Capítulo 25

99.7K 6.6K 700
                                    

Dalila

Estoy en camino a la cafetería, esta vez le he pedido a Giorgio que me deje venir sola y después de una gran insistencia de mi parte logré convencerlo aunque también tuve que decirle que no le diría nada a Raffael.

Llego a la cafetería y entro para después comenzar a trabajar, estoy en el mostrador hasta que escucho una voz conocida y que por mucho tiempo no había escuchado.

-¿cómo va todo por aquí?- levanto la vista y veo al chico de cabello cobrizo frente a mi.

-Jacob Coupe- respondo con una sonrisa mientras salgo de aquí y camino hasta quedar frente a él para después abrazarlo siendo correspondida por él- ¿qué haces aquí?

Pregunto y él sonríe sin soltarme aún.

-vine a visitar a mi familia- responde, Jacob era nieto de Olga- estuve en Londres algunos días y después volví a Francia y ahora me dieron una pequeña misión aquí- sonríe- y antes de volver a Francia decidí pasar a saludar.

Vuelvo a abrazarlo mientras corresponde.

-tengo que limpiar- hable mientras él me mira- y tú tienes tanto que contarme.

Tomo las cosas para limpiar en la parte de afuera que está desocupada y él me acompaña mientras lleva un café consigo.

Comienza a platicarme todo lo que ha hecho en estos años hasta que termina relatando la manera en que está trabajando ahora.

-he subido de cargo- continúa- ahora mis superiores me consideran para ciertas misiones- sonríe- sé que esto se lo debo a alguien pero esa persona ya no está aquí así que me siento afortunado de saber que todo lo que hizo fue terminado al final.

Sonrío mientras tomo asiento frente a él.

-¿qué es lo que te ha traído a Italia de nuevo?- pregunto y él mira a nuestro alrededor.

-es información confidencial- responde- pero- se acerca un poco- considerando que eres buena guardando secretos y considerando que estás a punto de graduarte de abogada- saca su celular- creo que esto te llamará la atención.

Busca algo en su celular y después se mueve quedando a lado de mi mientras lo extiende hacia mi de manera discreta.

-esto es lo que me trajo a Italia- abro los ojos sorprendida mientras veo las imágenes que me muestra.

Las fotografías eran sobre cuerpos, había cuerpos en ellas, cuerpos con diferentes marcas de agresión, desde balas hasta apuñaladas.

-¿esto pasó aquí?- le pregunto y él asiente mientras continúa con las demás fotos.

-se han registrado más de tres masacres de este tipo aquí en Italia- responde- obviamente es un tema que se está tratando con discreción, no se puede alarmar a la población con este tipo de información, no hasta encontrar un indicio para la investigación- se detiene en una foto donde hay cuerpos ahora quemados- mis superiores creen que se trata sobre una guerra de bandos.

-¿guerra de bandos?- pregunto.

-sí- responde- ya sabes, mafiosos contra mafiosos, aunque realmente no entiendo muy bien.

-¿qué cosa?- pregunto de nuevo y me mira.

-la mayoría de los cuerpos encontrados son de rusos- explica- todos y cada uno de los cuerpos son hombres rusos- mira también la fotografía- no creo que sea bandos contra bandos.

-si solo atacan a uno en específico pueden ser bandos contra un solo bando, ¿no?

Pregunto y asiente.

-es raro- responde- hace mucho que no veía algo como esto.

Continuamos viendo las fotografías  hasta que llegamos a una que llama mi atención.

-¿qué significa eso?- le pregunto y mira también la fotografía.

-debe de ser una marca- responde.

Aquellos hombres tenían una marca en los brazos, una M hecha como un corte, un profundo corte, al igual que había una enorme M en el piso hecha con sangre.

-eso es una pista, ¿no?

-hay miles de cosas que podrían significar la M- responde

-son pequeñas pistas- respondo yo- en la mayoría de los casos cuando se trata de mostrar o robar poder se dejan este tipo de cosas, vimos un caso parecido en la Universidad- comienzo- una persona dejaba pequeñas pistas y al final estas estaban vinculadas con él. Esto puede representar un nombre, un lema, un apellido y en ocasiones también es una advertencia.

-podría ser- responde él mientras continúa viendo esa fotografía.

La miro también era escalofriante ver eso, saber que todos esos hombres habían perdido la vida en manos de alguien más, no podía imaginar la magnitud del problema tanto así para arrebatar vidas.

Jacob se ha ido hace un buen rato, continúo en la cafetería, estoy limpiando una mesa y alguien llega sobresaltandome.

-cuñada- volteo encontrándome a Giovanni Morelli de pie aquí.

-Giovanni- sonrío mientras lo saludo- Hola.

-justo a ti te estaba buscando- habla.

-¿en qué puedo ayudarte?- pregunto volteando completamente hacia él.

-el cumpleaños de Raffael es en unos días- habla y asiento- mi madre le ha organizado una fiesta- sonríe- y pensé en que no tengo el regalo para él, ¿qué puedo regalarle a alguien que ya lo tiene todo?- asiento de nuevo, no podía estar más de acuerdo- hasta que pensé en ti- frunzo mi ceño.

-¿yo?

-serás el regalo perfecto para él- responde- apuesto a que le gustará verte en la fiesta- me da una invitación.

Leo la invitación.

-espero verte ahí cara- se despide para irse de aquí mientras continúo leyendo el papel en mis manos.

¿debía de ir aún cuando su madre había dejado en claro que no me quería cerca de ellos? Suelto un suspiro frustrado.

Capítulo nuevo.

Espero que les guste.

No olviden comentar, votar y compartir.

Nos leemos pronto.

-Neftali.

Tentación ItalianaOpowieści tętniące życiem. Odkryj je teraz