Su reina por obligacion /LIBRO 1) COMPLETA

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Beatriz esa mañana había demorado en llegar al convento porque su dama de compañía nunca apareció en el bosque a buscarla con el carruaje, seguro por haber tenido problemas con los guardias de William para salir del castillo. Entonces tuvo que caminar bastante, exponiéndose en la aldea, solo tapándose con una capucha. Cuando llegó al convento, una estructura de piedra con muchas entradas, se sorprendió de ver menos guardias al frente, no como el día anterior, que tuvo que hacer malabares para entrar por una puerta ladeada, que accedía a un patio al aire libre en el centro del lugar. Así que esta vez repitió la operación, entró por el mismo lugar encontrando a una monja, a quien le pidió que le avisara al rey Darcy que deseaba verlo. La muchacha se vio bastante nerviosa como si tuviera algo que decirle, pero le dijo que esperara. Beatriz esperó y se desilusionó cuando más tarde la muchacha volvió, diciéndole que el rey estaba indispuesto y no deseaba verla. A ella le dio la impresión que mentía, como si alguien la hubiese mandado a negárselo y no le hubiese llegado el mensaje a Darcy, porque era extraña la actitud de del rey cuando hasta había aceptado un dialogo con su hijo el día de ayer. En fin, no podía entrar a la fuerza a buscar a Darcy, sino sería descubierta, se dijo deseando hacer lo contrario, así que al día siguiente regresó insistiendo verlo, a ver si esta vez sí lograba hablar con él, pero no fue así, porque otra monja más mayor, le contó la horrible noticia que más temprano todos los integrantes de Ganah habían partido porque el rey Darcy había intentado ser asesinado, cuando pusieron veneno en su comida. Claro, por eso hoy no había ningún guardiay afuera no había carruajes.

¡Darcy se había ido!

¡No, no podía ser! ¡, pensó desesperada, pidiendo detalles del suceso a aquella señora de habito. Ella solo le dijo que Darcy y los demás se habían ido, cuando estuvo a punto de comer estos alimentos alterados.

¡Esto debía ser obra de la persona que conspiraba contra William!, llegó a la conclusión de inmediato Beatriz, negando con la cabeza porque todo el avance que ella había conseguido para conseguir la paz, aquel criminal lo había destruido.

—El rey Darcy dijo que le entregáramos esto—dijo la mujer entregándole una carta, que Beatriz se apresuró a abrir. Entonces cuando leyó lo que decía, se le cayó el alma a los pies.

"Por un momento hasta te creí, querida, pero sigues siendo traidora"

Era la letra de Darcy. Ella la conocía muy bien, ya que en pasado le mandaba infinidades poemas cuando estuvieron comprometidos de jóvenes. Poemas que, en esos años, ella nunca pudo leer porque no sabía hacerlo. Pocos lo sabían, pero fue analfabeta hasta edad adulta. El padre de ella siempre había pensado que la educación solo era para hombres y que las mujeres solo servían para procrear; no para pensar, así que ni ella ni su madre, ni ninguna mujer del reino, sabían leer. A ella siempre le dio vergüenza decírselo a Darcy, quien siempre le pareció un ser supremamente inteligente que la avasallaba con tanto conocimiento. Siempre ante él, se sintió poca cosa y su sentimiento de inferioridad se acrecentó cuando la madre de Darcy, una señora imponente, fue a visitarla aprovechando que Darcy estaba de viaje y se dio cuenta de su condición, al ponerle a escribir, seguramente porque alguien le habría contado su analfabetismo y solo había venido comprobar si era cierto. Esta señora le había dicho que ella no era la indicada para su hijo, al ser una joven analfabeta y que Darcy la rechazaría si se enteraba de esto, además de que él estaría mejor con otra princesa más culta. Ella a aquella tierna edad de diecisiete años, se sintió devastada, entonces apareció William Bowes-Teck IV, quien fue a visitar el reino de su padre y ella pensando que lo de Darcy y ella no tenía futuro, siendo él tan inteligente y ella tan desprovista de conocimientos, acepto su propuesta de matrimonio, persuadida por su padre que le dijo que estaría mejor con un hombre de fuerza en vez de aquel enclenque, como él llamaba a Darcy, además ella lo escogió porque había notado que William IV tenía una mentalidad menos complicada que la de Darcy y tenía atractivo. Craso error. Porque esta misma mentalidad estrecha de miras la había hecho tan infeliz todos estos años. Por suerte ella había solucionado su problema de no saber leer, aprendiendo con los tutores de William, a la par de su hijo, cuando este era pequeño, pero Beatriz confesaba que este día, deseó ser analfabeta otra vez para no haber leído la carta que le dejó Darcy, llena de rencor. La odiaba nuevamente, pensó tratando de no desamorarse a llorar, porque tenía que estar fuerte para la catástrofe que se avecinaba, con Darcy fuera de Baulgrana, pensándolos unos asesinos.