Marcando territorio

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De ida a la fiesta, ambos vamos en silencio, yo lo quedo mirando y el parece no percatarse que lo miro, está muy pensativo y me inquieta saber que le pasa, quizá no lo hice tan bien como pensaba, espero que al menos cambie su ánimo al verse con sus amigos.

Al llegar lo recibe el cumplimentado, un rubio muy guapo, alto, bastante alegre, ya me conoce así que su efusividad también la tiene cuando me saluda. Me agrada, pero no dejo de suponer que me ve sabiendo todo lo que hacemos Felipe y yo.

Nos acercamos donde están sus otros amigos, hay mucha gente, pensé que la celebración era algo más sencilla pero su amigo al parecer es algo ostentoso. El busca con la mirada a su amigo Bill, el más cercano a él, yo lo ayudo y mientras tanto encuentro la razón de porque Felipe está así: ahí está ella, su enamorada eterna. Lo miro y él también ya la vio, la repara de pies a cabeza y yo hago lo mismo, es muy bella, tiene un cuerpo espectacular y un rostro como de revista, en ese momento lamento todas las frituras que me he comido y no haber ido al gimnasio. No solo Felipe no le quita los ojos de encima y yo por dentro le grito a ella "eso se acaba con el tiempo niñita", me muero por reclamarle a Felipe pero no es una realidad que me sorprenda, yo se que él nunca ha dejado de quererla.

Creo que yo también debería buscarme alguien que me trastoque el equilibrio de mi ser, Felipe es muy guapo y se ve más atractivo esta noche; ella podría hacer fácilmente que se acabe lo nuestro. De repente y sin esperarlo, él me toma de la mano y caminamos hacía ella, él la saluda y ella solo me mira y me dice "¿con que tu eres la novia de Felipe?" yo sonrío y me dispongo a aclarar que soy su amiga, pero Felipe me interrumpe y dice "si, ella es, después de tanto rogarle por fin me aceptó" yo supongo que lo hace para que su enamorada eterna sienta celos y efectivamente creo que lo logra, pues aunque habla con él no deja de mirarme.

Cuando nos disponemos a seguir saludando a otras personas, ella me despide con un tono no agradable "hasta luego Shaddia" y yo sutilmente le digo "hasta luego, ¿Cómo es que es tu nombre?" Y ella entre dientes me responde que Margarita.

Mirando a Felipe digo "Amor nunca me habías hablado de ella", la miro y le respondo "un gusto Margi", lo tomo de la mano y con sensación de triunfo me voy con Felipe.  

El elixir de Shaddia Cornett.Where stories live. Discover now