Capítulo 54 (Final parte 1) ✴

22.4K 3.9K 3.1K
                                    

Ronan.

Hay un odio explosivo que irradia sin control de mi cuerpo. La furia es como combustible en mis venas, acelera los latidos de mi corazón y respiro con un solo objetivo: Matar a Catalina. Me hubiera gustado despedirme de mi madre o el resto de la familia Karlsson. Ellos me apoyaron cuando estuve en mi punto más bajo. Fueron el soporte que necesitaba para sentirme vivo.

Me enseñaron lo que significa ser feliz.

Y hoy debo despedirme de cada recuerdo que alguna vez disfruté, sentí y viví.

Debo decir adiós para tener un nuevo comienzo dónde no existe la luz.

Solo sombras.

Miro fijamente el camino ante mis ojos y lucho para contener la respiración mientras el dolor me destruye lentamente. He perdido una parte muy importante de mi alma y lo peor es que estaré obligado a sobrevivir sin ella.

No habrá sonrisas, besos, abrazos, suspiros y afecto.

Nada de Allison.

Trago saliva, reprimiendo las lágrimas antes de que broten. No puedo romperme porque eso implicaría retroceder y rechazar la única oferta que salvará a mi compañera.

No seré débil.

No me rendiré.

—Admito que estoy muy sorprendida —La forma fantasmal de Georgie aparece en mi campo de visión —. Estás aquí, cumpliendo sus deseos. Te subestimé. Creí que eras otro monstruo egoísta sediento de poder, pero sacrificarás todo por ella. La chica que amas.

Inhalo profundamente para alejar la sequedad en mi boca. Hay demasiado miedo en mi garganta. Demasiada confusión y horror.

—Él no me ha dado otras opciones.

La boca lastimada de Georgie me ofrece algo parecido a una sonrisa de tristeza y empatía.

—Nunca da opciones —masculla —. Juega muy bien sus cartas. Sabe cuándo moverlas y esperar atentamente a que des tu próximo movimiento. Te lleva al borde de la desesperación y luego te rindes por voluntad propia sin que él te obligue. Es un dios y nunca lo vencerás si no usas sus mismos trucos en esta guerra.

Tiemblo por dentro y fuera.

—¿Cuáles son sus trucos?

Georgie abraza el peluche de conejo.

—Ya lo sabes, Ronan.

Convertirme en un monstruo que aboga por sus propios intereses. Un antihéroe que no tiene la prioridad de salvar a los pobres habitantes de un pueblo, pero sí a liberar lo más preciado de su vida. Su alma gemela, la chica que le permitió respirar desde hace meses.

La chica que le enseñó a amar.

—Formaré parte de su mundo, me convertiré en lo que espera. Cualquier cosa si me otorga lo que necesito de él.

En simples palabras: haré un pacto con el diablo.

—Es un precio muy alto —dice la fantasma.

Un escalofrío me recorre la columna vertebral.

—No me importará pagarlo.

Me frunce el ceño como si fuera un idiota. Ella cree que mi acto es admirable, pero también un error. Iré al infierno y no habrá forma de salir.

—Hay un grave problema —murmura Georgie.

—¿Qué?

Su mirada es sombría.

Lazos MalignosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora