🌻37🌻

14.8K 2.2K 2.8K
                                    

🍀

Jimin se miró por última vez en el espejo de cuerpo completo, su maleta descansando a su lado, esperando para poder partir nuevamente al departamento.

Intentaba ver algo en su físico que lo volviera especial, algo que él pudiera decir que los completamente humanos no poseen, pero no encontraba nada.

Yoongi salió del baño después de haberse cepillado los dientes, al igual que Jimin, estaba listo para partir y en ese momento sus alas se encontraban extendidas, al igual que toda la mañana. Así podría aguantar todo el viaje en auto sin problemas.

―Hyung ¿Te aseguraste de llevar todas tus cosas? ―dijo Jimin mientras se colocaba el collar que Yoongi le había dado, apretando el nudo para que quedara de buen tamaño. ―Realmente dudo que volvamos pronto, por lo que sería bueno que dieras un pequeño vistazo.

Yoongi asintió y dejó un pequeño beso en la mejilla de Jimin antes de dar una vuelta por la habitación, siendo realmente que no había llevado tantas cosas.

El día anterior había sido muy tranquilizador, tanto como para Yoongi como para YoungMi. Ambos habían logrado solventar sus dudas y las cosas habían salido bien. Debía admitir que tenía una gran ventaja al ser el novio del hijo de una Ninfa especial, ya que los materiales no escasearían, al menos no aquellos que son de suma importancia, como lo eran aquellas piedras en ese momento.

Jimin le había dicho que YoungMi era su suegra, pero a Yoongi no le gustaba el apodo, sonaba feo.

Por lo que simplemente la llamaba por su nombre.

―No olvido nada, todo está en mi maleta―dijo después de varios segundos, haciendo que Jimin sonriera pequeño y asintiera, dando media vuelta sobre su lugar para ver a su pareja.

A Jimin le gustaba mucho la relación que estaba formando con Yoongi, ahora que las cosas eran oficiales, se sentía mucho más seguro con todo lo que estaban llevando. A veces sentía que todo era un extenso y raro sueño o que estaba en un delirio psicótico y nada estaba pasando en realidad, pero después se golpeaba mentalmente por ser tan estúpido.

No debía pensar demasiado, porque la realidad era que su vida había dejado de ser normal muchos meses atrás y todo a causa propia, pero todo había cambiado en un sentido positivo y volvería a pasar por ese golpe de mierda para conocer a Yoongi.

Literalmente un golpe de mierda.

― ¿Irás a la universidad cuando lleguemos o te quedarás en el departamento? ―el hada se acercó al menor y colocó ambas manos sobre la cintura del más bajo, dando pequeñas caricias con los pulgares.

― ¿Te quedarás o regresarás al bosque? ―lanzó su pregunta el menor, ya que realmente no pensaba mantenerse en su departamento por horas sin hacer nada si Yoongi no se quedaba, pero tampoco tenía muchas ganas de ir a la universidad. Era lunes, por lo que tenía las clases más estresantes.

Yoongi torció los labios, negando con la cabeza.

―Tengo que ir al bosque, debo llevar los materiales y saber cómo está todo por allá, no creo que sea buena idea esperar―Jimin asintió comprensivo, pasando ambos brazos sobre los hombros del mayor, manteniéndose más pegados.

― ¿Entonces este es nuestro último momento juntos en muchos días? ―Jimin no quería que el hada se sintiera mal por sus palabras, pero quería corroborar aquello.

Ahora que conocía sobre su pasado y el de su madre, muchas dudas permanecían en su cabeza y realmente no sabía si tendrían alguna respuesta, por lo que prefería el mantenerlas solo para él. Por lo que había escuchado, su caso era el primero en existir en esa especie, eso significaba que nada estaría realmente claro.

Fairytale 🍃 YMDonde viven las historias. Descúbrelo ahora