CAPÍTULO 92

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La sensación de irrealidad cubría a todos los amigos y familiares de Jisoo en la sala de espera. El dolor y la tristeza era lo único que sentían en sus corazones. La desesperanza y la impotencia por no haber estado ahí para ayudarla a tiempo les provocaba enojo y frustración a todos. No encontraban el consuelo en nada, por lo que todos se daban golpes de pecho, sin embargo, había alguien que lloraba a flor de piel sintiendo que su cuerpo le quemaba en todas partes; esa era Rosé, quien permanecía sentada ahogada en lamentó en su silla de ruedas viendo hacia la puerta de la sala de operaciones, rememorando en su mente el momento preciso en que su joven esposa la protegió a ella y a su hija hasta la última instancia, sin importarle nada más, las salvo a ella y a su hija. Se culpaba por no haber llegado más rápido junto a ella, tal vez sí hubiese accionado el botón de emergencia más rápido, o sí tal vez hubiera llamado a su familia apresuradamente, hoy su gran amor estaría a salvo, tantas idas y venidas acerca de las posibilidades, pero ninguna válida para Jisoo; ya que nada impidió que la hubieran lastimado de gravedad.

La rubia no sabía que hacer, se le dificultaba respirar a causa de las heridas que aún no sanaban en su cuerpo, pero esa no era la única razón, era la "posibilidad" de perder a su media mitad, a la única persona que la ha amado de verdad y por sobre todas las cosas. Jisoo fue la primera persona que amo las imperfecciones en su alma y en su cuerpo, la única que le dió el valor como ser humano, aquella que la impulsaba a salir adelante, a amarse por si misma, aquella que la apoyaba en todas las circunstancias, aquella que le dió todo lo que siempre quiso, aquella mujer se encargó de reconstruir su corazón, cuidarlo, y llenarlo de amor; la mimaba y la consentía siempre, sin importarle nada. Rosé la adoraba, pues Jisoo era su inspiración, su musa, la voz que la llamaba en la oscuridad, representaba todo para ella, y sin su pareja, sentía que estaba perdiendo la voz; ya había pasado por dos ataques de ansiedad y tuvieron que aplicarle un par de calmantes; primero cuando vio a Jisoo cubierta de sangre agonizando en el suelo, y luego, cuando los médicos dijeron que debían operarla de emergencia. El diagnóstico de la pelinegra era desolador, pues la primera bala que impacto en su cuerpo fue a dar a su hombro derecho, y la segunda fue a parar a su columna; Jisoo no tenía esperanzas de sobrevivir, y según el diagnóstico médico y las palabras de su gran amiga Jeongyeon, si lograba sobrevivir al procedimiento seguramente no podría volver a caminar de nuevo, todas esas palabras consumieron a Rosé, le daba pánico imaginarse una vida que no involucrará a Jisoo, la amaba con todo lo que representaba su espíritu, todo de ella le pertenecía a la más pequeña de las Kim. Un vacío se plasmó en su pecho y se sintió morir al instante, no podía concebir verla lastimada de ninguna manera, le dolía, dolía mucho.

Ya habían pasado más de seis horas desde que la pelinegra había entrado a cirugía de emergencia y aún no tenían ninguna respuesta por parte del equipo médico. Está vez la jefe de cirujanos Jeongyeon no intervino en el proceso, pues no estaba en turno esa noche y cuando sé enteró del suceso fue demasiado tarde para poder involucrarse. La madre de Jisoo, Irene, sufrió un desmayó en cuanto se enteró que le habían disparado dos veces a su hija menor. La mayor de las Kim ya había sufrido mucho en los últimos días por todo lo ocurrido, estaba nerviosa y en vela esperando noticias de su hija. Jennie estaba intranquila y al igual que los demás sus lágrimas eran desbordantes y desconsoladoras. Jihyo quería gritar de enojo, ya no le bastaba caminar de un lado a otro, el dolor de imaginarse una vida sin su mejor amiga, la hacia desesperarse.

Una hora más pasó, y un médico salió a brindar noticias sobre el procedimiento que se le realizó a la pelinegra. En cuanto el grupo visualizó la salida de la cirujana a cargo, corrió hacia ella con afán.

─Soy Emilia Song, la cirujana a cargo del procedimiento de la señorita Kim. ─se presentó haciendo una leve reverencia. Dahyun gruñó de irá, odiaba a esa mujer por pretender a su prometida, y justo ahora, debía agradecerle por atender a una de sus mejores amigas.

Gay Panic |Chaesoo| Editando.Where stories live. Discover now