Eww. La conversación está tomando un rumbo muy turbio.

—Demetrio es astuto —murmuro —. Intentará escapar. Ten cuidado.

El rubio se encoge de hombros.

—Entonces meteré una bala en su culo arrugado.

Me agrada este tipo. Asher se dirige a la salida y no dudo en seguirlo.

—Mantente seguro —Le pide a Axel —. Te veo en la Fortaleza.

—Tengan un buen día, muchachos —farfulla Axel.

La extraña sensación de nervios sigue siendo la misma una vez que salimos de la comisaría. Mi miedo se intensifica cuando miro hacia un contenedor de basura. Hay una mujer confundida y abrumada con su pecho abierto y cabello cubierto de sangre.

Está muerta y no tiene idea.

—Hoy te noto más tenso de lo normal —comenta Asher —. No hablaste mucho.

Quito mis ojos de la muerta y caminamos hasta el auto. Antes me sentiría mal por ella, pero aprendí a controlar mis emociones. No soy responsable de nada. Todo es mejor cuando los ignoro.

—La transformación de Allison me tiene nervioso al igual que ciertas cosas.

Asher se detiene cerca de su auto y se cruza de brazos.

—Esto también se trata sobre el señor de las sombras.

El nudo de tensión crece.

—Sí —admito —. Me aterra más que nadie.

Sus ojos avellanas son sombríos mientras me estudia.

—Aun no conozco a ese monstruo, pero puedo asegurarte algo —masculla —. Nadie ha podido ganarle a los Karlsson.

Miro fijamente hacia mis pies, mi respiración atrapada en mi garganta. Quiero contradecirlo, pero no mencionaré nada al respecto. Nadie está listo para la ola de terror que atacará al pueblo, mucho menos cualquiera de los Karlsson.

—Espero que esta vez no sea diferente —me limito a decir.

Asher palmea mi espalda a modo de conforte y me abre la puerta del auto.

—Será una batalla dura, pero vamos a superarlo como todos. Apuesto mi vida, Ronan.

El peligro y el miedo me asfixian. No me permite respirar con normalidad debido al latente pánico que poco a poco asoma su cabeza. New Hope pronto será inundado de oscuridad y no existe alguien que logrará impedirlo.

—La biblioteca se encuentra a dos cuadras —Mi control se está esfumando lentamente —. Debemos leer ese libro.

Asher asiente.

—Vamos.

💚

Hay un espeso silencio una vez que ingresamos a la biblioteca. Mi cabeza inmediatamente se llena de recuerdos eróticos. Maldición, no es un buen momento. No con mi suegro mirando el lugar dónde me encargué de hacer gritar de placer a su hija.

Mis mejillas se sonrojan ante mis pensamientos y me aclaro la garganta. Para ya, Ronan.

—¿Qué buscas exactamente? —pregunta Asher con una ceja ladeada.

Gracias a los dioses me aseguré de limpiar todo la última vez que estuvimos aquí.

Cierro la puerta para enfocarme en los polvorientos estantes. Me encantaría que alguien se encargue de este lugar, pero no confío en nadie. Hay información valiosa, libros que cuentan años de historia, acontecimientos que unos pocos conocen.

Lazos MalignosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora