Anastasia.
Aqui voy...
-yo...- se acerca enrollando los dedos en mis brazos y me detiene de sopetón.
-esta bien. Lo se- dice con una tranquilidad que me aterroriza.
-¿lo sabes?- pregunto confundida.
¿entonces todo este tiempo me he estado muriendo por la culpa mientras él ya lo sabia?
Acaricia mi mejilla mientras asiente.- no me importa.
-¿no te importa? ¿como no va importar?- una furia inexplicable recorré mis venas. ¿asi que después de todo lo que pasamos no le importo lo suficiente como para sentirse dolido de que le haya mentido, qué el conocernos estaba planeado con anticipación?
-calmaté Ana, no me importa que hayas estado en un psiquiatrico. Eso no cambia nada lo que tenemos.
¿eh? Evidencio un suspiro de alivio. No se si es porque en el fondo me arrepentí o que por lo menos estaba equivocada acerca de no importarle. Me voy por la segunda opción.
-Chris...- coloca la mano sobre mi boca.
¿pero que cojones le ocurre?
Observa el reloj otra vez y tira de mi mano hasta guiarme a su habitación. La impresión que me llevo es astronomica. Es la vista más hermosa de mi vida. Se puede ver la aguja espacial; la ciudad entera delante de tus ojos. Giro sobre mis talones para descubrirle sentado en la cama con las piernas cruzadas viendome fijamente.
-por las noches debe ser increible.
-lo es- suspira y se levanta de la cama para ver lo que esconde detrás. Una caja ancha y delgada de color dorado adornada con un liston de seda del mismo color.
-¿más sorpresas?
Sonrie con sorna. Aparentemente esconde una segunda intención deduciendo que las sorpresas no acabaran este dia, pero tendran que hacerlo en algun momento porque no creo aceptar estos regalos después de lo que hice.
-te dejaré sola. Tiene veinte minutos Srita. Steele
-pero...- me corta.
-o tendré que llevarmela en bragas- advierte divertido y siento que la temperatura ha aumentado varios grados en solo segundos.
Carraspeo
-llevo tanga- le corrijo y alza una ceja.
-más excitante aún.-se lame el labio inferior con parsimonia.
Sacudo la cabeza.
-Christian...
Vuelve a interrumpirme y de mis labios sale un resoplido cargado de frustración.
-tienes...-mira la hora- dieciocho minutos con treinta y dos segundos. Deprisa Steele- ladea la cabeza, chasquea los dientes y desaparece de mi vista con una sonrisa petulante abarcando de oreja a oreja.
Es un maldito arrogante. Y estoy indecisa en si ahorcarlo o besarlo con cabreo hasta dejarle sin aire. Nisiquiera me da el tiempo suficiente de inhalar profundo y soltar la bomba. No tengo más opción que ir a la dichosa cena y vigilar de cerca cualquier sospecha o intención que tengan sus padres de hablar más de la cuenta. Tal vez ellos no sepan que ese alguien sea yo o simplemente quieren saber que todo va como se planeo. No creo que Grace invite a ese "alguien" de Christian para entablar una buena relación cuando con seguridad me hizo saber por telefono, la noche de la gala de apertura de las nuevas oficinas, que Simone es la mujer perfecta para su hijo.
Esta noche tendré que liarmelas con el estres que este encuentro me provoque. Dicho eso, me apresuro a abrir el obsequio y me encuentro con un vestido rojo con escote ovalado. Lo saco del empaque y descubro una cinta dorada que se abrocha por la nuca y un escote pronunciado en V que deja mi espalda entera a la vista. Me las apaño para ponermelo lo más rapido posible. Al conjunto le acompaña unos tacones color dorado y cuando los pongo en el suelo para probarmelos miro la nota adhesiva que habia puesto sobre el vestido que me obsequio en la gala. En el estaba todo lo que le habia escrito, pero las palabras "carta de renuncia" estaban tachadas y debajo de estas decia:
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Mr. Grey (CEO #1) ©
Fanfiction"Mi CEO Malvado PARTE 1" "De un modo u otro, siempre he sufrido. No sé por qué. Pero sí sé que ahora no estoy tan asustada para sufrir. Siento más de lo que he sentido nunca, y he encontrado a alguien con quien sentir. Para jugar. Para amar de un mo...
