Fairytale 🍃 YM

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Soltó un jadeo cansado cuando por fin llegaron al aeropuerto o al menos eso era lo que podía escuchar, ya que el ruido comenzaba a ser bastante más fuerte que antes, el bullicio de la gente siendo su guía.

―Jungkook, por la mierda, quédate quieto o haré que Taehyungie te cambie de bolsillo―gruñó Yoongi mientras se acomodaba en su lugar, ambos seres manteniéndose en el bolsillo de Taehyung.

―Taehyungie es mi novio, por lo que quien tendría que cambiarse de bolsillo eres tú, hyung―dijo el elfo mientras fruncía el ceño con indignación, manteniéndose aferrado a la tela de la camiseta del mayor―Me moví porque quería rascarme mi brazo, no seas exagerado.

En ese momento se encontraban en el aeropuerto, por lo que los únicos que se mantenían caminando con normalidad eran Jimin y Taehyung. Los otros dos se encontraban dentro del bolsillo del pelinegro, transportándose en un tamaño pequeño, cortesía de Yoongi.

Claramente los seres mágicos no podían subirse a un avión como lo harían Taehyung y Jimin, ya que no tienen los papeles necesarios para nada, por lo que tendrían que viajar en pequeño, para que no hubiera problemas que no pudieran remendar.

―Entiendo que quieras rascarte, pero casi me das una patada en la cara y mi bonito rostro se vería estropeado por un tono morado gracias a tus piesotes―gruñó con molestia, acomodándose sobre el que era alguna parte del pecho de Taehyung, sintiendo el movimiento de la caminata―Me duelen mis alas.

Jungkook lo vio con las cejas alzadas, pensando que su mayor había sido mimado demasiado, ya que antes no se quejaba tanto, de hecho a penas y abría la boca antes de conocer a los humanos.

―Pues estíralas, nadie podrá verte y las alas son más pequeñas―el hada hizo una mueca, cruzándose de brazos―Creo que voy a dormirme, así no escucharé más tus quejas, hyung.

El hada bufó y vio a su menor con reproche, quien realmente cerró los ojos para tomar una siesta.

―Elfo estúpido―dijo en un susurro―Entraré a tu tonto sueño para tomarte de los tobillos y arrastrarte por el suelo.

Jungkook chasqueó la lengua mientras se encogía de hombros, demostrándole que le daba igual.

Yoongi estaba cansado, Jimin le había dicho que cuando pudieran acercarse a los baños irían para que se estiraran un poco, más que todo Yoongi, quien no podía estirar sus alas con temor de asustar o dañar a Taehyung.

Porque si el medio humano se asustaba y colocaba una mano sobre el bolsillo por instinto, solamente llegarían dos tortitas de hada y elfo al destino de vacaciones. No era muy buena idea.

Intentó levantarse sobre la tela de la camiseta, tambaleando un poco ante la inestabilidad de esta y se aferró al borde del bolsillo, para poder colocarse de puntas y ver lo que estaba pasado afuera, esperando que nadie más que Taehyung y Jimin fueran capaces de verlo.

El pelinegro sintió el movimiento en su bolsillo y miró hacia abajo, sonriendo cuando vio la cabecita de Yoongi asomarse por el bolsillo, observando todo con ojos redondos.

―No te preocupes, hyung. En este momento vamos hacia los baños―dijo, haciendo que Jimin lo viera curioso ante la repentina conversación, notando que su novio estaba asomando la cabeza por el bolsillo.

―Oh, hola Yoonie ¿Van cómodos por ahí? ―preguntó el castaño con una sonrisa de mejillas redondas, asegurándose de que nadie lo viera hablar con el bolsillo de su mejor amigo, porque eso era un poco raro.

―Me duelen mis alas, necesito estirarlas―dijo con angustia, solo siendo escuchado por Taehyung, quien logró visualizar los mencionados a la poca distancia.