Gay Panic |Chaesoo| Editando.

CAPÍTULO 2

Patética.

Soy simplemente patética.

¿Cuándo abre de madurar?

Lo mío no es ganar y salir ilesa al parecer, a mí la vida me pone en un ring de boxeo en cada oportunidad.

¡MIERDA!

Aquel objetivo se convirtió en una ilusión... un sueño...

Mi hermana, Jennie... una tarde simplemente llamo a mi madre y le soltó la bomba sin anestesia, un hito en el que ella dejo de mentir y revelo que había decaído, más bien se había enfermado de gravedad...

...

Sigh...

Mi corazón se aceleró mientras veía el rostro de tristeza y de agobio de mama mientras habla con ella por teléfono, por eso, supe que no podía dejarla. No podía dejarla sola lidiando con todo.

No ahora que mi hermana había sido madre recientemente, no cuando los síntomas de su enfermedad ya empezaban a afectarle de más y había tenido que dejar su trabajo asalariado y volver a casa con una tremenda sensación de fracaso, culpa y bochorno.

La situación... la situación me hizo pensarlo rápidamente y buscar la manera de ayudar a mi familia a salir de los apuros, al menos de los apuros económicos.

La noticia lamentable y la salud de mi hermana y mamá me obligaron a abandonar mi postulación, mi viaje y mis ahorros... tan solo enfocándome en el ahora y dándole la prioridad necesaria a mi familia.

Jennie siempre fue nuestra mano derecha, el sostén en la cuerda floja en la que siempre nos encontrábamos mama y yo, aquel apoyo incondicional en la medida de sus posibilidades...

Siempre he querido a mi hermana porque fue mi modelo a seguir luego de nuestra madre, por eso, entendí que debía respaldarla en esa infortunada situación costara lo que costara.

Así, decidí quedarme cuidando a mi familia y trabajando por ellos, dejando de lado mis prematuros sueños e inalcanzables objetivos.

Por algún motivo no me dio tristeza dejar la idea de lado porque de todas formas en el fondo lo veía poco realizable... al final inalcanzable.

Lo que si me dolió e incluso me hizo ahogar las lágrimas fue irme del restaurante y tener que renunciar a mis españoles favoritos.

Se me estrujo el corazón cuando me di cuenta de que lo que ganaba allí no iba a ser suficiente para lidiar con los nuevos gastos. Ya no solo éramos dos, éramos cuatro y debía generar más ingresos ahora que la situación de mi hermana era sumamente precaria; no quería que mi madre tuviera que, sobre exigirse física o emocionalmente, al menos no ahora que estaba en mis posibilidades contribuir y buscar una salida.

Mi único y nuevo objetivo cambio por algo simple pero valioso, conseguir un trabajo más estable en horarios y en paga...

Una vez Jennie y el bebe estuvieron mejor ubicados en casa comencé a revisar cada cartel, publicación y vacante laboral disponible, entonces, hallé algo interesante; la noticia exploto muy fuerte en redes sociales, puesto que, recientemente una de las marcas más reconocidas en Corea habría su segunda Multiplaza en Seúl, informando que requerían personal de manera urgente.

Allí vi mi gran oportunidad en un click, de esa manera postulé mi currículum con nerviosismo y muy dudosa de lograrlo, por consiguiente, esa misma noche con tristeza me despedí de Nina y Nacho muy agradecida por la oportunidad y con la promesa de que estaríamos en contacto.

...

Un día a la vez...

Por recomendaciones médicas ya habían pasado tres semanas desde que Jennie había empezado con las terapias físicas con el propósito de fortalecer su cuerpo y mejorar su movilidad, sin duda se veía mucho más recuperada que cuando llego, eso considerando las lágrimas, la derrota personal y el dolor en su corazón. Mi precioso sobrino Leo recién cumplía dos meses, ya un poco más grande y con mejor estado de salud, lo que atribuyo a que Jennie estuviera fuera de peligro físicamente hablando, aunque sentimentalmente...