Leyendas de héroes

Arrodíllate y muestra gratitud

—Oh sí, me escuchaste bien— dijo Orchid mientras seguía luchando con Nano. Dio un salto hacia atrás y quedo en el hueco que había hecho al chocar contra la habitación.

— ¿Cuantos años es que tiene ahora? — colocó su mano derecha sobre su cabeza.

— Cuatro ¿verdad?

Se agarró el pelo y dio un grito frustrado.

—Sí que puedo Odiar a esa niña

Me miro directamente a los ojos mientras que se esquivaba un ataque de Nano

—Pero tiene la mente de una anciana de 600 años

—Sí que es bizarro ¿verdad?

En ese momento sentí como mi sangre empezaba a hervir, todo tipo de emociones empezaban a confluir dentro de mí. Y cuando empecé a recoger energía para atacarlo, Daithlian me agarro de los brazos obstruyendo mi movimiento

—Reacciona, solo estamos estorbando al profesor — grito alzándome y sacándome de la habitación.

Apenas cruzamos la puerta me soltó y entre en razón, no tenía ninguna oportunidad contra Orchid. Atacarlo solo pondría más trabajo sobre Nano. Me golpeé los cachetes dos veces y salí corriendo con Daithlian por el pasillo, acompañado de los gritos de Dinamo maldiciendo al medio Elfo.

Mientras que corríamos pude ver que todos los Ents se encontraban evacuando a los heridos, por lo que decidí empezar a recoger energía con Shield y hacia que Dinamo se las disparara para aumentar sus habilidades. Esto lo habíamos aprendido con Nano durante los últimos días, ya que Dinamo era el más apto para descargar la energía y Shield para absorberla.

Apenas nos encontramos frente a las escaleras un Ghast atravesó la pared directamente para atacarme. Su apariencia era entre blanca y transparente, la mitad de su cuerpo superior era humanoide y la mitad de abajo era de plasma, en cierta forma parecía un vampiro y un esqueleto al mismo tiempo, sus ojos eran totalmente negros, sin pupila, no tenía orejas ni cabello. Y cuando se movía desprendía humo de color negro. Daithlian con sus reflejos raciales materializo una espada elfica en un instante y corto al fantasmagórico ente en dos.

Me sorprendió la velocidad con la que reacciono, yo apenas estaba reuniendo energía para atacarlo pues no contaba con ningún arma ni herramientas para materializar. Luego, Daithlian volteo a mirarme, nuestros ojos se encontraron y pude ver sorpresa en sus ojos. Seguí su visión y me encontré con que la espada elfica que sostenía se encontraba envuelta en electricidad azul. Daithlian cambio la espada de mano y el efecto eléctrico desapareció, volvió a cogerla con la mano izquierda y la electricidad volvió a la espada.

— Laxus me has otorgado poder sin darte cuenta.

Nos miramos en silencio un rato, yo no tenía idea de que responderle. Me encontraba igual de sorprendido que él.

—Pues arrodíllate y muestra gratitud a nuestra generosidad — le dijo Dinamo con desprecio.

—Dinamo! — lo reprendí.

Aunque Daithlian no lo pudiera escuchar, me avergonzaban los comentarios fuera de tono de Dinamo. Intente decir algo pero solo balbucee, la verdad es que no tenía idea de lo que había sucedido, pues no le había dado energía, ¿lo había herido y de paso le había dado poder?

¿Qué pasaría de hacer lo mismo con algún enemigo?

— No puede pasar algo así— Shield interrumpió mis pensamientos.

En ese momento caí en cuenta de que así nos comunicábamos, por lo que me sentí mal por Dinamo y lo mucho que juzgaba su personalidad.

—Tranquilo, soy demasiado genial para sentirme mal. Y además, sé que soy tu favorito— grito saltando de mis manos y lanzando un potente rayo contra una de las paredes. La cual al estallar dejo ver a un Ghast carbonizado.

— Continuando con tu duda— interrumpió Shield.

—Tú no ves de forma hostil al elfo, por lo cual la energía que le mandas es para incrementar sus habilidades.

— Sin embargo, cuando te golpeo en la columna la energía que lanzaste fue de autodefensa. Por lo que al absorber tanta energía en tan poco tiempo y solo en los brazos, termino con estos atrofiados.

Volteé a mirar la mano izquierda de Daithlian, seguía negra y un poco deforme.

— Lo cure absorbiendo la energía que tenía pero supongo que el punto de contacto entre el golpe y tu espalda fue su mano izquierda. Por lo que debió de haberla asimilado.

Me tranquilizo la respuesta de Shield pero no hubo tiempo para decir nada ya que muchos más Ghast empezaron a aparecer por las paredes. Y para mi infortunio, todos se lanzaban a atacarme solo a mí.

En ese momento me acorde de las palabra de la profesora Relat, mi cuerpo producía una hormona (Excercra) que hacia enfurecer a este tipo de criaturas (Doppel-lich). Esta noche no podría de complicarse más.

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Hola espero les haya gustado, este fin de semana habrá mini maratón de capítulos XD