Raffael
Miro a la mujer frente a mi quien está leyendo el menú que tiene en sus manos mientras analiza cada platillo.
He decidido lo que pediré así que sólo me limito a mirarla.
La charla con Noan me había ayudado a aclarar un poco mis sentimientos hacia Dalila, pero, ¿estaba enamorado de ella? Nunca me había enamorado de alguien, no sabía lo que era amar y no creo que pueda comparar el amor a mi familia con esto.
La castaña me hacia ser alguien diferente, alguien mejor dentro de lo que las palabras pueden explicar y eso me aterraba un poco.
-¿ya sabes que pedirás?- pregunto mientras veo como deja la carta sobre la mesa.
-lo sé- responde con una sonrisa- ¿tú?
Pregunta y asiento.
-así que dime- comienzo a hablar de nuevo mientras sus ojos cafés me miran- ¿qué hiciste estos días?
-absolutamente nada interesante- responde- mi semana de exámenes se acerca así que lo único que puedo hacer por el momento es concentrarme en aprender leyes y artículos.
-y ¿por qué estás aquí conmigo sí deberías de estar estudiando?- pregunto y sonríe.
-porque puedo tomarme un descanso por Raffael Morelli- responde y eso me hace sonreír a mi.
El mesero llega y ambos pedimos para después comenzar a comer mientras reímos y hablamos de algunas cosas.
♤
-¿te has enamorado alguna vez?- pregunta Dalila mientras caminamos por una explanada.
-no- respondo- ¿tú te has enamorado?
Ella me mira por unos segundos y después habla.
-sí- responde por fin- sí me he enamorado.
Escucharla hablar sobre eso me hace poner un poco celoso, el saber que alguien había conquistado su corazón era algo que lograba ponerme nervioso.
-¿lo amas?- pregunto de nuevo y espero ansioso su respuesta aunque intento disimular los nervios dentro de mi, ¿qué mierdas hacia esta mujer conmigo?
-lo amo- responde- aunque él es demasiado tonto para darse cuenta de que lo amo.
-sí debe de ser bastante estúpido- respondo y ella ríe.
-Raffae...- ella comienza a hablar pero nos vemos interrumpidos por el sonido de mi celular, es Giovanni.
-¿pasa algo?- pregunto mientras le indico a Dalila que espere unos minutos y ella asiente.
-mamá pregunta por ti- responde él- la cena no puede iniciar porque el jefe no está aquí- había olvidado por completo la cena de esta noche.
-iré enseguida- respondo y cuelgo de inmediato.
-¿Tienes que irte?- pregunta la castaña frente a mi y asiento- puedo tomar un taxi así llegarás a tiempo.
-de ninguna manera- respondo- vamos, te llevo a casa.
Sonríe mientras entrelaza su brazo con el mío y caminamos hasta mi auto.
♤
-Buona notte- saludo entrando a casa, todos se encuentran en la sala de estar.
Gianna se pone de pie y camina hasta mi, me abraza y solo me quedo congelado en mi sitio, no me gustaban estas demostraciones de afecto, me alejo lentamente de ella.
-Raffael- saluda Piero Rizzo, el padre de la pelirroja.
-Piero- me acerco hasta él mientras estrechamos nuestras manos.
Estamos en la mesa mientras hablamos de algunos negocios.
-¿has encontrado al ruso?- pregunta Piero y niego.
-si necesitas ayuda no dudes en pedirla- habla él y agradezco sin decir nada más mientras volvemos a retomar el tema anterior.
Estoy concentrado en lo que Giovanni y Piero hablan hasta que comienzo a sentir algo en mi pierna, miro disimuladamente y es Gianna quien tiene su pie acariciandome, me muevo logrando así que su tacto se aleje, me mira y frunce su ceño.
-¿todo está bien?- pregunta lo suficientemente bajo para que sólo yo pueda escucharla.
-todo perfecto- respondo volviendo a mirar a su padre.
Si hubiera sido otra situación muy posiblemente hubiera dejado que ella hiciera lo que quisiera pero en estos momentos no me interesaba ninguna otra mujer.
♤
-¿qué pasa contigo?- pregunta Giovanni mientras llega a mi lado, había decidido salir a fumar un cigarrillo.
-nada- respondo mirándolo rápidamente- ¿debería de pasarme algo?
-estás más serio que de costumbre, luces pensativo todo el tiempo e incluso tu mal humor se ha esfumado un poco- responde- ¿debería de preocuparme por eso?
-solo he estado ocupado pensando en papá- miento- y en Dante.
-¿irás con Dante?- pregunta y asiento.
-iré- afirmo- él quiere hablar y hablaremos.
-Dante solo busca provocarte- responde mi hermano- no deberías de darle ese placer.
-no tengo nada que perder- suelto tranquilamente.
-a veces envidio eso de ti- habla él y lo miro curioso.
-¿a qué te refieres?
-no tienes ninguna debilidad- responde- no hay alguien o algo que te haga perder el control, saber que tus enemigos pueden venir y simplemente esperar por ellos porque sabes que sólo te tienes a ti mismo.
-tengo a mi familia, a ustedes- respondo.
-no es lo mismo- habla él de nuevo- créeme, no hay nada peor que saber que la persona que amas puede sufrir en cualquier momento gracias a ti, tener que llamarla cada cinco minutos para asegurarte de que está bien, tener miedo de estar con ella y que esa sea la última vez que la veas- finaliza- no hay nada peor que ese sentimiento dentro de ti.
Así era justo como me sentía y eso era ahora mi miedo más grande. Nunca había tenido miedo a nada, ni siquiera a morir, pero las cosas habían cambiado de un día a otro, morir era lo último que estaba en mi lista ahora al igual que mi miedo ahora era perder a esa mujer, Dalila Román encabezaba mi lista de prioridades y por fin podía admitirlo.
Capítulo nuevo.
Espero que les guste.
No olviden comentar, votar y compartir.
Nos leemos pronto.
-Neftali.
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Tentación Italiana
Romance¿Puede un mafioso enamorarse? Una mirada y una sonrisa son suficientes para que alguien caiga rendido a sus pies y Raffael Morelli sin duda no es la excepción. Balas, armas, mafia y amor. "-No eres bueno para ella Raffael, entiéndelo. -Eso no...