Wake Up With Me!

CAPÍTULO 57 - "Will You Promise Me You'll Search For Us?"

“¿Me prometes que nos buscarás?”

Canción: Afterlife – Hailee Steinfield

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Mon-El

No quería decir adiós.

Porque jamás fui bueno para las despedidas.

Desde que tenía memoria, podía recordar a mi madre diciéndome que todo estaría bien cuando me dejo el primer día de escuela llorando junto a una de las maestras.

Aunque últimamente el recuerdo de ese trauma de infancia había sido remplazado por el de la impotencia absoluta que sentí la última vez que le dije adiós a Kara, sin que ella se diera por enterada de mi presencia.

En ese entonces ni siquiera entendía bien lo que sentía por ella y fue una de las peores experiencias de mi vida y ahora que ella no era solo un espejismo, sino una realidad que me cortaba la respiración me sentía al borde de un abismo.

Habría sido tan sencillo dejar que se quedara y no decir nada, pero no quería que ella cometiera mis mismos errores, no quería que viviera una vida complaciente y rutinaria, que a larga solo nos traería desdicha.

Quería que pudiera seguir siendo ella misma, así como yo podía serlo cuando ella estaba cerca.

Ni siquiera se me había pasado por la mente la idea de terminar nuestra relación, estaba enterado de que iba a ser un infierno, tenerla lejos, pero tenía que creer que había un poco de destino en todo ello.

Cat lo había dicho el otro día, cuando Kara y yo estábamos juntos la vida parecía tener sentido, habíamos tardado años y kilómetros en encontrarnos uno al otro, pero había valido la pena cada segundo y no cambiaría nada de eso.

Incluso ahora, aunque lo odiara, la idea de estar lejos por un tiempo parecía un precio justo a pagar hasta que nos volviéramos a encontrar.

Kara llevaba casi una semana acudiendo a la oficina de Samantha para que ella le explicara en su totalidad los procesos que se llevaban a cabo de la reserva y cómo funcionaba toda la operación.

En las noches cuando regresaba a casa y me explicaba lo que ahora sabía, tenía una mirada brillante y una sonrisa dibujada en el rostro, que la hacía sentir culpable de estar disfrutando tanto estar involucrada de nuevo en algo que para ella era tan importante.

Escucharla me llenaba de orgullo, porque sabía J’onn no se había equivocado es elegirla para hacer el trabajo, pero también me invadía una oleada de tristeza e incertidumbre.

Kara que me conocía bien, debió notarlo porque siempre que hablamos del asunto, se las ingeniaba para disipar cualquier duda entre ambos, casi como si quisiera borrar cualquier rastro de inseguridad entre nosotros con sus besos y sus caricias.

No me estaba quejando de ello, lo único que me seguía sorprendiendo era que ella fuera tan convincente y yo tan débil.

Al final de esa semana tuve que acudir a una reunión con los abogados de la aerolínea, en la que también habían solicitado la presencia de mi abogada.

Imagine que con todo el revuelo que la prensa seguía haciendo de mi visita a la corte contra Lex Luthor y las investigaciones federales a los otros negocios de Lex, la disputa por las exclusivas en los periódicos seguía siendo el tema de conversación principal por aquellos días.

Justo como Lena había previsto, aunque Lex evitara ir a la cárcel con nuestra demanda, solo era cuestión de tiempo para que un agente de FBI intuitivo o un periodista curioso comenzara a sacar los esqueletos del armario.