Wake Up With Me!

CAPÍTULO 12 - "I Can Feel Your Heart Hanging In The Air"

"Puedo sentir tu corazón colgando en el aire"

Canción: Fleurie – Hurricane 

-

Presente...

Si alguien me hubiera dicho hace siete años que mi vida iba a estar a punto de terminar en mitad de una jungla pantanosa en compañía de Mon-El Mathews, no le habría creído en lo absoluto.

No podía negarlo, estaba convencida ahora de que Mon-El era un excelente piloto, pero justo como él dijo, tendríamos que desafiar todas las probabilidades.

La intensidad de la tormenta se acrecentaba a cada segundo que nos acercábamos más a nuestro destino, un rayo por lo menos nos alcanzó y Mon-El se veía confiado.

Pero todo se complicó cuando ambos motores se apagaron y los controles dejaron de responder.

Mon-El me había ordenado colocarme el paracaídas mientras él intentaba hacer que alguno de los controles encendiera cuando las precipitaciones del avión comenzaron a fluctuar.

Al principio parecía tranquilo cuando me dio la orden, pero se puso realmente molesto cuando me negué a seguir sus instrucciones.

-¡Kara! ¡No es momento para ser terca, has lo que te digo!

-¡No!

-¡Kara! ¡Hazlo! ¡No me perdonaría si algo te pasa! –gritó.

-¡Si mueres la que no podrá vivir con eso soy yo! –Grité de vuelta –¡Así que busca una forma de que funcioné o fue un placer conocernos Mon-El!

No supe que ola de adrenalina me ataco en aquellos momentos, pero lo único que podía pensar una y otra vez era que íbamos a pasar nuestros últimos momentos discutiendo.

-Estoy tratando de encender de nuevo, pero parece que los motores se han congelado, si no encienden no podemos regresar -replico él.

Fue entonces que escuchamos una explosión y vimos uno de los motores desprender humo y los sistemas de alerta del avión comenzaron a iluminarse.

Mon-El comenzó a apretar varios comandos del tablero de control y se mantuvo en el timón estabilizando y redireccionando el avión.

Yo solo me quede petrificada en mi asiento, con los ojos cerrados respirando pesadamente.

-¡Sujétate, voy a aterrizar este avión!– fue lo último que escuche decir a Mon-El y lo siguiente que vi era que estaba dirigiéndonos hacia las montañas en medio de la tormenta que no dejaba de golpearnos.

Del aterrizaje solo recuerdo respirar profunda y pesadamente, mientras continuaba con los ojos cerrados.

El sonido de la tormenta y del avión cortando el aire, y las sacudidas de este al impactar contra algo, hacían muy difícil mantenerme concentrada en una sola cosa.

De repente en mi cabeza se escuchaba explosiones y para cuando me di cuenta, mi mente me había llevado a la frontera de Siria, escuchando voces, llanto y gritos desesperados.

La cabeza me daba vueltas, y creo que perdí el conocimiento por unos minutos después del impacto.

Cuando desperté, fue el sonido de un rayo el que me trajo de vuelta a la realidad, observé el lugar donde me encontraba, aún estaba sentada en la silla del copiloto con el cinturón puesto y a un lado estaba Mon-El inconsciente con una herida en la cabeza.

Me solté el cinturón para tomar algo de aire y colocar en orden mi cabeza.

Trate de encender la radio para pedir ayuda, pero era inútil nada funcionaba.