Raffael
-¿irás con nosotros?- le pregunto a mi hermano mientras acomodo mi chaqueta.
-claro- responde él poniéndose de pie y tomando su pistola.
Salimos de la mansión y subimos al auto que nos llevaría hasta la bodega de la entrega, ya estaba oscureciendo así que era la hora perfecta.
-Raffael Morelli- habla un hombre frente a mi.
-Noan Salvatore- respondo mientras estrecho mi mano con el francés.
El rubio sonríe en mi dirección y después comienza a caminar pidiendo que lo siga.
-creí que esta entrega se había hecho la semana pasada- habla Giovanni quien va a mi lado.
-debía de ser así- responde el rubio- pero tuve un contratiempo, tuve que ir a Londres a controlar al estúpido de mi hermano, ya saben- llegamos hasta unas cajas de madera supervisadas por distintos hombres- mi padre apenas le da un poco de poder y hace cagadas y medias.
Noan comienza a abrir aquellas cajas para que después nos dejen ver lo que realmente nos interesa.
-armas de primera calidad- Salvatore me tiende una- los franceses siempre entregamos lo mejor- comienzo a analizar algunas de ellas al igual que Giovanni.
Después revisamos las demás cajas.
-Giorgio- hablo a mi jefe de seguridad quien llega inmediatamente- asegúrate de que sean transportadas a la bodega.
El hombre asiente y después se va dando indicaciones a los hombres que trabajan para mi.
-esto es para ti- saco el maletín con dinero que llevaba y se lo entrego al hombre frente a mi.
Lo abre y comienza a ver los fajos de billetes.
-perfecto- habla cerrandolo y dándoselo a uno de sus hombres- siempre un placer hacer trato con los italianos.
Comenzamos a caminar hacia la salida.
-¿te vas hoy?- pregunto.
-tenía pensado quedarme algunos días a disfrutar de Italia- responde- pero tengo algunos pendientes en Francia que arreglar y ahora también tengo que ocuparme del idiota de mi hermano, el cabrón consiguió su libertad y está dando de que hablar- saca un cigarrillo y comienza a fumarlo- Max no se quedará quieto, tendré que intervenir.
-no entiendo porque los hermanos siempre nos causan dolores de cabeza- hablo yo colocando mi chaqueta de nuevo.
-son unos cabrones.
-deberías de ir a mi club- hablo mientras Giorgio abre la puerta del auto para mi.
-lo pensaré- responde el rubio, me despido de él.
-vamos al club- habló hacia Giorgio, Giovanni se había ido en otro auto.
°
Llegó al club, todo luce en orden, voy hasta la oficina en donde encuentro a Giovanni con una mujer.
-hay habitaciones para eso- interrumpo mientras camino hasta mi escritorio, él se separa de aquella mujer y la obliga a salir de aquí.
-creí que no vendrías- acomoda su ropa y se sienta frente a mi.
-creíste mal- respondo, le pasó unas fotografías de un hombre- Alek Ivanov.
-¿es el hombre?- pregunta Giovanni tomandolas.
-es el líder ruso- respondo- y si no estamos equivocados es también el asesino de nuestro padre.
Giovanni aprieta sus puños.
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Tentación Italiana
Romance¿Puede un mafioso enamorarse? Una mirada y una sonrisa son suficientes para que alguien caiga rendido a sus pies y Raffael Morelli sin duda no es la excepción. Balas, armas, mafia y amor. "-No eres bueno para ella Raffael, entiéndelo. -Eso no...