Allie.
Los ojos azules de Raven me observan con cautela mientras siento un aguijonazo de pánico. No esperaba recibir una bomba nuclear, menos de esta magnitud. Oficialmente declaro este día como el peor de mi vida. Primero los padres de Logan matan a los animales del bosque y ahora me entero que también forman parte de una secta.
Oh, Dioses...
¿Hasta cuándo seguirán incrementando los problemas? No creo poder lidiar con tanto, es agobiante y asfixiante. Ya tengo suficientes en mi dramática vida.
—¿Estará aquí dentro de dos días? —Miro a Raven —. ¡Mierda! ¡Mierda!
Mi prima asiente.
—Debe decirte muchísimo y lo ideal es hacerlo en persona —explica ella —. También traerá pruebas que culpan a sus padres.
Dejo las flores que Raven me obsequió sobre la mesita y abrazo a mi peluche de Stitch como si ese gesto pudiera alejar cualquier sentimiento de miedo. Una teoría muy loca viene a mi cabeza. Sé que el señor de las sombras recibe sacrificios por parte de sus súbditos. Los Dumont matan a personas. ¿Qué hay de los Michaels? ¿Ellos ofrecen animales del bosque?
¿Mi bosque?
Una intensa rabia se está gestando a mi estómago. Quiero volver a Canadá y acabar con esa familia desagradable. Sobre todo, con Deborah Michaels.
Los próximos animales muertos serán tu familia...
Miedo e incertidumbre corren por mi cuerpo mientras pienso en esa escena. La madre de Logan me observaba con rencor y desprecio. Nunca me aprobó para su hijo. Ella creía que yo era solo una zorra insignificante, aunque su odio tiene sentido ahora.
Me veía como otro sacrificio.
Quiero gritar.
—Logan no está de acuerdo con las acciones de sus padres —agrega Raven —. Sonaba horrorizado e indignado cuando hablé con él. Me dio la sensación de que lloraría. Estaba muy asustado, Allie.
Suelto un grito frustrado que asusta a Annie y salta lejos de mi cama. ¡Maldita sea! La desgracia y mala suerte me persiguen. Estúpida Catalina, estúpido señor de las sombras, estúpidos todos.
—Dime que es una broma —suplico con un mohín —. Por favor, Raven.
Mi prima agacha la cabeza, la pena se asoma en sus rasgos.
—Es más real de lo que crees.
Cubro mi cara con las mantas mientras mis párpados se aprietan. Jamás hubiera pensado en esta posibilidad. ¿Cuántos enemigos más van a presentarse? ¿Y Logan? No sé qué pensar de él.
—Lanzarme desde un precipicio es más fácil que esto —gimo —. ¿Logan vendrá aquí? Dioses, no quiero imaginar la reacción de mi padre. Mi relación con Ronan tampoco va bien, esto lo va a empeorar.
Siempre supe que los sentimientos de Logan hacia mí eran intensos, pero no de esta manera. ¿Es capaz de traicionar a su familia? ¿Por mí? Pienso en nuestros momentos juntos, cada detalle, su sonrisa, sus acciones. Él hacía tanto para complacerme, me amaba inmensamente y yo rompí su corazón.
No lo merezco.
No merezco su amor.
No merezco su lealtad.
—¿Eres la única que sabe sobre esto? —Le pregunto a mi prima.
—Roy también —contesta Raven —. Me involucré porque Logan corre un peligro muy grave. Su familia querrá callarlo de cualquier forma.
Mi corazón está a punto de estallar en el acto.
—No me parece justo que arriesgue su vida por mí —musito.
Raven sonríe.
—Logan está haciendo esto porque es lo correcto, Allie. Quiere salvar la vida de muchas personas y la tuya también.
Las lágrimas me escocen los ojos. Estoy muy agotada, hoy fue un día de mierda. Descubrimos a la fantasma que acosa a Aden, mi discusión con Ronan y ahora esto. ¡Olvidé mencionar mi drama con Catalina!
—Gracias por decírmelo —musito —. Y no dudes en acudir a mí si necesitas algo. ¿Logan tiene dónde quedarse?
Raven muerde el interior de su mejilla.
—Uh... no —dice —. Su vida está en peligro y lo adecuado sería ayudarlo.
Lucho para que el pánico no se apodere de mí, pero es inevitable. ¿Tendremos que alojarlo aquí? Ay, mierda...
—Hablaré con mis padres. Ellos sabrán qué hacer en una situación como esta.
Raven asiente.
—Logan está pasando un momento muy difícil. No debemos darle la espalda.
—Lo sé.
Raven besa mi mejilla antes de dirigirse a la puerta.
—Mereces ser amada cada segundo de tu vida —me sonríe —. Nunca creas que no vales la pena. Eres muy valiosa, Allison.
Le doy una media sonrisa.
—Te quiero.
Me lanza un beso con la mano.
—Y yo a ti.
Raven se retira y Annie se acurruca cerca de mis pies en la cama. Me pregunto qué rumbo tomará mi vida a partir de ahora. Sé que tengo la fuerza suficiente, pero no la certeza de hasta cuando soportaré. El agujero dónde estoy metida es muy profunda al igual que el dolor en mi corazón.
💚
Me detengo frente a la puerta de Aden que se encuentra abierta. Mis padres están con él, teniendo una seria conversación. El momento familiar me conmueve, nada volvió a ser lo mismo desde que abandonamos nuestra casa de Canadá. Puedo entender perfectamente por qué razón mis padres no permitieron que pase mi infancia aquí.
New Hope significa desgracias y dolor.
—Me contó un pajarito que andas deprimido —empieza mamá.
Mi pequeño hermano apaga el vídeo juego y observa a ambos con cautela. Papá permanece serio y en silencio. No muestra sus emociones, pero sé que también está sufriendo.
—No me hables como si fuera un bebé, mamá. Tengo nueve años.
Los ojos verdes de mamá parpadean para alejar sus lágrimas. Me trago el dolor que crece en mi garganta. No soporto que sufra, ella merece nada más que amor en este mundo.
—Tú siempre serás mi bebé, Aden.
No necesito ser adivina para saber qué pasa por la mente de mi madre. Ella no superará la culpa por haber descuidado a mi hermano. Sé que esta situación le recuerda todo lo que ha vivido con mi tío Theodore. Lo perdió cuando era solo un niño. Theo murió por culpa de aquellos que querían apoderarse de su alma y sus dones.
Era un niño inocente y le arrebataron las posibilidades de vivir.
No quiero lo mismo para Aden.
—Mi deber como madre es protegerte, amarte y abogar por tu seguridad siempre —musita mamá —. Lamento muchísimo que lo hayas buscado en alguien más, Aden. Nunca quise que te sintieras así.
Presiono una mano sobre mi corazón mientras veo a mi padre ponerse de cuclillas frente a él. Escucho a Amy jugar con mi abuela en la sala. Me reconforta que ella solo sea una niña y no cause tantos problemas. Mis padres tienen suficiente conmigo y ahora Aden.
—Lo sé, mamá —responde Aden en voz baja.
Papá aclara su garganta antes de hablar.
—Sé que las circunstancias te llevaron a esto y te prometo que pondré lo mejor de mí para que nunca más te sientas solo —Mi padre levanta su puño y choca con el de Aden —. Pero tienes que ayudarnos, campeón. Vas a decirnos cuando algo va mal, ¿de acuerdo? No finjas que eres feliz y estás bien.
Aden parpadea con los ojos llorosos.
—No quiero ser una molestia.
Mamá lo abraza y besa su cabeza. El cuerpo de mi hermano se afloja por completo y permite que mamá lo consienta como debe ser. Él es un niño. ¿Cómo puede creer que sería una molestia?
—Tú jamás serás una molestia, cariño. Eres mi bebé, no me molestará saber qué sucede contigo. Nos importas muchísimo. Tú eres importante como Amy o Allie. Te queremos hasta el infinito y más allá.
Aden sonríe.
—¿Hasta el infinito y más allá?
—Sí —afirma papá —. Quiero que vuelva a ser como antes y me digas hasta cuando te tiras gases.
La cara de Aden se sonroja.
—¡Papá!
Mamá los acompaña en el coro de risas.
—¿Qué? —Se burla papá —. ¿Ahora tienes vergüenza? Te cambié los pañales desde que fuiste un bebé y cagaste sobre mí varias veces. Conozco cada parte de ti, Aden. Sé que eres un hombrecito inteligente, bondadoso, buen hermano y un hijo ejemplar.
Aden no suelta a mamá quien mantiene los ojos cerrados y continúa abrazándolo.
—¿Lo soy?
—Por supuesto que sí —afirma mi padre —. Tú no eres como los otros niños. Tienes algo en ti que te hace muy especial.
Mi hermanito levanta la palma de su mano derecha dónde una pequeña bola de agua se forma. Él a diferencia de mí, no utiliza el fuego. Se siente más cercano al agua lo cual es grandioso. Me pregunto cuál será la marca de Amy cuando crezca.
—Y por esa razón ella me quiere —dice Aden.
Cierro mis manos en puños, sintiendo la sensación de terror apoderándose de mí. Solo recordar los gritos de Ronan cuando tocó a esa fantasma me eriza la piel. No es Georgie, pero eso no quita el hecho de que Mary también es muy peligrosa.
Estamos lidiando con dos Poltergeist a partir de este instante.
—Sí, pero tú no permitirás que ella te aleje de nosotros —Mamá acuna el rostro de mi hermano en un gesto de desesperación —. Júrame que jamás va a separarnos, Aden.
La bola de agua revienta y moja la camisa de mi padre. Casi me río, pero estamos en un momento serio. Necesito escuchar la respuesta de Aden tanto como mamá. Yo tampoco podría vivir si esa fantasma desalmada nos alejó porque él se sentía solo por mi culpa.
—No voy a permitir que nos separe —habla Aden con la voz temblorosa —. Quiero terminar la primaria, cambiar de forma, aprender a ser un buen hombre como papá, protegerte, molestar a Allie y Amy.
Limpio el borde de mis ojos.
—Oye, mocoso —bromeo —. Tus metas respecto a mí deberían ser muy diferentes.
Su rostro se ilumina con una sonrisa. Y no cualquier sonrisa, sino una sonrisa digna de un Karlsson.
—Siempre voy a molestarte, Allie —asegura y me saca la lengua.
Sacudo mi cabeza sin dejar de reír. Acaba de volver el Aden que amo.
—Y a mí siempre me dirás que anda mal —suplica mamá —. Júralo. Por favor, Aden.
Mi hermanito levanta su meñique y lo entrelaza con el de mamá.
—Lo juro, mamá.
Cierro la puerta lentamente y me alejo para darles un momento de privacidad. Creo en Aden, pero no confiaré en esa fantasma. Georgie demostró que son muy obsesivas con sus víctimas, no quiero lo mismo para mi hermano. Estaremos más pendientes que nunca.
Lo adecuado sería que Mila le regale un collar parecido al de Ronan. Todos en la familia deberían tener uno.
Mis pasos se detienen cuando llego a la habitación de Ronan. Puedo oír a la ducha mientras él toma un baño y mi corazón se retuerce. La distancia entre ambos es cada vez más dolorosa, pero aún no me siento lista para acabar con esta tortura.
Catalina debe creer que ganó. Le permitiré estar segura y después me encargaré de golpearla como ella lo hizo conmigo. Voy a encontrarla en su punto más vulnerable, ya descubrí una.
Le aterra Ronan. ¿Cuáles serán sus otras debilidades?
Suelto un suspiro agotador y apoyo mi espalda contra la puerta de Ronan. Mi cuerpo sufre su ausencia, mis labios necesitan sus besos pronto, mi piel anhela ser tocada por él. Sin embargo, el pensamiento de que Logan vendrá inunda mi cabeza. ¿Cómo reaccionará Ronan cuando lo sepa? Dioses...
—¿Qué haces masturbándote en la puerta? —pregunta Ellie.
Abro mis ojos de golpe y veo a mi prima. Sus ojos azules resplandecen con diversión, hay una mueca en sus labios. ¿De verdad creyó que estaba tocándome? Aunque la posición de mi mano sobre mi estómago hace creer que sí.
—¡No me estoy masturbando! —grito.
Escucho la risa de mis tíos y mi cara arde. Dioses, apuesto a que Ronan también oyó eso. Rápidamente me alejo de su puerta para regresar a mi habitación. No quiero que se haga ideas absurdas. Ellie me sigue.
—Tranquila, tigresa. Solo bromeo —dice en tono alegre —. ¿Cómo te sientes?
Me encojo de hombros.
—Mal.
—Lo supuse, que tonto de mi parte preguntar —Niega con la cabeza —. Estos días fueron una mierda estresante y pensé que podríamos salir a divertirnos. Solo nosotras, nada de Ronan, Tristan e incluso Roy. Merecemos un descanso, ¿no lo crees? Beber, tontear como cualquier adolescente. ¡Una salida de primas!
Me río.
—No podemos salir de noche, recuerda las reglas —Hago una mueca —. Nuestros padres no lo permitirán.
Ellie rueda los ojos.
—Esta vez harán una excepción por ti para hacerte feliz —asegura —. Saben que estás deprimida por lo sucedido con Catalina. ¿O tú no tienes ánimos?
Dudo.
—No lo sé, Ellie.
La rubia se acerca y mira directamente mis ojos verdes.
—Escúchame bien, bruja estúpida —espeta —. Vete a la mierda y haz que regrese mi prima. ¡Esta Allie es muy aburrida! Prefiero a la ninfómana que se follaba a todos los chicos calientes.
Aparto su mano de mi cara.
—¡Ellie!
—Lo siento —Se disculpa —. Si tú estás triste, el resto de la familia también. Regresa, Allie.
Observo la puerta por dónde desaparece mientras mi corazón se hunde dentro de mi pecho.
—Yo no quisiera irme nunca, Ellie —Le susurro a la nada.
💚
Ronan.
Seco mi cabello húmedo con la toalla y termino de vestirme. Debo encontrarme con Arianne en su oficina pronto, estoy ansioso. El hecho de que nuestra conversación sea sobre Allie, hace que mi incertidumbre crezca.
Allie...
Observo la cama de tamaño King y muerdo mis nudillos. Esta será una noche larga y angustiante. Tengo que encontrar la forma de no caer a mis viejos hábitos, no quiero repetir esos eventos dónde no podía dormir. No debo depender de Allie emocionalmente.
El lazo tiene que favorecerme, mis emociones no van a dominarme. Sé que esta no será la única vez que me hallaré en una situación difícil. Vendrá obstáculos peores y más dolorosos. Mi fortaleza me mantendrá de pie.
Me acerco a la ventana para echarle un vistazo al vehículo de Roy. Me cedió la llave para buscar el cuadro cuando todos duerman. No quiero que Allie lo vea, no la terminé aún. Espero darle un poco de felicidad con mi arte, ella merece el mundo a sus pies.
Paso una mano por mi cabello alborotado antes reunirme con Arianne en su oficina. El único ruido en la Fortaleza proviene desde la habitación que ocupa Melissa. Está escuchando I Don't Love You de My Chemical Romance. Tiene buenos gustos.
—Puedes pasar, Ronan —Suena la suave voz de Arianne antes de que toque la puerta.
Mi rostro no oculta la sorpresa cuando veo a Asher al lado de su esposa, aunque comprendo su presencia. Hablaremos de su hija.
—Buenas noches —saludo.
—Adelante, nadie podrá escuchar lo que hablamos aquí —afirma Arianne —. Es insonora.
Dato anotado.
Arianne señala la silla frente al escritorio y tomo asiento. A los treinta y ocho años, la señora Karlsson es una belleza clásica. Con cabello castaño claro ondulado en grandes olas, pómulos altos y una figura delgada, es probablemente la mujer más bella que conozco junto a Allison. El color verde esmeralda en sus ojos son hipnotizantes.
Te da la sensación de querer mirarla todo el tiempo.
—Allison no se ha tomado bien el ataque de Catalina, mucho menos lo de Aden —expone —. Se culpa a sí misma.
Le doy una inclinación de cabeza y observo un segundo a Asher. Él se mantiene de pie con los brazos cruzados sobre su pecho.
—Yo lo sé y tú también. Pero Allison, bueno, ella es... —Se detiene y agita su mano en el aire—. No importa.
¿Cómo que no importa? Cualquier mínimo detalle sobre Allison importa.
—¿Qué? —pregunto, sintiéndome lo suficientemente cómodo como para presionarla.
—Protectora —murmura Arianne suavemente y luego añade —: Muy parecida a su padre en ese aspecto.
Asher suelta una risa ronca.
—Su papel de mártir lo heredó de ti —masculla, frustrado —. Tienes la costumbre de culparte por todo.
Arianne tuerce los labios con molestia, pero no contradice a su esposo.
—Tiene razones para sentirse así. Ella solo quiere protegerte, Ronan. Solía hacer lo mismo cuando era una niña y cometía errores.
—Ella no es responsable por las acciones de Catalina —murmuro.
Arianne cierra los ojos brevemente.
—Lo sabemos, pero el sentimiento de culpa perdura —prosigue mi suegra —. Su maldición no ha sido nada fácil, menos ahora que Catalina está tomando control como prometió.
Asher alcanza la botella de whisky para llenar el vaso de vidrio. Vaya, me sorprende el movimiento. Luce extremadamente preocupado y estresado. Lo que sucedió con Aden hace dos horas empeoró la situación.
Esta familia jamás tendrá un descanso.
Arianne mantiene sus ojos en mí mientras Asher se dirige a la ventana. No nos mira, solo bebe en silencio.
—Asher y yo éramos tan jóvenes cuando quedé embarazada por primera vez. Me preocupaba que no fuésemos capaces de ser buenos padres, pero cuando Allison nació pusimos lo mejor de nosotros. Para Asher fue muy fácil cuidar a nuestra hija y lo envidiaba por ello. Él es mi roca, mi ancla. Nos protege con su vida, nos proporciona lo necesario —Se ríe por un momento ante los recuerdos, la alegría muy evidente en sus ojos verdes —. Siguió haciéndolo incluso cuando Catalina maldijo a Allison, su amor hacia ella nunca cambió.
Asher bebe otro trago de su whisky.
—Y tampoco cambiará —dice él.
—A medida que pasaba el tiempo y Allie crecía fue muy difícil contenerla. El único que podía calmarla era su padre —Sacude la cabeza y limpia una lágrima perdida —. Tenía un lado oscuro e imprudente. Hizo cosas que no eran normales para niñas de su edad.
Un escalofrío me recorre.
—Mató a animales cuando ella los ama —Habla Asher con voz ronca —. Quemó la casa de un hombre que nunca le hizo daño. Hubo una época dónde enloqueció totalmente, Allison tenía solo diez años.
»Se volvió más rebelde, tenía ataques de ira y pesadillas. A los once años dejó la escuela, pero regresó a los doce cuando estaba más calmada. Sus actitudes cambiaban de un día para otro. Allie no parecía nuestra hija, un demonio vivía dentro de ella.
Arianne oculta la cara entre sus manos.
—Siempre fuimos muy sobreprotectores con ella, sobre todo, Asher —añade.
Su tristeza es tan potente que me dan ganas de llorar a mí también.
—Si fuera mi hija, tendría la misma actitud —murmuro.
—Asher es muy irracional y sobreprotector con Allison. Demasiado diría y hay un fuerte motivo.
Mi incertidumbre se intensifica.
—¿Qué motivo?
—Yo —responde —. Cometió un error muy grande cuando era solo una niña.
Rezagos de ansiedad se abren camino en mis músculos. Maldición, esto no pinta nada bien.
—No comprendo. ¿Qué pudo haber hecho Allie cuando era una niña? —pregunto, pero la respuesta me asusta.
Arianne no me mira, sus hombros tiemblan por el primer sollozo.
—Quiso matarme —susurra.
Mi corazón late tan fuerte en mis oídos que no creo haber oído su respuesta con exactitud. ¿Qué? El vaso que Asher sostiene revienta en sus manos, sus facciones se endurecen mientras se acerca a Arianne para consolarla.
—Mierda...
No puedo creer que Allie haya intentado matar a su propia madre. No me lo creo por nada.
—Todos los días intenté convencerme que no era ella, pero no logro olvidar esa expresión en su cara —musita Arianne —. Me observó como si me odiara.
—Eso no es cierto —digo —. Allison te ama.
Arianne me tiende su mano y la observo con el ceño fruncido.
—¿Puedes ver lo que ha sucedido en el pasado? Mira mis recuerdos.
—No sé si funcione —advierto, pero acepto su mano.
Una intensa sensación de hormigueo aparece en mi muñeca, por mi brazo y estalla en mi cabeza. La imagen proyecta a Asher y Arianne dormidos en una cama. Él la abraza mientras ella se acurruca más cerca. La única luz que ilumina la oscura habitación es la luna.
De repente, la puerta chirria cuando se abre lentamente.
—¿Mami?
Veo a una pequeña Allie vestida con su pijama blanco de conejitos. Luce tan linda e inocente. Sus grandes ojos verdes transmiten el tipo de tristeza que podría romper a cualquiera.
—¿Mami?
Nadie responde.
Poco a poco la luz de la luna ilumina el objeto que sostiene Allison.
Es un cuchillo.
Un rayo de miedo me golpea mientras las imágenes continúan reviviendo en mi cabeza. Sus ojos ya no son verdes, solo rojo y lleno de odio. Los pies descalzos caminan más rápido hacia su madre y después la apuñala justo en el pecho. El grito aterrador que suelta Arianne lastima mis oídos y rápidamente aparto las manos.
Mi pecho sube y baja por la adrenalina, mi cuello cubierto por el sudor. Esa niña no era mi Allie.
Era Catalina.
—Sé que cometí un error al separarlos, pero no es seguro que duerman juntos —farfulla Asher —. A diferencia de Arianne, tú jamás podrías recuperarte de esa herida.
Carraspeo, el shock aún me tiene muy aturdido.
—¿Allie sabe que esto sucedió?
Arianne niega con la cabeza.
—Ella muchas veces no recuerda las cosas que hace Catalina —musita —. No podría vivir con esto si lo supiera.
Asher eleva una ceja cuando agarro la botella y bebo sin pudor. El líquido caliente quema mi garganta, pero logra tranquilizarme. Quiero que esa imagen se borre de mi cabeza.
—Tiene sentido que Aden haya sido concebido después de mucho tiempo —comento —. Ustedes no se sentían listos para otro hijo.
Asher exhala una respiración pesada.
—Tampoco vivimos aquí por esa razón —agrega mi suegro —. No queríamos a Allison cerca de sus primos, era un peligro.
Me froto la parte de atrás de mi cuello. Trato de ahogar la pena y la amargura que quema mi garganta. Allie estuvo alejada casi toda su infancia de los otros niños.
—Las habitaciones de Aden y Amy tienen seguros —espeto.
Arianne asiente.
—Catalina puede aparecer en cualquier momento y no hay forma de controlarla. Su veneno cada vez se expande más en Allison, no sabemos cuándo podremos detenerla.
—Lamento que hayan pasado por todo eso.
—No queremos que te sientas mal, Ronan —dice Asher —. Sabemos que Allison quiere alejarte como sea y probablemente lo siga haciendo. Debes ser paciente.
El dolor abunda en mi torturado corazón.
—Entiendo, pero ella está permitiendo que Catalina gane.
—Lo que siente por ti es mucho más fuerte que el odio de esa bruja —Arianne sonríe —. Ella volverá a ti.
💚
Es casi medianoche cuando me acerco al auto de Roy en busca de lo que me pertenece. Escucho a los grillos cantar, los búhos se ubican sobre los árboles, mirándome atentamente. La vista del inmenso bosque frente a mis ojos provoca escalofríos en mi piel. Me siento intimidado, observado.
Hago de cuenta que nada me perturba y desbloqueo el auto de Roy. La sonrisa viene a mis labios mientras veo el precioso retrato de Allison cubierto. Estará listo en menos de una semana.
Recojo el retrato, vuelvo a activar el seguro del auto justo cuando una horrible picazón recorre mi espalda. Una risita rompe el silencio detrás de mí. Me giro para ver a unos centímetros lejos de la barrera protectora a Georgie.
Wiii.
Dios santo, luce como si alguien hubiera pasado una trituradora por su cara. Los huesos sobresalen de su piel en un patrón aleatorio. Su ropa está desgarrada y está descalza. Aunque el agujero en su cabeza siempre me pondrá los pelos de punta.
—¿Otra vez tú? —me quejo con un gemido —. Consíguete una vida y déjame en paz.
Georgie se acerca un poco más, pero retrocede cuando su piel empieza a chamuscarse. ¿Qué puso Mila para evitar el acercamiento? Esa mujer es asombrosa.
—Nunca serás feliz —habla entre dientes —. Tú perteneces al mismo lugar que nosotros. Oscuro y frío.
La temperatura baja a cero grados.
—¿Qué lugar?
—No puedo decirlo, pero ten en cuenta que ella jamás te amará. No cuando descubra quien eres realmente.
Me quedo quieto por sus palabras. Me encojo de miedo, incapaz de resistir la tentación de seguir escuchándola. Georgie sabe mucho, pero no está dispuesta a decir demasiado.
—¿Y qué soy? —pregunto.
Ella sonríe fríamente.
—Ya lo sabes, pero no quieres admitirlo.
Me concentro en controlar mi respiración y dejar que mi corazón regrese a la normalidad cuando le doy la espalda. No haré esto de nuevo. Ella solo envenena mi cabeza con ideas absurdas que me lastiman después.
—No puedes ser feliz, Ronan.
Ingreso a la Fortaleza con el corazón marchito y más dudas que nunca. Cada vez que me encuentro con esa estúpida fantasma solo hace que mis dudas sean inmensas. Mi vida es un acertijo difícil de descifrar y yo tengo un cerebro de cacahuate.
No entiendo ni un carajo.
Paso por la habitación de Roy antes de ingresar a la mía. Toco la puerta y soy recibido por un pelirrojo vestido solo en bóxer. La sonrisa en su cara me hace sonrojar, Asa está con él.
—Hombre, no pensé que aceptarías mi propuesta —coquetea Roy.
Pongo los ojos en blanco y le entrego las llaves de su auto.
—Solo vine a devolvértelos.
—Cómo digas —Abre la puerta ampliamente y señala dos botellas de vodka. Río de inmediato ante su sugerencia —. Será una noche larga, ¿no quieres relajarte? Hablemos de estupideces como buenos amigos, ya mañana puedes seguir con el cuadro. ¿No, Asa?
El vampiro rarito asiente sin apartar sus ojos de la televisión.
—Eres bienvenido al club, Ronan.
Quise tener amigos desde que era un niño. ¿Por qué desaprovecharía esta gran oferta? Entro sin dudar y Roy cierra la puerta.
—Gracias por ser mi amigo.
Sacude la mano hacia mí.
—Yo querría lo mismo si estuviera en tu lugar. Estamos aquí para apoyar, Ronan. Somos tu familia.
Dejo el cuadro en una esquina e ingreso. Asa mantiene el ceño fruncido, sus manos en el control del vídeo juego.
—Hey —saluda sin mirarme.
—Hey —digo.
—¿Juegas? —pregunta y señala la pantalla plana dónde God Of War se reproduce.
Asiento.
—Sí, pero no tengo ganas.
—Como quieras —Aparta los ojos y continúa con lo suyo.
Roy se ríe y me tiende un vaso lleno de vodka. Levanto una ceja y el pelirrojo se encoge de hombros.
—Lo necesitas más que yo —masculla —. Un trago no te hará daño.
Acepto el vaso mientras me ubico en el sillón más cercano. Roy le sube el volumen al equipo de música y se sienta a mi lado. Asa está muy concentrado en su juego y bebe algunos tragos cuando tiene oportunidad.
—¿Qué edad tiene él? —cuestiono.
—Catorce, pero actúa como si tuviera veinte —Se burla Roy —. Ya ni siquiera es virgen, lo hizo con una chica de su instituto.
Asa pone en pausa el vídeo para lanzarle una almohada a Roy.
—Gracias por respetar mi confianza, imbécil.
El pelirrojo disfruta un trago de su bebida con hielo.
—Oh, vamos. Ronan es parte de la familia ahora, acostúmbrate.
Sonrío, agradecido con él.
—¿Nadie aquí espera a su compañera?
Asa pone su atención en nosotros.
—Raven es la única que siguió las tradiciones —comenta el rubio —. Y Ellie, bueno, dudo que espere durante mucho tiempo más. La sangre de licántropo llama a su naturaleza. Somos animales sexuales.
Arrugo la nariz.
—Eres demasiado joven.
Me da una expresión fastidiada.
—No soy un niño inocente.
Ya me di cuenta, este niño tiene más experiencia que yo. Más rondas de tragos vienen, ni siquiera me doy cuenta de que terminé dos vasos. Mi cabeza está mareada, el ataque de risa me supera. Escucho las bromas que hacen Asa y Roy. No imaginé que el pequeño vampiro tendría sentido de humor. Siempre actúa tan frío.
—¿Sabes cuál es mi miedo a esto? —Hablo con la voz arrastrada —. No volver a tenerla en mis brazos. La siento cada vez más lejos de mí.
Asa resopla.
—El amor es una mierda...
—Me siento así con Sadie —confiesa Roy —. La echo de menos, aún estoy esperando que me dé la noticia.
Asa hace otro gesto de repulsión.
—Te dije que no era buena idea relacionarte con la humana.
—Hey —Lo señalo con un dedo —. Vas a sufrir con nosotros cuando te enamores de una chica o chico. Nadie se salva de un flechazo.
Asa bebe sin pudor el vodka.
—Lo sé, pero no quiero pensar en eso todavía. Menos cuando los veo a ustedes como idiotas.
Pienso en la sonrisa de Allie, sus labios, su cuerpo desnudo, el sentimiento de paz que me transmite cuando estamos juntos. Joder, estoy acabado.
—Vale la pena sentirse así —murmuro.
Don't Stop Me Now de Queen suena y Roy le sube el volumen. Empezamos una especie de karaoke que nos hace reír como idiotas. Asa observa el espectáculo con incredulidad. Después de cantar varios minutos, Ellie pide que nos callemos, pero hacemos de cuenta que no escuchamos nada.
¿Acaso nadie puede divertirse aquí?
—Creo que ha sido suficiente por hoy —Roy me arrebata la botella de vodka mientras estallo en risas —. Amigo...
—Solo un trago más —No paro de reír —. ¡Lo necesito!
Asa maldice.
—Oh, mierda...
—Dámelo —insisto, arrebatándole la botella —. Solo un traguito, Roy. ¡Un trago no le hace daño a nadie! ¡Tú lo dijiste!
Roy observa a su primo quien tiene los labios apretados para reprimir su risa. Asa me mira como si fuera un payaso. Doy pena.
—Llama a Allison —demanda Roy.
Asiento con entusiasmo, mi corazón salta de alegría.
—Sí, sí. Llámenla —sonrío —. No me quejaré.
Asa sacude la cabeza antes de retirarse mientras Roy, y yo peleamos por la botella de vodka. Finalmente, él gana y caigo al suelo cuando no puedo mantener el equilibrio. Siento un cosquilleo en el estómago, un precioso alivio. Definitivamente beberé más seguido, ni siquiera recuerdo a la fea de Georgie.
Mi mundo solo es paz y felicidad.
—Él no es resistente al alcohol como tú —oigo su hermosa voz —. Debiste detenerlo.
—Lo intenté, pero el hombre es terco.
—Quiero matarte, Roy.
Me apoyo sobre mis codos en el suelo para observarla mejor. Allie está usando una de mis tantas camisetas que se traga su cuerpo. Está hermosa, ella siempre ha sido hermosa. Esbelta como una bailarina. Senos grandes, cintura estrecha...
Jesús, Ronan, recobra la compostura.
Esto me golpea de repente, la compresión de que ella va a cambiar. Físicamente, seguro, pero también en formas que no podré evitar. Ya está cambiando por culpa de Catalina.
—Mejor mátame a mí, hermosa —susurro —. Pero cómo tú sabes.
Allie se cubre la cara mientras Roy estalla en carcajadas. Estoy avergonzándola, ¿y? Aprovecharé esta oportunidad. Ella está aquí, no dejaré que se vaya.
—Oh, Dioses... —Allie protesta y me ayuda a ponerme de pie. Inmediatamente me aferro a ella, abrazándola contra mi cuerpo —. Dime que esto es una broma.
—Nop —inhalo su cabello —. Me alegra que haya sucedido. Es la única manera de tener tu atención, ¿eh?
Roy aclara su garganta.
—¿Quieres que te ayude a llevarlo en su habitación? —ofrece.
Allie niega.
—Estaremos bien.
Pretendo alcanzar la botella, pero Allie me da un manotazo mientras me saca fuera de la habitación. Sus manos están en mi cintura, mis brazos en su hombro mientras caminamos. Melissa y Raven observan boquiabierta la escena. ¿Acaso nunca vieron un borracho en su familia? Lo dudo, el alcohol no hace efecto en ellos.
Qué aburrido.
Allie abre mi puerta y después me empuja hasta que caigo en la cama. Mi cabeza sigue dando vueltas, mi estómago está encogiéndose. Auch. Mi garganta sufre.
—No me digas que quieres vomitar —protesta.
Gimo y me cubro los ojos.
—Me duele mucho la cabeza.
—Iré a buscar agua —susurra, pero atrapo su mano antes de que vaya más lejos.
Veo el pánico en su hermosa mirada, ella sigue asustada de estar sola en el mismo espacio que yo. Cree que Catalina regresará para herirme. Mi chica se preocupa por mí.
—Te extraño. Quédate —suplico.
Ella trata de apartarse, pero mis brazos se niegan a soltarla.
—Estás borracho, Ronan.
—Borracho por ti, Allison.
Su rostro se contrae por el dolor.
—Por favor, detente. Haces que todo sea difícil —murmura.
Mi mano alcanza el broche de su cabello y dejo que las hermosas ondas oscuras caigan sobre sus hombros. El simple hecho de mirarla alivia mi corazón.
—Tú haces que sea difícil con esta distancia —digo —. No vas a herirme, no soy el monstruo que ella intenta hacerte creer. Quiero cuidarte.
Niega con la cabeza.
—Necesitas dormir.
—No puedo hacerlo sin ti, hermosa.
Sus ojos verdes arden en los míos.
—Tengo que irme.
—¿A él también lo alejabas por su seguridad? —suelto —. ¿A él lo querías lejos?
Los celos me inundan rápido y fuerte. Sabe que hablo de Logan, sabe que me refiero al Ken.
—Es diferente.
—Sí, es diferente —sonrío fríamente —. Él no es tu compañero, pero yo sí.
Aparta la mirada.
—Catalina no quiere muerto a Logan.
—Por supuesto que no. Tu ex le agradaba mucho, ¿no? Solo estás con quienes ella aprueba.
El dolor y la ira brillan en sus ojos, las mismas emociones que he visto aquella noche que le hablé acerca de mi infancia.
—No hablaremos así, estás ebrio.
—Los ebrios decimos la verdad —presiono más fuerte —. Y esta distancia crecerá más entre nosotros cuando él regrese. Sigue loco por ti como la primera vez, es tu mejor amigo. Buscarás en Logan algo que yo no puedo darte.
—¿Qué se supone que significa eso?
—No va a consumirte como ella te hizo creer —espeto —. No va a lastimarte. Es la paz que necesitas, ¿no? Logan no está roto como yo.
La oscuridad de ese pensamiento, de lo que podría haber sido Logan en su vida si yo no existiera, se alberga entre nosotros.
—No puedo seguir con esto —musita simplemente.
Sale de la habitación, me hundo en la cama y presiono mis manos contra mis mejillas calientes. Mis ojos pican con vergüenza y rabia. ¿Por qué no puedo controlar esta ira? Hablo sin pensar y lo arruino más. Mi poca paciencia solo aleja a Allison.
La decepción que siento es tan fuerte que puedo saborearlo. Amargo y frío.
Me odio.
💚
Allie.
Me quedo mirando el techo, sin tener las ganas suficientes para dormir. La discusión que tuve con Ronan ha quedado grabada en mi cabeza. Todos en mi familia escucharon, pero nadie se involucró. Papá siempre ha dicho que la relación entre los compañeros solo les incumbe a dos. Mi abuela Aria solía meterse en su relación con mamá y él sabe cuán incómodo es.
La única palabra que me viene a esta situación es mierda.
Me siento triste, avergonzada, abatida por todo. La carga nunca se sintió tan pesada sobre mis hombros.
Ronan tiene razón.
Catalina juega con mi mente.
Mi única opción es dominar mis emociones. Me siento débil y vulnerable. Pronto recuperaré mi autoestima, pero ahora solo necesito alejarme. Necesito espacio. No quiero que mi familia vea en el desastre que me convertí.
No quiero que me miren con lástima.
No quiero compasión.
¿Y sobre Logan? No puedo controlar lo que Ronan piensa de él. Ambos tenemos que trabajar en nuestras inseguridades. Esta relación necesita funcionar como sea.
Me muevo en la cama justo cuando oigo un quejido y le echo un vistazo al reloj. Dos de la madrugada. Ronan tampoco puede dormir. Dioses, esta es nuestra primera noche separados desde que nos conocimos. ¿Por qué es tan complicado? Ya echo de menos su calor, sus brazos protectores a mi alrededor.
Ronan...
Cuando el segundo quejido de dolor suena, corro sin dudar hasta él. Abro la puerta, sorprendida por lo que veo.
Ronan se encuentra inerte en la cama, todo su cuerpo tieso mientras mira fijamente el techo. Una dolorosa sensación me abruma al verlo tan perdido. No puede hablar, apenas logra pronunciar un quejido.
Parálisis de sueño.
—¿Ronan? —pregunto.
Mi corazón está latiendo con fuerza, mi pecho agitado, el miedo y la adrenalina corren por mis venas mientras estoy de pie justo en el umbral. No sé cómo reaccionar, nunca lo vi de esta manera.
Calmo mi respiración desbocada y me acerco a mi compañero. Aparto el mechón sudoroso de su cabello, le digo palabras reconfortantes mientras aprieto su mano. Él mueve sus labios, pero nada sale. Oh, dioses. Luce aterrado.
—Estoy aquí, cariño —Le susurro —. Te tengo, ¿me oyes? No estás solo.
Finalmente, la tensión que abunda en sus músculos se relaja y lo abrazo con fuerza. Su cuerpo está temblando, su pecho desnudo lleno de sudor. Se niega a soltarme.
—Allison, yo...
—Shh... está bien —Trato de tranquilizarlo —. Soy yo.
Enrollo mi cuerpo contra el suyo, deslizando mi mano por su abdomen. Siento los latidos frenéticos de su corazón, el pánico persiste en cada parte de él.
—Lo siento —Se disculpa, abatido —. No me pasó en mucho tiempo.
—No te preocupes.
Me abraza más a él, los temblores poco a poco desaparecen. Mi corazón tiene espasmos y mis pulmones se agitan debido a las inmensas ganas de quedarme. Quiero abrazarlo el resto de la noche.
—¿Vas a quedarte? —suena asustado.
Miro sus ojos cansados, él no logrará dormir si no me quedo. Yo tampoco.
—¿Quieres que me quede?
Traga saliva.
—Sí.
¿Y si Catalina aparece? ¿Tratará de matarlo nuevamente? Abro la boca para negarme, pero su expresión de pánico me detiene. Él me necesita.
—Entonces no hay nada más que decir —contesto.
Meto la cara en la unión de su cuello y hombro. Respiro el aroma de su piel, sintiendo los latidos de su corazón contra mi palma. Este es el único lugar dónde pertenezco y quiero estar.
Sus brazos.
💚
Despierto temprano al día siguiente. Las sábanas son una capa protectora de suavidad, caliente por el calor del cuerpo de mi compañero quien duerme a mi lado.
Catalina no apareció.
Gracias a los dioses.
Descanso más cerca de Ronan, paso la mano sobre su pecho hasta su abdomen. Miro su cara, todos los planos masculinos y ángulos compensados por sus cejas oscuras. Rozo los dedos sobre sus labios y su mandíbula. Se mueve y sus ojos se abren. Ojos hermosos de color chocolate me contemplan con alegría.
—Hola —murmuro.
—Es agradable despertar y verte aquí —dice.
Sonrío, él acaricia mi mejilla con su pulgar.
—Es agradable estar aquí —admito.
—Lo de anoche... —empieza, pero lo corto.
—Estabas ebrio, no te disculpes —susurro.
Sus mejillas se sonrojan por el calor de la mañana.
—Fue vergonzoso. Lo siento, nunca bebí tanto.
Me río al recordar su expresión.
—Te veías muy lindo.
—Tu familia sabe que tomé de más —Gime —. Piensan lo peor de mí.
—Lo dudo.
—¿Sería mucho pedir que me trajeras el desayuno? —implora con un mohín —. No me atrevo a mirarlos.
Ay, mis tíos avergüenzan a cualquiera con sus comentarios fuera de lugar.
—Está bien.
Lleva el dorso de mi mano a sus labios y besa cada dedo.
—Gracias por quedarte.
Sus ojos vagan por mi rostro y mi corazón continúa su búsqueda para salirse de mi pecho.
—Quise quedarme, Ronan.
Su cara se ilumina con una sonrisa.
—Quiero hablar contigo más tarde. ¿Bien?
Asiento.
—Bien.
Me besa en la frente.
—Ve por mi desayuno, hermosa.
—¿Cuál es la palabra mágica?
—¿Por favor?
Me río y salto fuera de la cama.
—Correcto, ya vuelvo.
💚
Me reúno con mi familia en el comedor. Ronan está tomándose una ducha para tratar de aliviar el dolor de cabeza. Pobre chico. Apesta tener resaca.
—Buenos días, cielo —saluda mamá.
Le sonrío.
—Hola, mamá.
El resto de mi familia está cómoda en la mesa, Amy muy hambrienta mientras bebe con impaciencia su biberón en el regazo de mi padre. Dejó de tomar los pechos de mi madre y me parece genial. Ya es grandecita.
—¿Qué pasó con Ronan? —Se burla Roy.
Lo observo con molestia.
—Ya sabes la respuesta, idiota.
Mi tío Andrew mastica su panqueque con una sonrisa divertida.
—Es chistoso cuando está ebrio.
Relleno la taza con café, ignorando las risas de mi familia. Ronan fue inteligente cuando decidió no bajar, haría lo mismo en su lugar.
—Por favor, no lo molesten —pido.
Melissa ríe con fuerza.
—¿Ya se reconciliaron? Durmieron juntos nuevamente.
Me encojo de hombros, nadie me reprocha ese hecho.
—Prometí que hablaría con él.
Mamá me ofrece una expresión de puro amor.
—Eso es genial. ¿Por qué no se une a nosotros?
—Prefiere que le lleve el desayuno.
Papá acaricia la cabeza de Amy.
—Hazlo y regresa aquí —ordena —. Tenemos que hablar.
Pongo varias tostadas en el plato y lo acompaño con café negro. Sé que a Ronan les gusta. Mastico una magdalena vegana cuando regreso a la habitación de mi compañero. Él terminó de bañarse a tiempo.
—Bueno, gracias —Ronan está de pie en la puerta del dormitorio, su pecho desnudo y su pijama colgando bajo en sus caderas.
—De nada —respondo —. No puedes esconderte por siempre, ¿sabes?
Él sonríe. Es la sonrisa con un toque de malicia que no he visto y que derrite cualquier recelo aún metido en mi corazón.
—Sé que tus tíos van a molestarme y prefiero ahorrarme el incómodo momento.
—Me parece justo. Ellos son muy... infantiles.
Niega con la cabeza y me quita la bandeja después de darme las gracias. Lo veo darle el primer sorbo al café, satisfecho cuando la cafeína pasa por su garganta.
—¿Suele suceder a menudo? —pregunto.
Él suspira. Entiende a qué me refiero.
—Sí, pero se detuvieron cuando empecé a dormir contigo.
La culpa llega inevitablemente.
—Yo.... —El nervioso tartamudeo ha vuelto con fuerza.
—No voy a presionarte de nuevo. ¿De acuerdo? —Él detiene cualquier justificación —. Anoche fui un idiota contigo y no merecías nada de eso. Quiero que regreses a mí cuando estés lista.
Asiento, aliviada por su cambio de actitud. Anoche no parecía él por la forma que habló de Logan. Sonaba tan celoso y resentido.
—Gracias por ser paciente —digo.
Se inclina hacia adelante en mi espacio. El olor a loción de hombre impregna en mi nariz.
—Y por favor, no huyas de mí. Hablemos, Allison. ¿Me lo prometes?
—Está bien.
Mastica la tostada, sus ojos marrones en mí siempre. Se frota el pulgar en el labio inferior para alejar una migaja. Es una distracción increíble.
—¿Te veo después? Tu familia está esperándote, yo debo ir al hospital con mamá.
—¿Puedo acompañarte hoy? —pregunto, ilusionada.
Sonríe.
—Claro, hermosa. Ella te echa de menos.
La sonrisa estúpida permanece en mi cara cuando regreso al comedor con mi familia. Me ubico en mi lugar habitual y me sirvo plátanos con avena.
—Brent llamó esta mañana —informa mamá —. Es sobre Logan.
La cuchara queda suspendida en mi boca y comparto una mirada con Raven.
—¿Qué pasó? —inquiero.
Papá suspira.
—Él aún sigue en nuestra casa, pero ayer sucedió algo grave.
La tensión se extiende en mis brazos.
—¿Qué cosa?
—Varios hombres lo atacaron por proteger a Logan.
—¡¿Qué?! —me pongo de pie —. ¿El tío Brent está bien?
Mamá asiente.
—No pasó a mayores, pero con esto quedó demostrado que Logan corre peligro.
El miedo que siento es oscuro, más negro que cualquiera que haya conocido. Lo meto en lo profundo, no queriendo que mi familia lo perciba.
—¿Dónde está Logan? —indago —. ¿Se encuentra bien?
Es Raven quien me responde.
—Él llegará dentro de unas horas. Sabe demasiado sobre nosotros y el señor de las sombras. Lo mejor es ofrecerle refugio.
Oh, mierda.
—Díganme que es una broma. ¿Mi ex vivirá aquí?
—Ronan lo entenderá —asegura mamá.
Mis tíos se ríen por mi incrédula reacción. ¿De verdad ella cree que sí? Anoche Ronan demostró que se siente amenazado por Logan.
—¿Estás de acuerdo con esto? —Miro a mi padre.
Él frota la espalda de Amy.
—Está traicionando a su familia por nosotros. Es lo justo.
—No puedo creerlo...
—Allie —intercede mi madre —. Tus problemas amorosos pueden esperar.
¿Es en serio? Muerdo mi lengua para evitar decir más estupideces y mastico mi desayuno. Uh. Me imagino el ambiente incómodo cuando Logan se instale aquí. Explosión de testosterona. Mi historia ficticia se vuelve realidad.
Logan todavía me ama, Ronan es mi compañero.
Mejor me muero y dejo que Catalina me posea.
—Raven y yo iremos a recibirlo en el aeropuerto —informa mi tío Ashton —. No queremos arriesgarnos a que lo maten.
—Otro miembro en la familia y es muy guapo —dice Ellie en tono seductor —. Puedo darle la bienvenida.
Mi tío Andrew le avienta una servilleta, pero no le presto atención.
Mi ex vivirá aquí.
Mi actual novio también.
Ambos bajo el mismo techo que yo.
Genial.
💚
Toco la flor que Raven me obsequió mientras permanezco sentada en el balcón de mi habitación. Pensé que mi relación con Ronan mejoraría, pero dudo que sea así con el regreso de mi ex. No tengo el valor de observarlo. Se perdió el desayuno y tendré que explicarle lo que está pasando.
—¿Princesa?
Miro sobre mi hombro para ver a mi padre parado en el umbral de mi puerta. Su sonrisa cálida provoca un vuelco en mi corazón. Es bueno verlo sonreír. No lo hace últimamente.
—¿Sí?
Levanta la mano y veo una de las pócimas que preparó Mila. Uh.
—Es necesario que lo consumas a diario —murmura —. El veneno en tu cuerpo necesita disminuir.
Mi garganta se hincha a causa del nudo.
—Dudo que ayude, pero voy a consumirlo.
Él suelta un suspiro agotador antes de acercarse a mí.
—Nunca fui fan de Logan, pero está ayudando a nuestra familia. No podemos darle la espalda.
—Lo sé, pero no deja de preocuparme —miro mis manos —. Ronan está celoso de él.
Papá se sienta a mi lado y juntos observamos el jardín de la mansión. Mis pequeños primos juegan con los perros y Amy.
—Cualquiera lo estaría en su lugar —sonríe papá —. Eres una Karlsson después de todo.
El rubor barre mis mejillas.
—Papá...
—Bueno, ya —Me tiende la pócima y hago una mueca —. ¿Sientes algo por Logan?
—Solo cariño —respondo inmediatamente.
—Entonces Ronan pronto se dará cuenta de eso —asume —. Es normal que sea territorial contigo. El lazo tampoco hace que sea fácil, pero tú debes poner de tu parte también. Recuérdale que solo él posee tu interés.
—Wow, papá —bromeo —. No pensé que tendríamos esta conversación. Siempre fuiste tan asquerosamente sobreprotector.
Él alborota mi cabello antes de acercarme a su cuerpo.
—Debo hacerme la idea de que ya no me necesitas.
¿Cómo puede decir eso? Seré su niñita hasta el final de mi existencia. A veces me agobia, pero quiero que siga haciéndolo. Es mi padre, el primer hombre más importante en mi vida.
—Siempre voy a necesitarte, papá.
—Y yo siempre voy a cuidarte, Allison.
—Lo sé, pero no olvides al resto del mundo por mí, papá. Quiero verte bien —musito —. No me agrada que estés estresado. ¿Cuándo fue la última vez que tuviste un descanso?
Silencio.
—Pasó mucho tiempo —niego con la cabeza —. Deberías ir a una cita con mamá, pasarla bien y recordar que estás vivo. Mereces divertirte.
—¿Quién es el adulto aquí?
Me aparto y me cruzo de brazos.
—Ahora mismo yo —sentencio —. Tú también debes ser cuidado.
La sonrisa de mi padre se borra cuando ve fijamente mi cara.
—¿Allie?
Una pequeña gota oscura se escurre de mi nariz. La bola de terror se enrolla en mi estómago cuando me encuentro con los ojos avellanas de mi progenitor. Solo hay pánico en su mirada, tanto pánico.
—Papá...
El tiempo se detiene y todo se disuelve a una profunda oscuridad cuando me desmayo en sus brazos. Lo último que escucho son sus gritos desesperados.
💚
En el instante que abro mis ojos, me encuentro con varias miradas sobre mí. ¿Y ahora qué diablos sucedió? Me toma por sorpresa ver a Mila y mi abuelo presentes en la habitación.
—Catalina aún no ha cumplido con la última fase, pero está muy cerca —expone Mila —. Allison resiste a la posesión porque no es completamente humana, otro ser ordinario no lo soportaría.
—Pierde el conocimiento porque está muy débil —añade mi abuelo —. Hay mucha toxina maligna en su cuerpo.
Las voces siguen mientras trato de orientarme. ¿Cómo todo empeoró tan rápido? No es justo.
—Solo falta catorce días para su transformación... —espeta mi padre, consternado.
—No creo que su loba haga mucho a estas alturas —La voz de Mila suena tensa —. Hay bastantes componentes tóxicos en su cuerpo por la intrusión de la bruja. Catalina puede matar a cualquier otra vida en su interior, incluso a su loba o... —No es capaz de finalizar la oración.
Las lágrimas caen de mis ojos. No hay posibilidad de otra vida en mi interior.
—¿Soy estéril? —Mi voz se quiebra —. ¿Estás tratando de decir eso?
El dolor revolotea por la cara de Mila, es la primera vez que se ve verdaderamente asustada y apenada.
—Sí.
Cubro mi boca con las manos.
—Oh, Dioses...
—El 50% de tu cuerpo ha sido envenenado y hay muy pocas probabilidades...
—¿Muy pocas probabilidades de qué? —Mamá se escucha angustiada y aterrada —. Explícate, Mila.
La bruja aparta la mirada y mi corazón se rompe aún más si eso es posible.
—Puede que no sobreviva al cambio de forma. Su loba está muy débil.
💚
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