Leyendas de héroes

Elise

Cuando la mire a los ojos empezó a lloviznar. Había cosas mucho más importantes en ese momento, pero no pude evitar corresponderle el beso. Coloco sus manos sobre mis mejillas y aparto sus labios.

—Si pudieras ver el destino como yo, no tendrías preguntas — dijo para luego volver a besarme, esta vez con mucha más pasión

De nuevo le correspondí pero la voz de Aura retumbo en mi cabeza. Agarre a la Vhighoul de los hombros y nos separe.

—Eres... eres muy bonita, pero... — tartamudeé de los nervios, nunca había estado en una situación como esta.

—Tengo que salvar a mi hermana... — le dije apartándola aún más de mi cuerpo y salí a correr en la dirección hacia el castillo, donde se escuchaban fuertes explosiones.

— No tienes que ser tan frio Laxus — replicó la Vhighoul alcanzándome.

Se encontraba levitando de espaldas sobre sombras, con su cara frente a mí. Me enrojecí un poco al volver a notar su belleza y por lo que acababa de pasar. ¿Qué quería esta Vhighoul conmigo? ¿Ni siquiera sé cómo se llama?

— Laxus quiere saber cómo te llamas —le dijo Dinamo aun recostado sobre los brazos de Shield.

—Que ternurita— exclamo la Vhighoul, agachándose a acariciar a Dinamo.

El pequeño Rekan se ruborizó y luego se sacudió para secarse del agua, movimiento que no sirvió porque estábamos en medio de la lluvia.

—Por cierto, me llamo Elise y entre las muchas cosas que nos unen esta que entiendo a tus Rekan— dijo con tono pícaro mientras me rodeaba pasando su mano derecha por mi cuello.

— ¿Lo escuchaste? — le pregunté.

— ¿Cómo crees que supe que también te gustaba? — contra pregunto.

Mire a Dinamo sorprendido.

—Cuando estábamos en la cancha de Frishond me la encontré cuando perseguía el ratón que soltó Yaboth, y le conté como querías darle besitos, y que también se los querías dar a Sora, y que...

— Silencio Dinamo— lo interrumpí avergonzado.

—Pobrecito no le ves que está todo mal herido— sonrió Elise dándome un beso en la mejilla, desapareciendo entre sombras de mi izquierda y volviendo a aparecer a mi derecha.

—Además, puedo sentir el destino y los nuestros están muy entrelazados — se sonrojo la Vhighoul por primera vez. Casi me caigo al ver lo tierna que se veía avergonzada.

En ese momento cayó un barkhound sobre nosotros, Shield reacciono a tiempo y de dos patadas desvió al enorme perro fantasmal un metro. Era una criatura de dos metros, su boca era supremamente ancha, parecía un bulldog combinado con una planta carnívora (Venus flytrap), su piel era totalmente gris pálido, poseía cuatro ojos, grandes y atentos. Y como todas las demás criaturas con las que nos habíamos encontrado, desprendía humo de su cuerpo.

El perro se lanzó contra mí, gruñendo y enfurecido. Elise lo esquivo, con sus dedos acaricio el costado del perro y cuando soltó la mano, por donde pasaron sus dedos; al barkhound se le abrieron cortadas profundas que salpicaron sangre. Por mi parte me agache y lo golpeé con un puño energizado. La Vhighoul apareció frente a mí, me beso, materializo una daga vampírica y apuñalo al perro en la cabeza.

—Estamos coordinados— me sonrió.

El barkhound se levantó y cuando intento morder a Elise, Shield lo agarro de las mandíbulas y se las disloco.

—Perfectamente coordinados— dijo volviéndome a besar. Me deje llevar y cerré los ojos. La garré de la cintura por instinto y le seguí correspondiendo. La lluvia se intensifico al igual que nuestros besos y caricias.

— Laxus...

— Laxus...

— Ayuda...

Al escuchar los gritos de ayuda de Aura me separe de Elise. Lo lamente de inmediato, pero a pesar de la adrenalina y las hormonas, mi hermana se encontraba en peligro. Mire a la hermosa Vhighoul que se encontraba empapada y con una mirada expectante.

— Tengo que salvar a mi hermana, apenas termine todo esto podemos hablar para resolver lo que haya entre nosotros— dije con la mayor seriedad posible,

Elise se mordió los labios inferiores sonriendo.

— Ese es mi héroe — dijo acariciando mi pecho.

En ese momento una enorme explosión estallo la mitad de los dormitorios. Cuando el polvo se disipo pude ver a Zoui, nuestro profesor Pharon, inconsciente y con heridas supremamente graves.

Miré en la dirección opuesta de donde había caído y pude ver como cientos de estudiantes y profesores se encontraban enfrentando a una niña de 4 años que montaba sobre un golem gigante de piedra. En ese momento Elise materializo una armadura vampírica sobre su cuerpo y me volvió a besar la mejilla.

— Wow, wow, wow ¿no se te hace sospechoso que esta Vhighoul te haya intentado comer y ahora este toda enmelocotada contigo? — salto Yaboth en medio de los dos.

— Se que eres masoquista y no soy nadie para juzgar tus fetiches, pero no tienes que suicidarte por unos ojos bonitos

Nos empujó en direcciones opuestas y salto hacia atrás; en ese momento una enorme roca en llamas cayó donde nos encontrábamos.

— Si quieres una chica puedes ir por Sora...— se agacho y golpeó un barkhound haciéndolo chillar— o Aenor... — su Rekan, Slayer, apareció y con un báculo se sombras oscuras elimino a unos seis Ghast que se lanzaron contra mí — o incluso Eileen — esquivo un golpe de Elise y con ayuda de su Rekan nos separó apenas ella pudo acercarse.

— Y bueno, creo que no hay que decir nada, pero tu hermana esta justo ahí— señalo con su báculo electrónico y mágico remendado, era igual que el de su Rekan pues Slayer imitaba incluso las armas de Yaboth.

En ese momento pude mire a la niña sobre el golem, sentada en su hombro derecho, recitando hechizos sin mostrar la más mínima emoción al enfrentarse a cientos de elegidos al mismo tiempo. Reconocí su cabellera dorada, sus ojos azules y aunque había crecido un poco seguía teniendo la apariencia de una niña consentida y bondadosa. Empecé a derramar lágrimas, tenía la esperanza de que estuviera viva, pero en el fondo la daba por muerta, y justo frente a mí se encontraba mi hermanita pequeña.

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Hola no estoy seguro de si voy a poder publicar mañana así que subo el capítulo esta noche y si mañana pudo subo otro para finalizar esta maratón. =)