Gay Panic |Chaesoo| Editando.

CAPÍTULO 15

Mientras me cambiaba de ropa también me tomaba el tiempo de detallar mi cuerpo frente al espejo; luzco supremamente agotada, resaltaban mis ojeras oscuras y mis ojos están muy rojos... 

Estás más delgada.

Muchas gracias por la ayuda conciencia, siempre tan oportuna.

Últimamente no dormía mucho, porque empecé a trabajar más en Sprüngli. La cuestión es que acomodé los horarios de la Universidad de manera que pudiera trabajar y estudiar a la vez, por lo que salía corriendo a las clases y viceversa porque necesitaba más dinero, además Haein me pedía prestado más seguido y no quería negarle nada, al mismo tiempo que seguía ayudando a mamá en casa. 

Es solo una mala racha.

──Gracias por el desayuno. ─Haein besó mis labios brevemente y luego salió de la casa.

Eso también había cambiado porque empecé a notarlo más frío. Ya no derrochaba amor cómo antes e incluso senti que no éramos los mismos de antes, tal vez podría ser la rutina y de verdad no quería discutir por eso.

Era innecesario y tal vez él solo se sentía cansado... 

Mi celular sonó y empecé a buscarlo entre las cobijas con mucha pereza, hasta que finalmente lo encontré y me fijé en quién llamaba; "Sis"...

Es Jennie, contesté inmediatamente muy emocionada. 

──¡Hola! ─saludé primera

──Hola hermanita. Qué madrugadora, pensé que te había despertado. ─dijo mi hermana entre risas.

Que va.

Ahora Haein había empezado a ayudar a uno de sus amigos en un bar veinticuatro horas, por lo que me levantaba a las cuatro o cinco de la mañana, preparaba su desayuno y se lo llevaba al bar o simplemente lo acompañaba mientras comía porque no le gustaba desayunar solo y yo debía ser más considerada.

Estoy muerta.

──No te preocupes, Jen. Madrugue porque tengo un par de trabajos atrasados. ─mentí.

Sinceramente no quería un interrogatorio, no tenía humor para eso. 

──Que raro... Tú nunca dejas nada para último momento. ─dijó con ese tono dudoso y cuestionante. ──No pierdas tus buenos hábitos de siempre, Ji.

──S-Si. Tienes razón, Jen. ¿Cómo está el pequeño gatito? ─pregunté refiriéndome a Leo desviando el tema completamente porque la conocía y sabía bien que iba a preguntarme hasta averiguarlo todo. 

──Dormido junto a Lisa porque anoche insistió en dormir con nosotras. ─Jennie soltó un par de risitas. ──Ya no es tan pequeño, Ji. Es tan triste...

──Se le ve muy grande en los vídeos y las todos que envias. Los extraño mucho y mamá también. ─lo dije de corazón.

──No te creó porque ahora tienes tu propia distracción. ─mi hermana se burló. ──Tambien te llamaba porque quería decirte algo importante, pero debes prometerme que no sé lo dirás a Lisa.

──Ay, Jen... Está bien, tu dime. ─respondí soltando una risita mientras negaba con la cabeza.

──Ella quiere que le ayudes con un trabajo. Al parecer tiene la posibilidad de expandir la empresa en Australia y ha pensado en ti para eso... todo el tiempo me habla de lo mismo. ─mi hermana soltó un suspiró.