Capítulo 35 ✴

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Roy.

La vi en sueños más de lo que puedo imaginar.

La escuché llorar mientras me perdía en mis pensamientos. Sentí su angustia, su miedo y su dolor. Todas esas emociones a pesar de que nos separa millones de distancia.

Vi a Sadie cada vez que cerré los ojos.

Las imágenes me mostraron a ella vomitando, su cuerpo débil mientras intentaba comprender qué sucedía. Un ser está creciendo en su interior, alguien que lleva mi sangre. Tengo diecisiete años y probablemente me convertiré en padre.

Niego con la cabeza y paso mis dedos por las cuerdas de mi guitarra. Me considero uno de los chicos más listos, soy sabio, he tomado buenas decisiones a lo largo de mi vida. ¿Por qué la protección fue olvidada? Ahora Sadie carga una responsabilidad en su cuerpo y no está lista.

Hablamos hace horas, le dejé claro que ella puede abortar si así lo desea, pero todavía no está segura. Voy a acompañarla en cualquier decisión, también fue mi culpa y asumiré las consecuencias. No seré un imbécil como su ex. Estaré a su lado en todos los procesos de embarazo si decide continuar. Jamás se sentirá sola. Ella no es mi compañera, pero eso no será un problema en el futuro. Nada me detendrá de seguir queriéndola como lo hago.

Sadie se convirtió en una persona muy importante en mi vida.

—La conexión de mellizos está diciéndome que te sientes terrible —La voz dócil de Raven en la puerta detiene mis movimientos con la guitarra —. Siempre creí que tú eras más listo que yo, pero veo que me equivoqué.

Dejo la guitarra sobre la cama y espero que ella cierre la puerta antes de empezar a hablar. Apareció en el momento que más la necesitaba, Raven siempre tan oportuna.

—No todos somos perfectos como tú —digo.

Raven pone los ojos en blanco y se sienta a mi lado en la cama.

—Está bien, Roy —Me acaricia la espalda y apoya su cabeza en mi hombro —. Mamá y papá van a apoyarte. No tienes que estar asustado. Yo también te apoyaré, toda la familia lo hará.

Aprieto su mano en respuesta.

—La única que me preocupa es Sadie.

—Ella demostró ser una chica fuerte. Podrá elegir tener al futuro bebé o no, nadie va a negarle ese derecho. Es su decisión —me incita a mirarla y lo hago —. Tú serás un gran padre, Roy. Nunca dudes de tu capacidad.

Mi estómago se retuerce y mi corazón parece caer.

—¿Qué pasará cuando aparezca a quien estoy destinado?

Mi melliza me ofrece una sonrisa dulce y reconfortante.

—Te aceptará tal y como eres.

Mi corazón es constante y suave mientras cierro los ojos.

—No me siento en mis cabales, pero ayudaré con la invocación —farfullo —. Tampoco tengo ganas de asistir a clases mañana.

Raven enarca sus cejas rojas.

—La tía Melody no estará feliz contigo.

Me encojo de hombros.

—Ella entenderá que mi salud mental está primero, prefiero relajarme para la invocación. ¿Cuándo lo haremos?

La incertidumbre cruza los rasgos de Raven.

—Mañana mismo.

💚

Decido buscar a mis padres cuando al fin reúno el coraje. Los nervios me sacuden a flor de piel, me siento como el día que tenía catorce años y decidí hablarles sobre mi sexualidad. Al principio me sentí asustado y nervioso, pero mamá hizo que sea mejor. Papá solo escuchaba y observaba.

Lazos MalignosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora