Huyéndole al dolor

65 2 0
                                    



Definitivamente el universo está jugando conmigo, no sé qué hacer con la propuesta de mi jefe.

Voy caminando a la cafetería y me sirvo un poco de café, cuando de repente veo a Bruno y a Anabell juntos, hablando y riendo. Esta vez los dos me ven. Bruno nota en mi cara la decepción y se acerca a saludar. Intenta darme un beso en la mejilla y yo doy un paso atrás. Le digo "hola y adiós"  y regreso a la oficina de mi jefe.

Su cinismo y aquella escena junto a a Anabell, me ha hecho decidirme a aceptar la propuesta. Necesito un tiempo para mí, no puedo verlo todos los días y menos con ella. No lo quiero cerca, pero los celos me invaden y pierdo mi paz. Sin embargo mi jefe ya no está en su oficina, así que me regreso a mi oficina a esperar unos minutos mientras aprovecho para controlar mis emociones, trato de pensar en otras cosas, cuando de pronto entra Bruno por la puerta de mi oficina. Se acerca a mi escritorio, se inclina, me da un beso en la boca y me dice que no lo vuelva hacer.

Sus labios son tan suaves. ¡Que beso tan rico! Antes de perderme en mis sensaciones, logro reaccionar y le pido que no lo vuelva hacer y que por favor salga de mi oficina. Se sorprende al ver mi reacción y me pregunta que ha pasado, a lo que yo le respondo sin titubear y en tono un poco fuerte

"Sé lo que pasó entre tú y la pasante."

Me levanto de mi silla y con mucha ira le digo
"NO QUIERO QUE ME VUELVAS A TOCAR."

De inmediato la expresión de su cara cambió, agacha la cabeza y solo me dice "discúlpame" al tiempo que sale de mi oficina.

¿De verdad solo eso iba a decir? ¿Discúlpame? Me da tanta ira que siento muchas ganas de llorar, pero antes de ceder a mis emociones me dirijo nuevamente a la oficina de mi jefe quien ya ha vuelto y le digo que cuente conmigo. Logré ajustar un poco las fechas a mi favor, lo que me emociona pues la capital queda más cerca de la ciudad donde estará Stev, y esto termina por favorecer nuestro encuentro.

Mañana mismo salgo de viaje, así que me reúno con Estefan tratando de dejar organizado algunos pormenores y las instrucciones para que todo siga en marcha mientras no estoy. Por fortuna, todo parece estar bien y salgo un poco más temprano de lo usual.

Le dejo un mensaje a Stev y le cuento la novedad. Todo parece estar bien así que en la mañana siguiente estoy más que preparada,  me cocino algo ligero para desayunar, unas tostadas de pan integral con un omelette de huevo, pido un taxi y me voy al aeropuerto. 

Quiero sacar a Bruno de mi cuerpo y espero que Stev pueda hacer eso.

El elixir de Shaddia Cornett.Where stories live. Discover now