Capitulo #34| Atrapados

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Desde tiempos inmemoriables han existido las relaciones entre jefe y secretaria, ¿no? Solo que yo exactamente no soy la secretaria de mi jefe, no se trata del destino o mera coincidencia. Sus padres me contrataron para sacar a su hijo de un abismo. Nunca supe exactamente cuan profundo es ese abismo y ahora lo se. No le conocen y pensar en los detalles que me dieron de Christian sobre lo que le gusta esta lejos de ser. Él, logicamente ha fingido ser alguien que no es delante de su familia adoptiva y me hace pensar que tampoco Ella lo sabe. No quiere que descubran sus retorcidas y extravagantes fantasias sexuales, trata de ser paciente con Jack, trata de llevarse bien con sus padres; pero ellos estan lejos de comprender al hombre que me esta llevando en brazos hacia el sillon y me deposita a un lado. Incorpora la espalda en el otro extremo y se palmea asi mismo indicando que me acerque. Separa las piernas y me abro paso entre ellas. Mi espalda baja siente su miembro y tiemblo momentaneamente. Él me acerca más asi mismo hasta que mi espalda se recuesta en su pecho. Ladeo la cabeza y Christian deposita un beso ligero y rapido sobre mi cuello.

Rio

-¿Qué quieres hacer mañana?

-hoy es mañana- digo con ironia. Pasa los brazos por mis costillas y junta sus manos formando un puño. Estoy atrapada. Una sonrisa tonta se cola en mi rostro.- ¿no estaba planeado volver a Seattle el lunes?

Muerde el lobulo de mi oreja y gruño.

-ah, corderito. La repentina tormenta que te obligó a estar en mis brazos es la misma que a provocado que cancelarán todos los vuelos.-se burla- estaremos un dia más en Manchester.

-¿hablaste con Ross?

-así es. Todo seguira con lo planeado en mi ausencia. Podemos empezar de cero...-me besa la cien y posa su mejilla en mi pomulo- soy todo tuyo.

Abro los ojos como platos y en ese momento mi corazón se ablanda que no puedo evitar soltar lo que he estado tratando de ocultar todo este tiempo- te quiero, Christian.

No hubo reacción de su parte, así que decidí inclinarme y ponerme de pie sin verle a los ojos. Aquellos ojos que me mortifican, que me dirán que él no siente lo mismo. Cuando intento levantarme sus fuertes brazos me tiran y en el proceso  gira mi cuerpo y termino frente a él.

-quiero intentarlo- su voz es grave y profunda. Trago duro y descubro que el brillo en sus ojos se debe a mi. Siempre se ha debido a mi y la culpa se remueve en mi interior.

Mr. Grey (CEO #1) ©Where stories live. Discover now