CAPÍTULO 34

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Un momento para la familia siempre es bienvenido...

──¿Como te sientes? ─pregunté con interés.

──Bueno, como si me hubieran roto todos los huesos del cuerpo. ─respondió mi hermana en voz baja. 

──Lo siento tanto, hermanita. El lado positivo es que por fin podrás descansar. ─solté una risita ante su ceño fruncido.

──Sinceramente lo dudo. Leo fue muy obediente al nacer, pero Lili es algo... dramática. ─aseguró Jennie entre suspiros.

──Ya verás que todo mejora en los próximos días. Se ve que es una niña muy calmada. ─mi corazón se estrujó al verla lucir tan tierna y apasible. ──Quisiera cargarla ahora mismo... de verdad. ─acerqué más mi rostro a la pantalla del celular.

──Y puedes, ven a vernos entonces. Aceptaré toda la ayuda posible. Eres buena con los niños, definitivamente me ayudaste bastante con Leo en el pasado. ─afirmó Jennie acomodándose algunos mechones tras la oreja.

──Y me gustaría mucho, pero sabes bien que justo ahora no puedo, Jen. ─respondí con honestidad. ──Debo estar al frente de la empresa... ─ella rodó los ojos. ──¿Hablaste con mamá? Tal vez y ella pueda ayudarte. 

──Agh, mamá dijo que vendría, pero no en este momento porque tiene "mucho" trabajo. ─bufó mi hermana haciendo comillas con sus dedos. ──No entiendo porque insiste en trabajar ahora que nos tiene a nosotras siendo más estables económicamente. ─suspiró. 

──Siendo así, Lisa tendrá que ponerse al frente esta vez y darlo todo de sí misma. ─sugerí. 

──¡Dios, Lisa! No te imaginas. ─Jen rodó los ojos. ──Ella es peor que Lili. En cuanto la bebé llora Lisa también lo hace, incluso si Lili da un pequeño grito cualquiera creé que debemos regresar al hospital inmediatamente. ¡Hace 2 días que salí de ahí y ya quiere volver a internarnos! ─afirmó indignada y estresada también. 

──Ay, por Dios, Jen. ─solté una carcajada. ──Es como si Lisa fuera madre primeriza, es como si fuera su primer hijo. Tenle un poco de paciencia a esa tonta.

──Ni lo menciones. ─rodó los ojos. ──La única ayuda eficiente que tengo en este momento proviene de mi pequeño Leo. ─sus ojos se iluminaron. ──Es taaan lindo, hermana. Él siempre está muy pendiente de nosotras y nos consiente demasiado. ─sonrió enternecida contagiandome al momento. ──Leo hace todo lo que le pido. Es mi príncipe.

──Estoy muy orgullosa de él. Los extraño mucho, Jen. Haz lo posible por venir de visita. Bueno, al menos cuando te recuperes del parto. ─solté una risita. 

──Está bien, pero estoy tan gorda ahora mismo, hermanita. ─los ojos de Jen se aguaron. ──Y sensible también...

──Por supuesto que no lo estas, Jen. Sigues igual de linda que siempre. Tal vez es por lo reciente que es el parto y te sientes así. No te preocupes y tomate tu tiempo.

──Casi lo olvidó, te enviaré las fotos de todos los obsequios que le envió Chanel a Lili. Te van a encantar. ─Jen hizo una pausa repentina y pude ver que Lili se empezó a despertar. ──Tengo que dejarte, alguien es demasiado posesiva conmigo. ─soltó una risita. ──Te quiero. 

──Te quiero. 

Con una amplia sonrisa colgué la videollamada...

Sigh...

Tengo ganas de conocer Tailandia y la sede principal de la empresa.

Me imaginé junto a Chaeyoung allí en un desayuno al aire libre, viendo a mi madre sonriente por ahí y a toda mi pequeña familia reunida festejando el nacimiento de Lili, pero precisamente ahora es un hecho poco palpable porque debo cerrar algunos proyectos antes de finalizar el año, además, se acerca la boda de Jihyo. Lo que quiere decir que no tendré a mi mano derecha por un largo tiempo por lo que voy a estar recargada de trabajo.

Gay Panic |Chaesoo| Editando.Onde histórias criam vida. Descubra agora