con el ojo inflamado.

El evento terminó y todas las personas que habían salido anteriormente al escenario estaban de pie con la misma cadena todos, Robin noto que los estaban canjeado por unas tarjetas que coincidían con el número que llevaban en la ropa.

Señaló con cuidado las tarjetas y se escabulleron entre los guardias que las portaban, Robin con mucho cuidado logró sacar la tarjeta de Ussop del bolsillo del hombre que la tenía y Zoro la sacó para canjearla por su compañero, mismo que temblaba un poco, pero cuando se reunieron con Robin ella lo miró y Ussop comprendió todo observando la cicatriz en el ojo de su otro compañero, estaba siendo rescatado.

Lo llevaron a rastras para afuera del lugar ese y Ussop actuaba muy bien fingiendo que no quería ir con ellos, tanto que exaspero al peliverde que por unos segundos lo dejo ver su rostro.

-Joder cállate, nos estas haciendo difícil sacarte de aquí.- murmuró con mucha molestia, el Moreno asintió lentamente y comenzaron a moverse con cuidado, hasta que fueron consientes de que había mucho ruido y movimiento a su alrededor.

-Hay una mujer, hay dos infiltrados y llevan una cinta blanca en el cinturón.- escucharon los gritos, Robin de inmediato se quito la cinta y Zoro la siguió, se miraron fijamente.- ¡Ustedes dos! Pongan atención, hay una mujer de cabello naranja por aquí, nos ha querido robar.

-joder, Nami no pudo elegir peor lugar para robar que este.- Zoro cerró con mucha fuerza los ojos y luego se acercó a Robin.- Saquemos a Ussop de aquí, te lo llevas y yo regreso por esos idiotas.

-¿Y dejarlos solos?- preguntó Robin negando.- Joder no, es muy peligroso.

-Y tú estás herida.- le recordó el peliverde.- No quiero que te pase algo.- esto último lo dijo con un tono de voz muy diferente al que solía usar, por lo que sorprendió a la morena, a Ussop y a él mismo.

Ignoro el momento y luego señaló a la salida.

-Los acompaño, solo necesito un uniforme.- Hablo Ussop para intentar calmar el ambiente, Zoro de inmediato tomo a un guardia y lo sometió, lo escondieron en un armario y Ussop salió uniformado.

Se mezclaron nuevamente, parecía haber un desorden completo, hasta que un hombre detuvo a todos los guardias, Robin maldijo sintiendo una patada en la espalda que la hizo caer, al mismo tiempo otros guardias caían por la misma acción.

-¡Escuchen todos! ¡Sin mascaras y sin gorras!- un hombre retiro gorras y mascaras, Robin maldijo sintiendo su cabello caer sobre su rostro, cerró los ojos y recibió una fuerte patada en el rostro.

-Joder, otra maldita mujer.- respondió uno de ellos levantandola del cabello.- A ti te conozco, fuiste mi regalo de cumpleaños hoy.- Robin abrió los ojos y se topo de frente con el rostro del hombre que le mordió la cintura hasta hacerla sangrar, maldijo teniendo recuerdos del momento que creía que jamás recordaría.- Supongo que lo que es de uno siempre regresa y me estas poniendo realmente duro con ese uniforme.- la miro de arriba a abajo y luego se lamio el labio inferior.

-Ni se te ocurra seguirla tocando.- La voz de Zoro hizo eco en la habitación, estaba en el suelo siendo sostenido por dos hombres, tenía un pie sobre y al otro hombre haciendo presión con la rodilla sobre sus brazos que mantenía en su espalda, el hombre que sostenía a Robin la obligó a besarlo y eso hizo desesperar al peliverde.

Se libero del agarre con extrema facilidad y siendo ayudado por Ussop derrotó a todos los hombres que los sostenían.

No eran muchas personas, por lo que terminaron muy rápido y Zoro logró llegar con Robin, ella estaba temblando, pero acabó con todos los demás hombres en pie en la habitación con varios pares de brazos extra.

-¿Estás bien?- Pregunto el peliverde al ver sangre corriendo por su rostro, Robin asintió.

-Me mordió el labio con tanta fuerza que creo que me abrió.- Zoro la miró con un poco de miedo, ella estaba temblando con fuerza y con las mejillas sonrojadas, su labio inferior temblaba.

-No tengo agua para mojarte, pero recuerda que te dije que sin llorar. - Zoro la tomó de los hombros y la meneo un poco.- ¿Recuerdas?- ella asintió con mucha lentitud.- Ahora ponte de pie y vamos.

Robin se puso de pie y comenzaron a correr los tres, hasta que se toparon Con Nami y Sanji, mismos que estaban un poco desesperados mirando hacia el edificio.

Sanji corrió hacia ellos y apresuró a tomar a robin entre sus brazos, pero ella forcejeo un poco para bajar y correr observando con un poco de rareza al rubio, que la observaba con ojitos de amor y buscaba mantenerse cerca de ella.

Llegaron al auto y subieron, Zoro volvió a subir para conducir y abrió paso con rapidez, atravesó las rejas cerradas del estacionamiento y estas cayeron al suelo con un gran estruendo.

Condujeron rápidamente y literalmente terminaron perdidos entre las calles de la enorme ciudad abandonada, el rubio se negaba a pasar al asiento de copiloto para guiar al camino por estar encantado de rodearse de ambas mujeres.

Robin suspiro un poco incomoda con toda la atención brindada así que salto rápidamente al asiento de copiloto, tomando el mapa que estaba sobre el asiento y guiando al peliverde con mucha calma.

Tras varios minutos de  conducir lograron llegar al muelle, Zoro suspiro bastante estresado por la situación  y miro con odio hacia el rubio, que estaba fijamente mirando hacia ambos.

Bajaron del auto y lograron ver el barco, Luffy estaba de pie sobre el muelle mirando en su dirección.

-¡Ahí vienen todos!- grito Luffy señalandolos, Chopper corrió por cubierta y comenzó a correr en círculos viendo a Robin correr con  mucha velocidad hacia ellos sin cuidado de sus heridas.

Subieron al barco y de inmediato zarparon, Robin una vez dentro del barco se dejó caer en cubierta y se quito el molesto uniforme, su ropa ahora tenía manchas de sangre bastante grandes, respiraba con un poco de dificultad y de inmediato tenía a Chopper revisandola.

-Ahora resulta que necesitas también puntos en el labio.- tomó su rostro con cuidado y lo evaluó.- Vamos a enfermería, Nami también tiene varios golpes en el rostro.

-¡Y yo la defendí!- habló Sanji dando un paso hacia el frente con una pose de galantería.- en cuando vi lo que pasaba no permití que nadie le hiciera daño a mi hermosa Nami, ¡por qué soy un caballero! Y si hubiera podido estar con la hermosa Robin ¡ella no tendría esa abertura en el labio!

Zoro frunció el ceño con ira, miro al rubio y luego se alejo de cubierta, claro que estaba molesto y podría ponerse a pelear con creces, pero sentía la incomodidad de la morena mirando con cuidado a ambos hombres, por lo que mejor salió de ahí.

Varias horas después la morena estaba nuevamente curada de todas las heridas y recostada en la cama de su habitación, Nami estaba junto a ella intentando hablar sobre los celos de Sanji hacia ella.

-No lo entiendo, yo creía que estamos bien él y yo, y no es molestia contigo, es molestia con él, desde que notó a Zoro más cerca de ti ha querido quitarlo del camino a toda costa, hace unos días estaba diciéndome que me quería de una forma diferente... Y ahora ni siquiera me ve.- Bufo molesta y luego miro a su amiga, la morena se encogió de hombros.

-Lo sé, es un poco incómodo, incluso metió al pobre de Franky entre nosotros cuando recién llegamos a la costa.- Susurro la morena mirando sus manos.- Es un caballero y jamás me había molestado, pero justo ahora está siendo un poco pesado conmigo, creo que no quiere que comience a sentir nada por nadie.

-¡exacto! Eso me causó conflicto, pensé que él me amaba.- pasó un mechón de cabello tras de su oreja y luego suspiro con pesar.- Pero creo que sólo es su galantería.

-Tal vez deberías hablar con él.- le dijo Robin.- Es probable que sea algo que no sepa como tomar, él estaba acostumbrado a ser el único que nos halagaba.

-¡Lo haré!- Dijo ella poniéndose de pie.- Iré a hablar con Sanji... Y creo que tu deberías hablar con Zoro, por lo que me has contado él esta muy preocupado por ti.

-Por qué sabe lo que me hicieron, sé preocupó por qué Chopper le dijo que eran heridas que no podía curar él.- Miró hacia el suelo, consiente de que esasxnuevas heridas habían desencadenado miles de recuerdos de su infancia cuando debía correr por su seguridad y huir de lugares en donde se aprovecharon de su inocencia.

Nami salió de la habitación y la morena se acostó para poder tener un poco de paz durmiendo, aunque no la pudo obtener.

Pocos minutos después de caer dormida las imágenes crecieron entre sus sueños, sentía las manos recorriendo su cuerpo, alientos asquerosos en su piel mallugada, uñas clavándose y dejando marcas, mordidas, golpes, forcejeos y miles de tocamientos indebidos, recordó la pérdida de su inocencia y todos los hombres que lograron aprovecharse de sus debilidades para satisfacer sus más bajos deseos.

Y despertó de golpe tras caer de la cama, se miró a ella misma en el suelo y suspiro con alivio de que hubiese sido solamente un sueño, detrás de la puerta se escucharon varios pasos, pero una mano golpeó la puerta y la morena miró con miedo, abrazo sus piernas aún bastante conmocionada y se negó a hablar.

Sin embargo se escucho un golpe nuevo y la puerta se abrió, el peliverde se asomo con mucho cuidado, Robin limpió sus lágrimas y escondió su rostro.

-A este paso te acabarás el agua del mundo.- Susurró Zoro entrando a la habitación y cerrando la puerta tras de él.- No creo que sea buena idea mojarte cada que lloras, ¿o si?

Robin levantó la cabeza y le dio una muy leve sonrisa, el peliverde se agacho a su altura y acaricio su cabello.

-Supongo que prefiero un abrazo al agua.- murmuró ella con la voz muy baja, Zoro asintió y extendió sus brazos, permitiendo a la morena esconderse entre ellos con gruesas lágrimas bajando por sus mejillas.- Gracias.

-Jamás dudes de mi, estoy aquí para todos y tú no eres la excepción, aunque Sanji se moleste.- acaricio su larga cabellera con calma, dejándola calmarse.- Llora todo lo que necesites, puedo quedarme contigo mientras te calmas.

-¿Y si no logro calmarme?- Pregunto Robin mientras cerraba los ojos al recordar de nuevo las manos, los hombres y su maldito pasado, encajo las uñas con fuerza en la espalda del peliverde, él la abrazo con fuerza, haciéndole saber que estaba ahí para ella.

-Si no te logras calmar, esa silla dice que puedo dormir en ella para hacerte compañía.- Señaló la pequeña silla del escritorio de Robin.- Prometo no dejarte sola, ninguna mujer debe pasar por esto sola.- se separo un poco y la ayudo a retirar el cabello de su rostro, observó las mejilla sonrojadas, los ojos y labios inflamados y el cabello húmedo pegado en todos lados y le sonrió.

Robin paso ambas manos por su rostro y luego le devolvió un poco temblorosa la sonrisa, el peliverde acariciaba su rostro con calma, detallando cada pequeño aspecto del mismo, hasta que la miró bostezar.

-¿Quieres subir a la cama?- Le pregunto cuando se sentó en el suelo con las piernas cruzadas y Robin quedo acomodada entre sus brazos, como si fuera una bebé, incluso estaba cubierta por una manta.

-¿Puedo quedarme aquí?- le pregunto sintiéndose segura al estar abrazada por él, incluso pasó una mano por alrededor de él para abrazarlo, tenía su rostro recargado en el hombro del chico y él acariciaba su espalda con calma.- Me siento segura aquí.

-En donde sea que te sientas segura puedes quedarte... Te aseguro que nadie te hará daño estando yo aquí.-Le respondió el peliverde mientras la miraba de reojo.

Tenía los ojos cerrados, los pensamientos ruidosos bailaban en su mente, pero con las pequeñas caricias de Zoro en su espalda y el protector abrazo con la otra mano la hacían  sentirse un poco mejor, el peliverde esperaba mantener la calma en ella por el resto de sus días, incluso si eso lo hacía pelear con el cocinero, quien solamente se sentía amenazado por la rápida cercanía de ellos dos y no sabía cómo actuar ante la tensión que presentaban, se sentía temeroso por que para él era muy difícil expresar el amor real que sentía por la navegante y se le había increíble que Zoro pudiera crear grandes sonrisas en Robin con facilidad.

A Sanji no le gustaba Robin, no se ponía celoso por que el peliverde quisiera estar con ella, lo ponía de malas el hecho de que él si pudiera avanzar con Robin de forma rápida y él no podía tras varios años tras la navegante, sentía celos de su incapacidad de demostrar su amor verídico.

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