──Perfecto, ignora a tu madre. ─mamá me encaró. ──Te vas a acordar de mis palabras, Jisoo. ─sentenció Irene mirándome estoica mientras me pasaba un plato con comida.

En mi lugar me quede un momento en silencio, básicamente helada porque mamá fue muy seria, lo cuál me causo preocupación al momento.

...

──¿Qué tal las cosas con el doctor, Jen? ─pregunté con intentando recobrar el ánimo.

Definitivamente quería cambiar de tema. 

──No te imaginas. Est-... ─Jen fue interrumpida porque estaban tocando la puerta.

──Continúa, cariño. Yo voy. ─le dijo mi madre. ──Terminen su desayuno. ─Irene se dirigió a la puerta.

──Te decía... Estamos muy bien, él es muy caballeroso y detallista conmigo. ─decía Jen muy sonriente. ──¿Viste el cochecito de Leo? ─preguntó emocionada.

──Si, lo vi de paso. ─respondí.

──Bueno, pues se lo regalo Tae. ─afirmó sonrojada y solté una risita baja. ──No quiere que mi hijo esté incomodo cuando paseamos. Es... wow... piensa en todo.

Le brillaron los ojos.

──¡No tienes nada que hacer aquí! ¡LARGATE! ─mi madre comenzó a gritar exasperada.

Al acto me levanté de golpe seguida por Jennie con el propósito de acercarnos rápidamente a ella y ver que la tenía así.

Entonces nos dimos cuenta de quién se trataba y la razón de la molestia de nuestra madre.

Es Lisa...

Al momento volteé a ver a Jennie y ella estaba completamente pálida.

──Nini... Hola. ─musitó una Lisa tímida a pesar de su increíble presentación personal y el ramo de rosas que sostenía entre temblores.

Jennie frunció el ceño al momento en que Lisa termino, consiguiendo volver a la tierra.

──Mamá, Jisoo... déjennos a solas. ─nos solicitó Jennie luciendo sumamente seria. ──Cuídenlo, por favor... voy a resolver esto de una buena vez. ─bufó cruzándose de brazos.

──Pero, hija... ─balbuceó mi madre fulminando a Lisa con la mirada.

──Vamos adentro, mamá. Jennie necesita privacidad. ─le dije tomándola de la mano en contra de su voluntad y luego cerré la puerta despacito.

──Jisoo, déjame. Tengo que escuchar que dice esa idiota. ─mi madre soltó mi mano e inmediatamente pego su oído a la puerta.

Definitivamente eso no era necesario porque hablaban bastante fuerte y se oía todo con claridad.

Ahora sí te van a enseñar a tener pantalones, Lisa.

Prepárate, cabrona.

──¿Qué demonios haces aquí, Manoban? ─le preguntó Jennie en un bufido.

──Nini, no... y-yo... ─Lisa tartamudeaba. ──Amor, se que te fallé y lo siento tanto... no merecías nada de lo que hice... te deje sola... te decepcioné.

Al momento Lisa comenzó a llorar porque pudimos oírla.

──¡Ugh, cállate! Y no te atrevas a decirme "amor"cuando tú y yo no tenemos nada. Pierdete de una vez. ¡Respétame y lárgate! ¡No tienes nada que hacer aquí! ─sentenció mi hermana con rabia.

──N-No... no me digas eso, Nini. No he dejado de amarte un solo momento... Quiero que estemos juntos, quiero que mi hijo lleve mi apelli-...

Gay Panic |Chaesoo| Editando.Where stories live. Discover now