Me agache y recogí a Dinamo, lo coloque sobre mi hombro, cerré mi mano derecha y golpeé con todas mis fuerzas al primer Ghast que se me acerco. Shield empezó a detener todos los ataques de las demás criaturas, mientras que Daithlian atacaba ahora con dos dagas elfica: una eléctrico y la otra normal.
—Tenemos que salir del hospital— dije preocupado y agitado.
De continuar ahí pondría en peligro a todos los que se encontraran ahí; además, tarde o temprano me tendría me empezarían a perseguir las Banshee también. Daithlian pareció entender y empezó a abrirse paso entre las escaleras.
Empezamos a bajar a toda velocidad, luchando contra los Ghast que aparecían desde cualquier posición, Shield no solo me protegía a mí, sino que también cubría los puntos ciegos de Daithlian. Nos encontrábamos dando la vuelta en una de las esquinas cuando de pronto escuche...
—Laxus!!!!
Era Aura, me tropecé y caí contra la pared. De no ser por la reacción de Shield me habría lastimado seriamente por la velocidad que llevábamos. Me empecé a marear, la cara de Aura apareció en mi mente.
—Laxus!!!!
Escupí sangre y empecé a generar electricidad a mi alrededor, la estática empezó a cubrir mi ropa y pelo.
— Ayu...!!!
Se corto la voz de mi hermana.
No pude aguantar más. Liberé toda la energía que tenía e hice explotar todo a mi alrededor junto con un grito de rabia que nunca en mi vida había hecho. Durante toda mi vida intente ser juicioso, no hablar, contener mis sentimientos y contener todo lo que me pasaba para no causar problemas.
Pero
Pero
Aura se escuchaba sufriendo...
No podía permitirlo, no iba a permitirlo.
Mi visión se tornó azul y empecé a levitar a pocos centímetros del cráter que había creado. Shield había alcanzado a proteger a Daithlian empujándolo al pasillo del piso en el que nos encontrábamos y extendiendo su espalda en forma de escudo. Moví la mano derecha y desintegré a todos los Ghast que se encontraban en mi línea de vista. A través de uno de los huecos que creo la explosión pude ver a una Banshee. Parecía una mujer y a la vez no, era de por lo menos 5 metros. Era entre fantasmagórica y real al mismo tiempo; su composición era de plasma y sus colores eran entre negro, verde y morado al mismo tiempo. Su cara era como la de una elfo, ojos alargados y orejas puntiagudas, con tez delicada. De su cabeza se desprendían dos grandes cuernos de color negro, su cabello era de humo color gris. Poseía seis brazos; todos terminando en espantosas garras de cuatro dedos, delgados, alargados, sin uñas y terminando en puntas metálicas. Su cuerpo era esbelto y estaba cubierto por sedas moradas que se combinaban con su cuerpo. Sus ojos negros se tornaron rojos y lanzo un grito con tal fuerza que se pudieron ver las hondas que genero el estrepitoso sonido de su voz.
Nos encontrábamos 15 pisos por encima de la Banshee y sin embargo el golpe nos alcanzó en un instante. Lo contrarreste con el dorso de mi mano, ni me inmute, no sentí nada, ya no sentía nada. Mire mis manos y note que mi piel se estaba desintegrando y mi sangre empezaba a evaporarse.
—Shield, Dinamo... ayuda — alcance a decir antes de prenderme en llamas eléctricas de color azul.
Mi conciencia empezaba a desaparecer cuando de pronto sentí las manos de Shield en mi espalda y vía Dinamo posicionarse frente a mí, y crecer 2 metros. Se acababa de convertir en un fénix eléctrico de un enorme tamaño. Se volteo y apuntando hacia la Banshee lanzo un rayo de medio centímetro de diámetro, apenas visible a simple vista, pero apenas toco a la Banshee, esta se vio envuelta en electricidad azul. Empezó a gritar y antes de que pasara un segundo se desintegro.
CZYTASZ
Leyendas de héroes
FantasyEn Tellurus, un mundo donde la magia y la tecnología conviven en armonía; un accidente deja a un joven humano con la misma marca con la que nacen los héroes. Seres cuyas hazañas han salvado al mundo en más de una ocasión y de los cuales, se registr...