Negación

0 0 0
                                    


Hacia mucho tiempo no dormía como anoche lo hice. No se si Jerónimo era la persona adecuada para hablar de ese tema que por años me ha afligido, pero lo que si se, es que era justo y necesario hablarlo. Me siento diferente.

Al abrir mis ojos, reviso mi celular y veo cientos de mensajes de texto de mi prima Ligia, supongo que estaba ebria con tanta locura que escribía, pero no, al parecer no lo estaba, es su estado natural. Ella supone que pasé la noche con Jerónimo y no hablando precisamente, y quiere los pormenores, así que me invita a almorzar y yo me preparo para ello.

Nos encontramos en una restaurante que ella dice es el mejor que ha probado, la abrazo y le reclamo jocosamente por haberme dejado botada en la noche, pues se suponía nos encontraríamos para hablar, las dos, no para rumbear con su grupo de amigos. Ella asegura que esa era su intención inicial, pero que Jerónimo se vio muy interesado y ella aprovecho para crear la oportunidad. No le niego que me parece muy guapo, y que parece ser buena persona, pero que al menos por ahora yo no me sentía preparada para una relación. Me regaña porque supone que el motivo es aún Arthur, pero la actualizo un poco contándole ligeramente lo que ha pasado en estos últimos meses y con la boca abierta me dice:

- Si no eres tu misma la que me está contando todo esto, no te creo que en serio lo hayas vivido ¡Primita! has empezado a vivir.

Pero yo ya no lo sentía así. Aún así, me siento cómoda hablando el tema con ella, y la dejo seguir preguntándome cosas.

- Bueno pero entonces después de tanto rollo, ¿por culpa de quien no te sientes preparada para darte otra oportunidad? - me pregunta con picardía.

- No se, creo que todo ha sido tan  rápido, me adentré a este mundo sin planearlo, de una forma inesperada, con muchas emociones revueltas, que no se como responderte

- Pues al menos inténtalo

- Es que a ver, ¿Cómo te explico? Bruno, es mi amigo de muchos años, yo lo a.. lo quiero, lo quiero mucho, jamás pensé que pasaría algo de ninguna índole con él más allá de una amistad, compartíamos de todo ¿sabes? me sentía increíble a su lado, yo no se como él llegó e hizo eso, no se tampoco como yo se lo permití, lo que si se es que después de ese instante, ninguno se comportó como se comportaba antes. Y no se explicarte más que eso, porque yo en lugar de tratar de entender, interiorizar lo que sucedía, hui, tenía miedo a sufrir, a sentirme usada, así que busque los brazos de  Stev ¡Dios mío Stev! ¡si tu lo conocieras! ese hombre es divino por dentro y por fuera, estoy segurísima que dirías que ese era el partido ideal, pero no pude Ligia, mi mente seguía persiguiendo a Bruno y no aproveché esa oportunidad, de conocerlo, de enamorarme de un hombre que quizá hoy me estuviese haciendo feliz, así que bueno, simplemente dejé que la distancia actuara y que se desapareciera de mi vida como si no hubiese existido. Y tal vez lo mismo me hubiese pasado con Felipe, ¿Cómo lo voy a llamar Bruno la primera noche!? soy una tonta, pero bueno, continuamos eso como un juego y no te voy a negar que si llegué a sentir cosas muy lindas por él, quería continuar a su lado, contemple darme esa oportunidad ...

- ¿pero?

- Pero no Ligia, no podía pausar mis planes por alguien con quien no tenía nada formal

- ¿Cuáles planes Shaddia? ¿Por qué quieres mentirte a ti misma?

- ¿De que hablas? no estoy mintiendo, estoy hablando con toda la sinceridad 

- Shaddia, se lo dijiste a Felipe, con tu negativa se lo dijiste a Stev, casi me lo dices ahorita y te reprimiste... ¡tu amas a Bruno!

- ¡No! no, no, no te confundas, o sea puede que si pero como amigos, pero de forma romántica, yo no.. no no, yo no lo.. - rio nerviosa - ¿Cómo se te ocurre?

- No eres ni capaz de negarlo, el día que seas capaz de reconocerlo, aceptarlo, podrás tomar una decisión al respecto. Mientras tanto seguirás dejando pasar oportunidades

- ¿Es que como se te ocurre que lo voy a amar después  de como jugó conmigo?

- Ay mi querida prima Shaddia, eres tan dulce. Vamos, te llevaré de vuelta a la oficina.

El elixir de Shaddia Cornett.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora